VIAJE AL CORAZON
DESMATERIALIZACIÓN
POR ERNESTO RIOS ROCHA
Me levanto en la mañana. Veo el ambiente. Veo mi vestido de
carne, feo o bonito, viejo o joven, que importa. Debajo de eso estoy yo, el
verdadero yo pero encima tengo encasquetado un cuerpo.
Y todavía voy y me chanto otro vestido encima y algunos
brillos decorativos para agradar. De tela fina, o corriente; zapatos brillantes
o mugrosos, que importa, pero de acuerdo al personaje que quiero interpretarle
a los ojos que me van a observar y juzgar con gestos de aceptación o
descontento.
La gente pasa y pasa caminando. Me muevo, hago gestos. La
mirada pero sobre todo mis palabras hablan y forman el personaje que represento
en esta vida. ¿Es una obra? ¿Teatro?
¿Una historia? No. O mejor dicho sí, una novela. Es una mentira bien imaginada
o una verdad bien fingida. ¿Realidad o verdad? ¿Fantasía o mentira?, fuimos muy
bien imaginados por el creador, hechos y desechos por su pensamiento, somos muy
importantes, sus hijos, sus ideas, sus historias, espíritus reales, libres,
pensantes y capaces de sentir.
¿Quién soy?, ¿Un profesor?, quizá un ejecutivo, o un
empresario, político, obrero, artista o simplemente un vagabundo jugando a que
soy un individuo más en esta historia.
Actuación, puedo aparentar lo que yo desee. Ellos no pueden
verme porque estoy cubierto con ropa y carne. Es un cine y debo creer que la
historia presentada en pantalla es real, si no, no tendría caso verla, sin
emoción.
¿Quién soy debajo de este vestido carnal?, no soy hombre ni
mujer, ni viejo ni joven, y no tengo sexo. Soy un ser espiritual y todo lo
material está por encima de mí, es el personaje que me toca representar, pero
el actor soy el que está debajo de “eso” y quizá en otra película me tocará ser
mujer y no hombre como ahora.
Me percibí, y me di cuenta de que ellos no me ven. Pero
cuando veo a los superficiales caminar y dirigirse, no me interesa la
superficie ni el personaje que representan, sino a ellos los que están debajo
de ese turrón.
He andado rehusándome a ver el exterior y lo que poseen,
porque en el fondo nada de eso poseen, esas cosas son solo elementos
distractores que nos desvían.
No puedo ser feo o bonito. Quiero ser inteligente o
ignorante. Tanto tienes tanto vales. Subí a mi auto, y el auto era yo, no me
veían a mí, miraban el auto, y me despreciaron, el auto era viejo, y me dije:
no pueden ver, ¡están dormidos!, ¡Ábreles el ojo espíritu!
Al otro día, desperté por dentro de mí y tuve la segunda
aparición. Todo era luz, ahí estaba él, mi señor.
Yo me desmoroné débilmente, me levantó y me dijo que
levantara mi cabeza y no me postrara. ¡No adores al Cristo imagen!, ¡adora la
sabiduría y la misericordia, ése es mi rostro!.
El universo era un cerebro sin contornos, la existencia solo
un sentimiento y la vida como un solo sueño, y dije: nacimos de la mente, ahí
vivimos, ahí nació todo, ahí dentro, en la mente! Él desapareció. Pero un ángel
consejero quedó ahí.
Pasaron desfilando los personajes principales del mundo.
Estaban sangrando todos. Todos revueltos, grandes y pequeños, Krishna, Siddhartha,
Mahoma, Gandhi, Jesús, Confucio, entre los principales pacifistas, y al fondo
los guerrilleros, Napoleón, el Che, Bolívar, Allende, Hitler, etc. Pero al
final estaba el anticristo mirando a Quetzalcóatl. Me dije, ¿Todos los tiempos
en un día?
Cada uno hizo una señal, y cada uno recibió un consejo.
Siddhartha se quitó trapo por trapo desde los zapatos hasta
el bóxer, quedó desnudo y luego se arrancó la carne pedazo por pedazo dejando
al descubierto su espíritu, queriendo liberarse de las pasiones carnales y
apariencias presuntuosas y su personaje quedó destrozado, era un traje llamado
cuerpo humano, un aparato lleno de venas, bien diseñado para funcionar con el
alma de un espíritu; entonces quedó al descubierto su espíritu, y tomó el
vestido que se había quitado, inerte y se lo regreso al ángel para que se lo
llevase al señor juez y le asignara un nuevo personaje en la próxima vida.
El ángel le dio un consejo respectivamente: “Cuida tu cuerpo
porque es el único vehículo del mundo, que nace se desarrolla y muere. No
olvides tu espíritu, porque es el vehículo de la eternidad.
La salud física fortalece el cuerpo. El ejercicio
espiritual, fortalece el alma. Todos moriremos de cuerpo, pero no todas las
almas morirán. Las almas esperan al espíritu para la vida celestial, y el
cuerpo sin esperanza al polvo volverá. Si cuidas más tu cuerpo que tu alma, el
mundo te engaña. Ignoras al creador.
Mahoma se elevó. Gandhi se humilló. Jesús desapareció.
Confucio encontró palabras humanas.
“La carne es sólo el templo donde habita el espíritu. Hay
que mantener el templo limpio y sano, pero en ayuno, para que el espíritu esté
fuerte.”
Cuando el templo se empiece a derrumbar con el tiempo, debes
salir de él y el señor te dará un templo nuevo, para que termines tu oración, o
simplemente te dirá que ya no necesitas templo ni iglesia, y te enviará a
recorrer la eternidad entre jardines y palacios espirituales…
Inicia
la desmaterialización de todos ellos. Ando siguiéndolos. Estoy oculto y me
descubro. Mi auto se acabó, mi casa se derrumbó y mi cuerpo envejeció, y en ese
momento salí de aquellas tres materiales de mi mundo, y me fui desnudo a escuchar
a los personajes que se estaban desmaterializando.
“Ojos
de la superficie carnal que buscan y no ven, y no encuentran. Detrás de éstos
hay otros ojos cerrados aún, pero al abrirse verán al creador.”
“Estos
ojos están dentro, y el creador está dentro de ellos, cúmulo de entendimientos
es éste.”
“Ojos
espirituales que no ven imagen, sabiduría están viendo.”
Los
ojos carnales solo estorban, perturban y materializan.
Me
confundí. Hice muchas preguntas. Lloré, grité, sufrí y en esa oscuridad
empezaron a brotar las respuestas con luz propia y poder.
Ya
era hora de abandonar el mundo y reflexioné sobre mi pareja, mis actos, mi
mundo, la libertad, la manipulación, la infidelidad.
“No
te adueñes de nadie, ni pienses que el amor es una jaula; espera que su corazón
y su voluntad propicien su regreso.”
No
puedes obligar a que su corazón haga lo que no siente. Pero hay algo muy
cierto, que si lo aprisionas se liberará, y si lo sueltas te amará. Porque
pocos saben que el respeto a la libertad es amor, y que la manipulación es una
agresión. Sólo a los niños se les priva de una completa libertad por el cuidado
a su inocencia. ¿Quieres pues que te ame? Conquístalo, ámalo. La fidelidad se
gana, no se exige.
No
soy infiel ante el amor, ni puedo serle fiel a la agresión. Si puedo a la
verdad, no puedo a la venganza.
No
puedo ser infiel ante el cariño, la bendición, la ternura, la sonrisa; pero no
puedo respetar la falta de respeto, ni tenerle amor a la inconsciencia, a la
manipulación, a la ironía, a la indiferencia.
No
es venganza, solo ignoro la ignorancia, me postro ante la inteligencia, busco
la luz y abandono la oscuridad.
Si
vives en la oscuridad y oscureces a los demás, no esperes que alumbren tu
camino. Si moras en el egoísmo y exiges respeto de los demás, no esperes recibir
amor.
El
error más grande es no ser feliz, es no sonreír. Entiende que la amargura también
te deja un conocimiento.
Por
la inocencia de sonríe, por la ignorancia se sufre, pero la sabiduría es el
jugo del sufrimiento, y la felicidad es el resultado de la sabiduría.
Aquel
que no da amor a quien se lo exige, ya está perdonado; y quien se niegue a
sentir amor está condenado.”
Pero,
volví en sí, al mundo. Los vi revueltos, los pacifistas y los guerrilleros.
Desmaterializados. Y yo apenas tratando de unir mis partículas de experiencias
para formar mi ser, y poder mezclarme con ellos.
Cristo
se acercó y disipó mis dudas de porqué el bautista murió sin cabeza. Me dijo
que solo venía a prepararlo y debía irse. Una misión muy corta.
Los
demás le hacían reverencia, menos Confucio que estaba detrás de él, como 500
años detrás, y ya pensaba como él.
Gandhi
estaba inmóvil, flaco y golpeado con semblante de triunfador derritiendo armas.
Todos ellos, los pacifistas estaban vestidos de blanco. Los guerrilleros de gris
y el anticristo de negro.
Pasaron
la película de mi primera parte. Era yo el actor. Vean al hipócrita. El uso de
la actuación y el chantaje, para conseguir mis propósitos. Volteé la frente y
puse un rostro altivo, fuerte y serio para que vean la importante postura ante
la vida.
Pero
volteé a la izquierda y puse un rostro triste y sacrificado para que esta gente
se apiade y me facilite lo que deseo. Y volteé a la derecha y mi cara fue
alegre, sonriente, feliz, por la necesidad de dar esa apariencia. Pero la real
cara y ser, la tuve escondida por conveniencia. Mi actuación fue profesional.
Pero Mahoma me gritó: muéstrate como realmente eres y entiende que la
sinceridad conduce a la sabiduría.
Siguieron
revueltos, entendiéndose sin entender, ésas eran sus miradas. Esperaban la
presencia del señor como les avisó Ezequiel y el ángel consejero.
Quetzalcóatl
estaba a lo lejos. Napoleón y Hitler estaban en el mismo asiento y la cruz de
Jesús a 1700 años. Después el Che destilando bondad y coraje a la vez. El anticristo
estaba cerca de donde aterriza el Señor. Ahí resaltaba su vestido negro en la
brillante pista. Pero cuando bajó el aparato intenso en luz el anticristo huyó.
El cobarde hijo revelado. Y los demás rebeldes vestidos de gris en la
confusión. Los guerrilleros.
Nadie
supo del anticristo, pero todos vimos descender la luz.
“Desastres
naturales, agonía de la tierra, pisoteada por mentes negativas; como tú que les
aplaudes, pero cuando seas bueno el mundo entero te criticará.”
Para
cada guerra les dio un arma, no hay guerra sin fusil, sería tiempo perdido.
“Amigo,
cuando matas con fusil, no matas la maldad. Cae el cuerpo, y su espíritu va y
se mete en otro cuerpo imbécil e ignorante, y se vuelve a manifestar la misma
violencia.
Amigo
Zapata, amigo Che, tiren el fusil, que el veneno para quemar la maldad es la
palabra, el ejemplo de la humildad. El que mata obtiene gloria con los hombres,
no con el creador. No les mates el cuerpo sino el espíritu de maldad, con el
arma de la sabiduría.
Los
malos son como el agua sucia contaminada, no tires el agua, mejor pásala por un
filtro, conserva el agua limpia y expulsa la suciedad. No derrames más sangre.
Cuando
el creador te dio la máquina, también te dio un manual, léelo bien, practica
antes de usarla, porque en esta generación nacieron muchos discapacitados no
sólo del físico sino también del entendimiento.
No
metas la mano en la parte cortante porque te quedarás manco. No creas que
alguien propició tu éxito o tu desgracia. Tu máquina solo tú la has manejado y
nadie más, tú te lo has ganado con tus maldiciones o bendiciones.
Cada
coraje, negatividad y maldición es como un grano podrido entre el granero de tu
vida y eso es contaminación.
Cuando
entras en la cámara del pecado y sales de negro, en vez de blanquearte para
aparentar lo contrario, mejor límpiate y no vuelvas a entrar…
LAS VIDAS
Busqué al creador. Pero no salí del planeta. Qué caso tiene
salir del planeta sin salir del ordinario estado de ánimo. Yo estaba desnudo.
Sin mi carne.
Caminé con los hombres de la tierra y llegué a los ángeles
del cielo, y pedí permiso de pasar.
Con los hombres no me detuve a platicar, pues no pudieron
darme señal, y me quisieron deprimir.
Con los ángeles abrí paso pero me pidieron muchos papeles,
esperanza, fe, amor, paz… tampoco con ellos me detuve, pues yo buscaba al jefe;
pero él me dijo: regrésate, en un minuto estaré contigo.
Desperté de mi trance, agonizando. Una viejita me curaba las
heridas, y entonces entendí la presencia del creador en aquel momento a como él
me lo dijo.
Aparecí otra vez con mi vestido de carne. Accidentado.
Venía por el camino de la inocencia, pasé por la vereda de la
ignorancia, me topé con la desesperanza; que me aventaron al sufrimiento. Pero
éste me llevó al conocimiento el cual estoy caminando y en esa dirección brilla
en el horizonte la sabiduría y detrás de todo esto la eternidad.
Gracias. Gracias por el accidente que me hizo al fin reflexionar.
Es bueno saber que esta situación difícil y embarazosa, es el
grano de oro en mi desarrollo mental de entendimientos.
La sabiduría es el resultado del sufrimiento procesado con
inteligencia.
El ser humano vino a éste mundo a sembrar, cosechar y comerse
el fruto. Pero después, su ser sale de su vehículo físico y asciende,
llevándose sólo el conocimiento, con la única idea de la armonía y la
eternidad.
“Que tu cuerpo no te arrastre a las profundidades, mejor tú
condúcelo a las alturas.”
A este mundo vinimos a formarnos no materialmente porque la
carne no puede transitar mundos espirituales, pero el espíritu si recorre
incansablemente los senderos más complejos de la existencia.
Cuando ya entendamos que lo más importante es el espíritu, y
le demos su importancia, entonces ya no regresaremos a este mundo.
Escuché de nuevo las palabras del creador:
El cuerpo biológico superficial, le hace creer a tu ser
esencial que eres hombre o mujer, pero en realidad no eres menos que un ser
espiritual virtuoso. Tu cuerpo biológico es un vestido pasajero que no deja que
veas tu esencia.
Evita que tu vestimenta y tu superficie corporal física
eleven tu ego, pues eso no eres tú. Estás debajo de ese vestido, y ese cuerpo
mortal. Eres un ser eterno sujeto a la ignorancia o la sabiduría, según tu
deseo central.
Pero yo aún estaba accidentado, como suicida. Y por un rato
fui el hombre más carnal del mundo. La carne es débil.
Un alma feliz en un cuerpo adolorido, una mente pobre en un
cuerpo rico. Van coincidiendo las penas con los conflictos, confluyen las
tristezas y las depresiones. Todo revuelto cae en un agujero oscuro removiendo
carne y sangre viva, y al final, a ese jugo, se le llama sabiduría.
Tengo pies sanos, pero mi mente me hizo inválido. Tengo vida,
árboles, comida, flores, pájaros, casa, hijos, carros; pero mi mente me condenó
al suicidio.
Y me dije: Ay mente, cantas, vuelas, ríes, creas, amas. Tú no
necesitas un cuerpo, ya déjalo y vete al paraíso.
Tomé mi mente y me la puse. Aparté el cerebro de mi mente. Y
puse mi cerebro en un ataúd lejos de mí.
Recordé mi vida, la primera vida, el accidente. La segunda el
suicidio, la tercera la explosión.
Trabajé mucho. De tanto trabajar, un amigo mío se hizo rico.
Su empresa explotó y con ella nosotros. Yo caí desnudo en un campo de libros,
flores y amigos; pero él cayó vestido en un desierto sin agua y con sed.
El verdadero conocimiento no es el que aprendemos en la
escuela, ni tampoco la profesión que nos da de comer, éste es barato. El verdadero,
es caro. No se puede comprar, se obtiene con sufrimientos, con situaciones difíciles.
Insisto, en este mundo no hay sabios, solo aprendices, solo
aquel que regresó de la eternidad para mostrarnos el camino. Sólo él.
Venimos a esta vida y no entendemos a qué, y tenemos que
regresar, resucitar, reencarnar, hasta que entendamos que la vida no es la gran
oportunidad de vivir; es una escuela, de enseñanza, de tropiezos, llantos,
enfermedades, de sonrisas y lindas emociones.
Se da por etapas, aparentemente largas. Hoy eres niño y
mañana abres los ojos y ves las arrugas, el tiempo de prisa y la vida se acabó
de pronto.
Las arrugas empiezan a preguntar el nuevo rumbo. ¿Qué hay
después de la vida? ¿Otra vida? ¿Mejor? ¿Peor? ¿Más larga y hermosa? Sí. Sólo
es un paso, y se llama desmaterialización. Solo hay que saberlo y creerlo. Su
intención no es darnos una probadita de existencia; somos sus hijos y nos
ofrece eternidad…Esa es la verdad y la realidad.
Y me dije- Todo lo que estoy escribiendo en este libro es ‘’Mi
Verdad’’. Nadie escribe lo que yo. Yo no escribo lo que nadie. Y ‘’La Verdad’’
es que cada quien escribe ‘’Su Verdad’’ y existe en su propio mundo, habita en
su propio universo, los cuales son en cantidad proporcional a las mentes que
escriben su propia ‘’Verdad’’ y la actúan y la convierten en su realidad.
Los
problemas empezaron al comprender la realidad. Por fin lo sentí. El creador, en
un súper aparato tecnológico inimaginable. Nunca pensé que peleara contra el
mismo. Su mano izquierda discutía contra la derecha. A la diestra su hijo el
bueno. A la izquierda su hijo el malo.
En su mano el libro de la vida,
escribiendo la historia de nosotros, la humanidad.
Yo estaba en mi ser y mis ser en
mí, y mis dudas se hicieron visibles ante él. Y le pregunté, y me contestó:
“Soy uno solo todo es uno, uno es dos, dos es dualidad y dualidad es unidad”.
Tenía un gran brazo derecho en luz y el
otro en la oscuridad, pero la oscuridad abarcaba solo el brazo izquierdo que se
movía constantemente con ira.
Pero
la luz abarcaba todo el cuerpo y me dijo:
“La
necesaria oscuridad tocó tu mente y tus sentidos para que pudieras distinguir
la luz”.
En la parte oscura del aparato
tecnológico inimaginable estaba el innombrable gritando para ganar terreno y
adeptos, pero no podía soportar la luz de su derecha, y el ser supremo que
estaba entre los dos, tomaba control
sobre ellos.
El hijo bueno, y el hijo malo,
ellos dos eran uno, y uno era el ser supremo.
Entonces me estremecí y sentí dos
fuerzas contrarias en mi interior que peleaban entre si, y entendí la semejanza
con el creador.
Caí
en oscuridad y el tentador me quiso probar pero yo aparté mis pasos y cuando sintió rechazo le dio paso a
la luz.
De
repente hubo una transformación en cada lado del creador. Era un feto que se desarrollaba,
en la luz nacía un hombre de túnica blanca, crecía y se sentaba a la diestra,
al lado derecho con un poder impresionante. En la oscuridad crecía un hombre de
malos pensamientos, vestido de negro y al lado izquierdo.
El creador levantó las manos y
las estrechó, entonces salió una gran chispa de energía al juntarse el polo
positivo y negativo y corrió por el centro de la figura del ser supremo.
Y
los vi salir por separado de aquel supe aparato tecnológico. Primero Emanuel
salió de la luz y bajó hasta pisar tierra, algunos le gritaban Miguel de
arriba, pero otros le decían Jesús, los de abajo.
Tenía una mirada tierna y
recorrió su vista a toda la geografía terrestre bendiciendo todo lo que miraba.
Caminó
y caminó después se sentó a cenar pero luego fue acribillado por los Judíos.
Después el innombrable salió de
la oscuridad, descendió hasta pisar tierra. Su violencia era como la de un
dragón. Los de arriba le gritaban Lucifer y los de abajo Satán.
Una vez que salieron de su lugar
de los dos brazos del creador, cada unos por separado actuaban en contra, y aún
siendo hermanos chocaban, y al chocar salía la chispa que formaba el
conocimiento humano.
Jesús habló y los judíos
protestaron, entonces él fue regresándose a la diestra del creador, prometiendo
descender nuevamente después de dos tiempos.
Satán al verse solo en la tierra
empezó a tentar y tentar y con su violencia destruía cosas y cuerpos. Y yo le
pregunté al ser supremo. ¿Por qué con tu izquierda destruyes y con la derecha
construyes? Y me dijo: para que aprendas a usar las manos y entiendas que la
derecha es mejor, y más poderosa. Entonces maldije a Satanás. Y me dijo: No, él también es mi
hijo. Todas las intenciones de Satanás
necesitan ser autorizadas por el creador para poder convertirse en actos. ¿Y
quién es el creador? Pregunté.
Dijo:
el que está en el centro de mí ser supremo. Y prosiguió “La sabiduría es el
fundamento de concebir el conocimiento del ser espiritual, desmaterializando
los sentidos”.
En esos dos tiempos, Satán
anduvo destruyendo el templo. Y al final se disfrazó de blanco para que no
viéramos su oscuridad.
Una
vez disfrazado de ángel de luz se metió
en un aula y empezó con apariciones matemáticas, hasta encontrar formulas
explosivas para pelear. Hacía estremecer la tierra y con ventarrones hacía
correr agua por encima de las cosas. Pero después como un ángel brillante formó
una computadora y se sentó en ella. Y empezó a aventar pantallas alrededor de
la tierra hasta comunicarse globalmente.
Allí
empezó el principio del final.
EL ANTICRISTO
Ahora, vestido
de blanco, el anticristo tomó en sus manos un fusil, todo tipo de explosivos,
un cerebro y los introdujo por el lector
de la computadora y al abrir nuevamente apareció un circuito integrado el cual
presionó hasta convertirlo en un grano de arroz y a estos los reprodujo en
millones. Paso un hombre caminando al cual se le mostró un billete donde el hombre
vino a él y se le puso en su mano derecha el arroz de grano inyectado, un código
de barra y la numeración que servía en transacción comercial.
El creador
alzó su mano derecha para decir que no tardaba la venida del salvador.
Ese tiempo
destructivo en el que anduvo la oscuridad, al anticristo le fue concedido
actuar, tiempo determinado, propósito y fin de concebir la verdad por medio de la mentira.
El temido
hijo revelado puso el trono en los lados del norte de lo alto. Nació un niño en
los lados del norte de la tierra con su misma característica. Creció, caminó, fue militar y político, organizó países en
alianzas y los manipuló. Se sentó ante su computadora. Con un clic salvó al
mundo de un caos económico. Unificó la
moneda y luego la hizo desaparecer. Dibujó tres caracoles espirales y
aparecieron tres ranas. Los medios iluminaron su figura y entonces se convierte
por fin en el esperado sabio. Arrebató, persiguió y cubrió de angustia total al
mundo. El chip era la moneda y la llave de todo. Estuvimos vigilados.
El creador volvió
a levantar su mano derecha y sonó una trompeta. Hubo lluvia de humanos de abajo
hacia arriba perdiéndose en el cielo.
Envió diez
aviones a Judea y seis a Jerusalén y dispersó,
pero con un temblor se partió la tierra de los olivos apareciendo un
valle donde se instaló. Un valle lleno de armas. La guerra fue en la tarde. El
cielo entero se ahumó. Lo demás fue
nocturno, el viento, los meteoros, los venenos y al final el temblor. Tremenda
escena del valle de Meguidó.
Un hombre estaba en el monte escondido, intacto,
y se levantó cuando ya pasó todo. Miró a otros salir del monte pero casi todos
eran mujeres. Voltearon al cielo ahumado y se estaba abriendo una inmensa
puerta de luz donde aparecía un súper aparato tecnológico como la nave del
templo en el rio Kebar. Descendió la figura de un brillante trono, luz y fuego,
enorme, con cuatro ruedas brillantes de plata y bronce y venían doce acompañándolo, toda una civilización, una
ciudad entera, cuadrada y con doce puertas, tres en cada lado, ciudad y nave
flotante como palacio de gobierno.
Ellos bajaron
del aparato y se pusieron su traje carnal respectivamente. Habían sido raptados
de la tierra. Empezaron a vestirse con el traje asignado y como se mete
uno a un turrón con cierre a si se
metieron al inerte cuerpo de carne echando a bombear el motor con sangre que
corría por los cables del funcionamiento. Tomaron la información del espíritu
introduciéndola en una memoria con forma de cerebro duro. No cabía toda y
dejaron fuera los pensamientos y poderes espirituales e introdujeron solo la
percepción de los sentidos, hasta que la memoria aumentara su capacidad de
albergue.
Se les dijo
que formatearan el cerebro inclinándose ante la proyección que se les enviaba
de arriba. Voltearon sus ojos hacia adentro y entendieron la pequeñez del mundo
exterior.
Cuando ellos
descendieron, la nave empezó a moverse circularmente como torbellino y aventó una luz al valle de Meguidó, al oriente de
Jerusalén cerca del mar, y del mar salió una bestia la cual estaba llena de
cabezas y con una octava cabeza llena de cuernos y naciones unidas, aliadas, y
una mujer elegante, hermosa prostituta,
ebria y malvada con forma de iglesia Romana la cual estaba en el vientre
de la bestia por que se la había comido, devorándola de manera sangrienta.
Pero la
Bestia ya destruida, saliendo del mar,
cayó en un pozo de meteoro ardiendo y este voló al abismo quemando todo rastro.
En el centro
de Meguidó aparecía un cuerpo de hombre falso, un profeta negro, el cual se fue
hundiendo hasta llegar al hoyo abismal
del centro de la tierra del núcleo ardiente.
La nave
aventó luz hacia arriba y cayó un dragón amarrado que estaba vivo. Y así
seguirá, todo el día, pero en el segundo día ya desatado viene a sembrar en lo
sembrado, a ensuciar lo limpio,
regalando carnes a todos los
perfectos espíritus para una nueva contaminación voluntaria, con el propósito
de que el creador haga su segunda selección de sabios, que conducirá al largo
túnel de la eternidad.
¿En que gastas el tiempo?
Me preguntó- le dije: no lo se.
¿Sabes donde viven los aprendices? - me preguntó -le dije:
Estudian, trabajan, se divierten, viven.
“Los aprendices viven en un mundo material y poseen carros,
edificios, empresas y todo tipo de material lujoso; esposas, hijos, padres y
todo tipo de familiares; escuelas y maestros, y su mayor deseo es abrirse paso
exitosamente en la tierra, compitiendo para lograr aplausos del mundo ignorando
la verdadera idea de la existencia”.
Los aprendices-prosiguió- “no saben su propia procedencia, a
que vinieron ni a donde van. No saben que al ser creados nacieron de un vientre
espiritual y que tienen que pasar la metamorfosis de 7 vidas para crecer
mentalmente y llegar al hogar de los sabios. Traen una cultura milenaria y sus
padres les enseñaron el materialismo. Se les va la vida en estudiar la forma de
saber como comprar toda cosa material y llenar
el alma de adornos de todos
colores acumulando decoraciones y recibiendo aplausos de sus logros. Su
juventud esta llena de sudor y su vejez de enfermedades, pero no desean morir
sin haber alcanzado casas, coches, viajes y sociedad”.
“Los aprendices estudian y leen toda la matemática terrenal,
vagan por el mundo exterior como la orbita de las estrellas y le dan vuelta a
la misma dimensión. Estudian todo tipo de organismos físico biológico y se
olvidan de su esencia y significado. Compiten y crean armas para destruirse”.
Estuve callado escuchando, y toda esta información andaba
por el aire y entraba por mis sentidos hacia el cerebro. Pero la extraje y la
guarde en el espíritu de mí ser para prevenir una fuga de información.
El señor me preguntó de nuevo: ¿En que gastas el tiempo? Y le dije: trabajo 8 horas, como, duermo,
viajo y me divierto. ¿Qué has logrado?
Me dijo: le dije dos casas, cuatro coches,
muebles, ropas finas y tres hijos
empresarios. Me preguntó la edad-le dije 80 años. Se quedó callado.
Entonces sentí molestias en el arranque y me trasplantaron
un arranque usado. Después mi motor no inyectaba y el mecánico me puso el
filtro del aire y me lavó los inyectores.
Después de esto, pasaron unos cuantos años, y el creador me
llamó. Ven. Me marcó un camino con una luz proyectada de arriba. Yo
llevaba cargando todo el fruto de mi
vida, pero al final de este iluminado camino había una puerta de entrada.
La carga de todo el trabajo de mi vida cada vez era más
pesado y empecé a soltar maletas de cosas vanas que solo eran adornos y lujos
innecesarios. La ropa, el techo de mi casa, muebles, autos. Cada vez me sentía
más liviano pero había cosas que no podía soltar, como el pincel, la guitarra,
la pluma, mis libros y todo tipo de aparatos eléctricos que contenían
información valiosa.
Finalmente llegué a la puerta de entrada del mundo
espiritual para pisar el eterno paraíso celestial. Ahí había un guardia que no
se veía pero si podía percibirse.
El guardia me dijo: ¿A dónde vas? – le dije: Al mundo espiritual.
Me dijo: ¿De dónde vienes?- le dije: De la tierra. Me dijo: “la materia no
puede transitar mundos espirituales”- ¿Qué debo hacer?-despójate y entra
desnudo, pues tú no eres tu físico si no tu conocimiento. Solo puede entrar el
conocimiento que tienes. Ese eres tú. Me dijo: ¿No tengo cuerpo? -Ese es tu
cuerpo, solo la información.
Entonces empecé a extraer todo tipo de información de los
objetos que cargaba. A la guitarra la música y el sonido, a los cuadros el
tema, a la pluma los pensamientos, a los libros el conocimiento, a mi celular
las palabras y saque la energía de los
aparatos con todo y símbolos. Después aventé todos estos objetos vacíos
llevándome la esencia y la puse en mis bolsillos. Me dijo: Momento, sal de tu
cuerpo y podrás pasar. Pero mi cuerpo tenía muchos hilos que me ataban al mundo
y estaban fuertemente amarrados a ciertas cosas y vivencias. No podía irme sin
cortar hilos dependientes.
Corté un hilo y solté mi hogar. Corté otro y solté a mis
hijos. Un tercero y me liberé de todo recuerdo material, pasión y deseo
mundano. Expiré mi espíritu y aventé el cuerpo carnal inerte al vacío
terrestre. Crucé la puerta. Dejé el hogar de los aprendices y pisé el hogar de
los sabios….
EL HOGAR DE LOS SABIOS
Empecé a desconectar los cables, mis venas biológicas de los
sentidos, desabroché mi carne, abrí el cierre de mi cuerpo y salí de él. Expiré. El cuerpo quedó inerte.
Quise ver mi espíritu desnudo y no pude ver nada, solo saber. Supe, no vi. Oía,
sentía y sabía, pero sin imagen. Pensé que algún cable permitía la imagen y
viajé al centro de mi espíritu y me percaté solo de que estaba viendo palabras,
dichos, refranes, conocimientos, experiencias, sentimientos… información… ese
era yo… información. Tomé algunas frases y las arranqué de mí porque me
parecieron molestas y me di a la tarea de formatear un poco mis memorias y
quitarles el virus maligno que me opacaba la luz.
Si, la luz. La luz es
un gran tema. Soy luz.
Desde entonces pude entrar y salir de mi propio cuerpo,
porque el hogar de los sabios eso es, viajar y navegarme internamente con el
espíritu independiente del cuerpo.
Regresé a mi exterior y multipliqué la distancia viajando a
900,000 mil kilómetros por segundo solo vi oscuridad durante una hora. Y la
estrella más lejana era un ojo formado por puras galaxias que ya de más cerca
pude distinguir.
Apareció de repente una imagen y me dije, no tengo un ojo
pero veo imagen, que impresionante. Era holográficamente un hombre de 32 años.
¿Quien lo proyectaba¿ nadie. Y me dijo. Pon mucha atención brillante, le
contesté, me llamo Ernesto, y me dijo, desde hoy eres brillante. Le dije. Te
escucho.
‘’Eres un mecanismo componente de un gran mecanismo. Eres una célula de una gran molécula de
células de un cuerpo hecho de muchos cuerpos que juntos forman la unidad de
cantidades duales’’.
Le dije. No entiendo.
Eres ser de luz en un
espacio oscuro.
El espacio era inerte y oscuro. Nada, inmóvil y sin vida.
Pero al fin era espacio. La luz estaba en algún lugar. Lo raro es que el
espacio estaba vacío y oscuro y la luz
estaba al contrario con demasiadas cosas, llena, fuerte, con vida, pero no
ocupaba ningún espacio, solo estaba sin poderse mover. Pero entendí que la luz
era dueña del espacio porque empezó a meter sus células de luz al espacio y ahí
andaban viajando con órbitas circulares año tras año, milenio tras milenio y de
vez en cuando se desorbitaban y chocaban
con alguna molécula llamado planeta.
El señor de 32 años holográficamente me infló para
explicarme.
Con un dedo tomé un planeta y me lo acerqué a mi gran ojo. Y
vi. Vi a esos animalitos llamados humanos de los cuales salí yo, Ernesto, hoy
brillante y pregunté muchas cosas.
Dijo- empecemos, creo
que aun no entiendes, ya transpórtate aquí, deja el planeta y ven.
Dijo- ¿Cuántas vidas tienes
¿ dije no se. Me dijo. Llevas 5. Le dije dime por favor.
Energía, moléculas,
alfa, omega. Memoria, mente, pensamiento y sentimiento. Si piensas, sientes y
si sientes piensas. Ahí existes, pero se te puso en un pequeñísimo cuerpo de
humano, el cual no existe si no solo te fue grabado en la memoria. Una vez
convertido en el personaje tú grabaste lo demás con tus 5 vidas.
Te diré que pasa con todos los humanos.
‘’Ellos piensan que son de carne y que no pueden volar, por
eso no pueden volar porque creen y piensan que no pueden. Mal interpretan la
fe. Creen que la fe es un mono. Una estatua o una virgen de materia. La fe es
lo que crees que es y eso es, lo que crees, es tu fe. Nada te salva, solo tu
propia fe interna. Si pones tu fe en una piedra, esa piedra según tú te salvó,
pero no fue la piedra. Tu fe te ha
salvado, no la piedra.
Pero hay una gran mente universal a la que ustedes le llaman
Dios.
En la primera vida, fuiste mujer y te llamabas Flor, eras piscis
y eras fea, con dinero y desarrollaste un gran deseo por ser bonita.
La segunda vida
transformaste tu cuerpo moldeándolo a la sensualidad, y te compraste miles de
cosas materiales las cuales siempre representaron un conflicto en tu vida
empobreciendo tu espíritu.
Hasta la tercera vida te diste cuenta que había un espíritu
dentro de ti. Alguien más existente dentro de ese cuerpo que ya estaba en pos
de una transformación sexual de mujer a hombre. En ésta vida floreció tu
curiosidad sexual y gastaste el tiempo en deseos carnales y mundanos y el
tiempo se te agotó sin florecimiento espiritual.
Tu cuarta vida ya fuiste elegido para habitar un cuerpo
masculino pero con todas las costumbres sensuales de una mujer. Eso te
confundió y además eras pobre de material. Tu ambiente fue difícil, conflictivo
y al fin empezaste a ponerle buena información a tu memoria y tu espíritu
inicia su fortaleza. Sin embargo no creías en ti.
Escribiste mucho, cantaste, y te pusiste a pintar a los 50
años tiempo de humano, pero solo desarrollaste un gran deseo por ser alguien
importante en el mundo y aun no te diste cuenta de alimentar tu espíritu y
saber que eres el viajero, y ese eres tú, el que viaja en el tiempo y vidas.
En tu quinta vida… la que acabas de dejar a los 84 años,
porque tú quisiste dejarla, porque tú decidiste al fin cambiar. Esta quinta
vida pudiste observar y conocerte, tu espíritu, tu información y al fin te tocó
estar ante mí. Yo soy el camino…
Te diré lo más importante… atención.
Veo en tu holograma de conocimientos que aun deseas
grandezas humanas, aplausos del mundo, dinero, viajes y demás cosas vanas, y
que quizá tengas que vivirlas para poder sobrepasar al plano de la sabiduría ya
que te des cuenta, del poco valor que tienen.
Te diré. Y dentro de un poco tiempo te probaré. Te diré
ahora. Nada de esas cosas humanas existen, son visiones de tus sentidos, el
tiempo las contiene y las graba en tu memoria mientras estás distraído portando
un cuerpo humano. ¿Que como sé eso¿ yo
la vi en ti, en tu holograma de conocimientos grabados de experiencias humanas,
la sensualidad, la pobreza, la riqueza, la sexualidad, la tristeza, lo único
que no vi es lo que aun deseas… el aplauso y la fama… si hubieras vencido esto,
ya no regresarías al planeta si no que serías liberado del pesado y cansado
cuerpo humano y te quedarías en la gran ciudad espiritual eterna que yo
conozco.
Ahora me voy. Pero te diré el final. Y te probaré con varios
cuerpos para indicarte y puedas vencer esos problemas mundanos.
Pasará en un momento un recuento y estarás metido un día en
cuerpos diferentes para que sientas la diferencia de cada uno de los vehículos
y lo que puedes aprender de cada uno, y concluyas en liberarte al fin hacía el
espíritu y cortes todo tipo de dependencia humana. Cada día en un cuerpo. Por una semana. Tiempo humano. Después de esto te irás en el espíritu, te
transportará alguien hacía la conexión humana y se te dará el cuerpo necesario
para tu sexta vida la cual será determinante.
Es decir al fin entenderás la creación de la luz en el espacio de
oscuridad.
Abrirás los ojos, dejarás la oscuridad y serás brillante más
que nunca’’.
BRILLANTE EN 6 VIDAS
Yo, brillante, me fui
a la cámara de cuerpos a como se me ordenó. Se me conectó a un cuerpo de grandes
riquezas, empresas y millones y una cantidad grande de esclavos a mis
órdenes. La riqueza me distrajo las 24
horas de ese día. No hubo tiempo de
reflexionar y solo pasé contando dinero, empresas, viajes y carros, con gran
estrés pues no quería desperdiciar nada.
El segundo día estuve en un cuerpo gordo y solo pasé más de
20 horas tratando de adelgazar y desperdicié mi tiempo espiritual.
El tercer día fui muy bello y no salí del gimnasio porque
esa vanidad me atrapó tanto que perdí la conciencia de la existencia interna y
estuve luciendo y presumiendo al mundo mis atributos.
El cuarto día fui muy
pobre y no hice otra cosa que buscar la manera de ser rico y ahí se me fueron
las 24 horas del día.
En cada conexión resultaba más preocupado y más reprobado
por el señor de 32 años. Mi memoria holográfica no contenía en esta ocasión la
forma de formatear solo había que reflexionar sacando cuentas para figurar una
nueva información más sabia.
El quinto día era un artista, un poco raro, ya no me importaba
el dinero, pero si quería aun un triunfo y estuve tratando de conseguir aplausos
día con día, de los humanos, no de Dios y quería alabanzas y grandezas. Y ser tomado en cuenta como sabio. Y me dediqué a publicarme por la mañana,
periódico tras periódico tratando de grabar mi nombre en la tierra, el cual se
borraría en las mentes como se hace en cualquier formato, pero al darme cuenta
empecé a dar gritos de coraje, y a medio día del quinto reaccioné y me fui a mi
cuarto y cerré los ojos por una hora y es ahí donde vi la imagen de mis ojos
abiertos ante la luz de la sabiduría.
Regresé por la tarde y en una sola hora llamé la atención del mundo
porque rechacé a todo ser humano como un ser pensante y regañé a todo el que se me acercó.
Mi sexto día fue mejor.
Estuve en un cuerpo virtuoso, era un humano mágico de esos pocos que
curan con mover sus manos, de los que proyectan poder. Es que ya estaba consiente internamente del
brillante que estaba en mi. Miré con
desprecio lo material y ya no sentí deseos de aplausos del mundo, ni de viajes
pues ya conocía el planeta entero con mis visiones, viajaba de forma astral, en
mi interior y me pasé más tiempo viendo hacia adentro que al exterior.
El séptimo día era la prueba más dura. Nací discapacitado. Adolorido en silla de ruedas y ciego
además. Vergüenza, bochorno, miseria,
tristeza, desprecio, conflicto. Pensé de
inmediato en suicidio. Este era el
cuerpo más miserable y el día más complicado.
Fue mi día más reflexivo. Llegó
el coraje, la impotencia y la violencia, se presentaron ante mí y quisieron
invadirme e inmediatamente quise pensar en injusticia pero dije no. No.
No. Solo había que pasar un día
dentro de ese cuerpo y sacar la información y grabarla en mi memoria
holográfica, que en ese momento, como
humano, para mi era incierta y como un sueño acabado de despertar, sin
existencia. Pero me antepuse y logré
poner mis ojos en el espíritu y quitarlos del exterior y así pude mitigar el
dolor físico.
Este fue mi mejor día.
Solo esperaría el juicio del señor de 32 años.
La prueba estaba lista.
Había quedado escrito mi comportamiento en un libro de la vida, el juez
lo abrió y me fue asignado el cuerpo de mi sexta vida.
Hice algunas preguntas. ¿Como es que de acuerdo a lo escrito
fue tomada esta decisión ¿ entonces escuché la voz del gran juez. – Acércate
- me dijo. Caminé al estrado cerca del trono y le dije –
aquí estoy señor - me dijo – dime
padre. Dije, padre.
Me dijo – cuida los talentos que te has ganado esta vez.
Úsalos bien. No los presumas. Ocúltalos. Solo cuando tengas que ayudar
úsalos. Será un secreto mientras no sea
necesario usarlos. No te sientas
superior a nadie.
Si padre –contesté.
Se me entregó un cuerpo abierto y yo entré en él y me
conecté a los sentidos y mi energía empezó a circular por las venas y cada uno
de las refacciones funcionó moviendo una a otra y en cuanto entró la energía el
pulmón succionó el aire y echó andar el motor pues mi batería estaba
potente. Entonces tomé mi holograma de
memoria y la conecté al cerebro con todos sus cables y así fue como en unos
minutos estaba succionando gasolina de mi boca al tanque para que la
circulación automática por las venas lograra la estabilidad del funcionamiento.
SEXTA VIDA
Una vez de pie aun no estaba en tierra. Alguien me dijo gira. Y giré.
Giré poco a poco y cada vez más rápido hasta desaparecer y entonces me
transporté y fui a caer al vientre de mi próxima madre. Mi cuerpo era masculino, muy pequeño y de
color blanco, bien parecido, ojos grandes y claros. Un niño normal. De manos juguetonas. En pocos años demostré prodigios y me
llevaron con un brujo.
El brujo me miró asustado.
Yo con 5 años, lo veía a los ojos.
Por fin puso su mano en mi cabeza queriendo descubrir algo pero su mano
ardió con una gran llama y el echó de
gritos quemándose. Me sacaron de prisa del lugar. Y no volví a hacer prodigios durante 7
años. Durante esos años me salía de mi
cuerpo, noche tras noche a cierta hora silenciosa, y recorría el universo
platicando con los astros, anotando tiempos orbitales por estrella así como
velocidades y posibles choques y accidentes con repercusiones que pudiesen
afectar la tierra. Vi todos los
insuficientes observatorios terrestres y los juegos astronómicos, las mentiras
astrológicas y los cuentos y mitos de las interpretaciones proféticas, de las
culturas y religiones. Descubrí los
verdaderos cambios evolutivos de mi planeta y los tiempos de los efectos
exteriores de la superficie así como la respiración de sus volcanes y
agrietamientos de frío y calor por causa de su sol. 7 años observando.
A los 12 años dejé mi casa.
Visité hospitales y curé infinidad de enfermedades de mis hermanos
humanos sin que ellos lo notaran.
Un día regresé a mi casa y ya estaba acechado por un hombre
oscuro. Mis sensores sabían todo
eso. A eso de las 3 a. m. salí de mi
cuerpo para observarlo. Y vi entrar a mi
casa un hombre alto, oscuro y con la mirada roja. Tenía un hacha e hizo pedazos mi cuerpo.
Apareció el hombre holográfico de 32 y me dijo sánalo. Yo me sentí incapaz y dije solo conectado he
hecho prodigios, me repitió – aun no es tu tiempo aquí, sánalo y regresa. Levantó su dedo hacia mi memoria y grabó
salud. Y en ese momento al voltear
estaba sano y volví a la tierra.
Al levantarme estaban una serie de doctores sorprendidos, la
prensa, y un escándalo de miedo.
Me convertí en un ser mundialmente famoso. No di testimonio. No escribí nada. Regalé los regalos y rompí propuestas y me
desligué de todo lo que tuviera que ver con comercializar talentos. Me despojé de la más mínima tentación
económica y material, ya que día a día mi padre puso la comida en mi boca sin
problema.
Me escapé y disfrazado en diferente identidad comencé a
explorar mi cuerpo.
Apareció una mujer
pasando con gran sensualidad y vi que mi cuerpo sintió una reacción. Le di rienda.
Dejé que sintiera. Analicé y
cerré temporalmente mi ojo sabio interior.
Abrí el sentido de la superficialidad y mis ojos carnales
empezaron a darle tentaciones a mi cuerpo.
Me junté a la mujer, hermosa de carnes bellas y semblante sexual. Al poco, me convertí en un carnal cualquiera
abriendo al máximo los sensores carnales con un gran deseo de comerme el mundo
y figurar con material como el mejor poseedor de los reinos, de féminas y poder
material.
Entonces vi oscurecerse una de mis manos, la derecha. Como si aquel hombre oscuro hubiese dejado un
virus convertido en deseo mundano y esto hubiese provocado un cáncer
espiritual. Entendí que había una enfermedad, pero era interna y
se estaba reflejando desde mi mejor instrumento, mi mano derecha la de la
proyección de luz. Al voltear adentro
veía apagándose el holograma.
Apareció el hombre oscuro y me tomó la mano con su derecha y
la cabeza con la izquierda. Y dejó caer
todo su virus sobre mi memoria. Entonces
caí. Y volví a ser intervenido por
ambulancias y hombres de blanco. Me
amputaron el brazo pero al parecer el mal estaba también en mi cabeza y mi
pecho. Borroso los vi con mi ojo
interno, sin claridad. Y me alejé de
nuevo del mundo.
Aparecí una vez más ante el señor el cual me dijo regrésate
y pelea con el oscuro. Le dije no puedo,
dame armas. Sacó una espada de dos filos de su boca y me
explicó. Esta espada es el verbo, la
lengua, la palabra. Desenvaina y abre el armario y corta los sellos del libro
de instrucciones, lee y vence al oscuro.
Esto me pareció interesante.
Mi holograma cada vez estaba más débil y mi información más
opaca, confusa, borrosa, mi memoria infectada y mis ánimos pocos. Sentí gran miedo. Ya no deseaba descender otra vez a la tierra
pero ahí acabaría mi viaje de vidas en caso de no hacerlo, perdería mi espíritu
holográfico y mi alma existencial y eso
era lo más terrible, perder la gran ciudad de luz eterna.
Tomé la espada de mil palabras y corté el candado. Abrí el
baúl del armario y corté los sellos. El
libro de los sellos me decía que dentro del arma del baúl estaba cada una de
las virtudes y como usarlas. Tomé la
única arma que había. El arma era una
antorcha de frases y la frase predominante era fe. El arma tenía grabado fe. Salía de ella una llama de luz. El libro hablaba de dualidad cosmogónica, y
decía que la luz alumbraba y la oscuridad desaparecía.
Ahí entendí que la oscuridad no existe, solo es ausencia de
la luz, y que el oscuro no existe solo es debilidad de pensamiento, y justo en
mi debilidad espiritual había aparecido el oscuro creado por mi propia visión
holográfica es su carencia de luz. Pero
esa carencia yo la provoqué con mi superficialidad carnal.
Entendí la palabra fe grabada en la antorcha, y con la llama
de la antorcha podía grabar cualquier acto de fe. Entonces me dijo el señor – ve y
destrúyelo. Analicé la palabra
destrucción, la busqué en el libro y el libro la definía inexistente. Destruir no es destruir si no cambiar. Si no hay luz todo está oscuro. Llega la luz y huye la oscuridad. La oscuridad no es nadie solo espacio falto
de luz. La luz si es energía que alumbra
el espacio. Había que destruir la
oscuridad y solo bastaba con tomar la antorcha y alumbrar.
El señor me dijo – estás equivocado- la oscuridad tiene vida
y poder ahora y es un virus que carcome, prepárate, cúrate y ve y destruye lo
que el dragón te envió.
Entonces volteé a la
tierra y vi mi cuerpo de nuevo inerte pero dentro de un ataúd. Esa impresión
dio motivación para tomar la curación.
Tomé la antorcha y alumbré mi memoria contaminada y quemé la oscuridad
virulenta y empecé a grabar con la fe las decisiones correspondientes.
Descendí a la tierra
y junto al río Kebar me estaba esperando el oscuro. Al pisar
tierra huyó y yo lo seguí. Él
buscaba batalla. En pocos momentos de
persecución fuimos a dar al valle de Meguidó al oriente de Jerusalén. Ahí pelearíamos.
Se plantó y me dijo.
No pienses que soy la ausencia de la luz, soy energía negativa con gran
poder de proyección para apagar llamas, soy frío. Existo, no solo soy espacio como dice tu
libro. Soy la energía negativa que choca
con la positiva de la que tú vienes. Yo
también tengo fe contraria a la tuya. Te
venceré – me dijo.
El Oscuro me confundió y empecé a preguntar a diestra y
siniestra. Deseaba estar ante mi Señor para
salir de dudas.
El Oscuro me provocó miedo y más aún debilidad de luz, al
ver que sacó las mismas armas. Una
antorcha oscura, que proyectaba frío oscuro y su espada negra, así como también
su negro libro de instrucción. De su
libro sacó una imagen de un arcángel y un hombre de cuernos rojos con letras
humanas donde la espada negra se clava en el pecho del arcángel. Sentí
aún más miedo.
Se acercaba a mí mientras yo retrocedía. Se sentó viéndome a los ojos y me dijo –
quien te envió – le dije- me envió con
gran autoridad a destruirte el poderoso Universal, - mi Señor, el padre – dije.
Me contestó – a mi también me envió el universal y también
es mi padre. Y me pidió tu destrucción. Le dije – mientes. Me dijo –pregúntale. Te abriré los ojos y verás que nuestro padre
nos pone a pelear y a destruirnos – dijo.
Entonces caí en miedo y huí rápidamente hacía el universo
buscando al padre. Pero no lo hallé.
Apareció el señor de 32 y me preguntó ¿Que haces¿ yo le dije huyendo, ayúdame en mi
confusión. Entonces puso la mano en mi
memoria y entendió mi miedo. Me dijo
entra a mi aposento. Siéntate y
escucha. Atención.
El Oscuro es mi contrario.
El se sienta a la izquierda yo a la derecha. El es hijo de mi padre y yo también. Tú eres brillante pero eres mi siervo porque
te enseñaré el camino a la gran ciudad de luz.
La mano izquierda es él. Yo la
derecha. La mano izquierda se usa poco
pero es complemento del universal padre porque el padre es simétrico. Me mostró una visión. Un cable rojo y uno blanco. Los dos conductores de energía los cuales
chocan y forman la chispa divina de la luz.
Por eso es que mi padre es simétrico pero dualidad de luz y oscuridad. No
te confundas ni te asustes, él usa la oscuridad solo para probar la potencia de
tu luz. Tú eres luz y el Oscuro tiene la
misión para probarte. Pero al que
necesita para sobrevivir es a ti. Una
vez que hayas vencido al Oscuro serás una célula viva más en el cuerpo de
nuestro padre universal que está compuesto por miles de millones como tú. Pero sobrevivirás y serás eterno en su
cuerpo.
Le dije – entiendo- dime que hacer- me dijo – desciende otra
vez y no le temas, solo eso, y cuando te
vea con fe te ofrecerá su reino, solo recházalo y dile. Vete porque escrito está que mi Padre te
envió solo para probarme pero nada puedes hacer sin que él lo desee.
Así lo hice. Descendí al valle de Arma-gedón, Meguidó en
Jerusalén, y solo lo ignoré y le dije y
mi espada se encendió y lo vi huir y desaparecer.
Con el triunfo me aparecí conectado a la carne otra vez y
levanté el ataúd pero ya estaba enterrado.
Entró tierra y salí escarbando.
Me senté en la tumba recorrí mi pasado.
Cuando fui rico, con mil parejas, habiendo caído nuevamente en el error
mundano de la vanidad y el ego. Me
levanté y mi memoria estaba impecable, formateada de todo virus.
LA ESCRITURA DEL ENCUENTRO
Con nueva identidad busqué un lugar privado para hablar con
mi interior. Apareció el señor de 32 y
me dijo. ¿Que pasa ¿ le dije ábreme
vereda, guíame.
Me dijo - ¿sabes quien soy realmente ¿- le dije – si – eres
mi interno yo superior, porque siempre que veo mi holograma informativo
apareces tú. Me dijo – correcto. Le
pregunté ¿soy tu¿ ¿eres yo¿ -me dijo – no.
Soy la guía soy el camino. Estoy
en ti y en todas las memorias - mi
holograma es la derecha del padre y mi holograma es el punto de luz de tu
memoria holográfica y de los demás.
Le dije – entonces muéstrame – me dijo ven y has…. Ve al
país Mexicano y búscate una ciudad.
Encuentra una mujer y has lo que te diré. Así podrás vivir el resto de tu sexta
generación y cumplir el propósito de ahora.
Crecí. A mis 46 años llegó de nuevo ante mi
holograma mi señor de 32 y me dijo. Has
dado vueltas… pero ésta vuelta es decisiva.
Me dijo – ven- acompáñame – ese día no desperté – viajé con él y me
mostró el futuro... separa tu cuerpo de tu espíritu cada noche porque conmigo
viajarás y yo te diré tu misión.
Puse esa posición física, en la noche de sueño y salió mi
espíritu y mi cuerpo quedó programado para actuar en el mundo común día con día
cumpliendo los paradigmas de la vida de pareja, con hijos, trabajo y el pan de
cada día.
Pero mi espíritu se fue a la encomienda y se paró ante el
Señor esperando instrucciones. Me dijo –
ve por ahí - das la vuelta y llegas
adentro de éste mar vítreo, estoy aquí y escucha lo siguiente. Me fui por donde dijo y pasé ante 4
personajes con caras algunos de león, otros de becerro, oso y persona, y después
24 hombres altos de blanco me estaban preparando el camino para pasar. Pasé y llegué al mar vítreo, pisé y subí el
escalón y me puse de rodillas. Y dije –
a la orden. Me dijo graba esto,
escríbelo.
´´ Puse enfrente de
ti mi palabra, aún así me diste la espalda.
Por esto cambiaré la dirección de los astros. Porque hablas bien y obras mal. Mi palabra no es de piedra, ni de monumentos,
estatuas, lujos, ni ceremonias, si no de mensajes y pensamientos. Quítate entonces el uniforme y date la vuelta
y camina al contrario. Tendrás que dar
la espalda a los que van contigo, e ir de regreso a mí. Tendrás que ver de frente a los que vienen y
decirles que regresen. Quítate la
sotana, el uniforme, la corona y las distinciones, quiero actos no ropas. Porque te ocupas y no recibes a nadie, te
vistes y olvidas las espinas, muestras llanto y ríes por dentro, repites mis
palabras y pides dinero para iglesias ostentosas.
Yo te pagaré, no ellos.
Yo te cobraré no ellos. No hagas
justicia yo la hago. Y la hago por medio del malo, no veo apariencias si no
intensiones. Sal de la iglesia y mira el
cielo, pide perdón, no pidas monedas ni compres hipocresía. Vístete por dentro y escúchame, vuelve dentro
de si pues adentro estoy. El vestido no
es recompensa, es prueba, y lo material también. Estarás mal con la gente y te darán la
espalda, perderás el juego y se quemará tu fábrica. Alégrate que tus ojeras sean sabiduría. Distingue diferencia del nivel humano con el
nivel espiritual superior. Debes ganar
más lecciones. Trabaja y gánate un trozo
de pan que será un poco de gloria.
No ganes tierras, ni empresas, ni máquinas, ni pongas
hombres a tu mando. Reparte la tierra,
vende la empresa, regala las máquinas y gratifica a los hombres y sigue el
peregrinaje. O no tendrás gloria, si no
un terreno de problemas y desesperaciones.
No veas lejos, aquí estoy contigo dentro. Abre los ojos, no vueles alto que la gente
está abajo y también la verdad, luego sube a mi, cuentas esto y que te vean
hacerlo.
Agradece diario. No
gobiernes sin méritos. No vueles
equivocado. Caerás y el dolor será según
tu altura. ¿ No has entendido que el
paraíso es una forma de pensar ¿ ¿Qué el espacio habitable es tu propio sentir¿
y que puedes inventar ciudades brillantes con tu sabiduría y en tu propio
mundo¿ y que puedes invadir de esa misma
gloria a tus hermanos¿ explícales como
es esa ciudad brillante de entendimiento.
Diles. Relájalos con el
maravilloso verbo de tu interna ciudad brillante de luz de sabiduría, donde se
vive en paz y todos se ayudan, donde ya aprendieron a existir. Diles cual es la ciudad, señálales a la
cabeza con la línea al corazón para que vean donde está esa ciudad brillante.
Porque los tontos encuentran problemas hasta en las flores,
pero los sabios sanan la misma podredumbre.
Porque un día tomé a mis hijos y los vestí de carne y les
puse ojos y sentidos y ellos empezaron a construir edificios habitables y se
hicieron mercenarios y ciegos. Ciudades
hermosas con mentes afligidas. Pero los sabios duermen en el monte y en el día
bajan a contar lo que el Creador ha dicho ´´. Hasta ahí llegó el mensaje.
ELIAS Y EL ANTICRISTO
Entonces yo salí un 7 de noviembre rumbo a Norteamérica y me
paré ante la Unión de Naciones. Había 10
cuernos a la entrada. Me preguntaron
¿Quién eres ¿A quien buscas¿. Y le dije
al de la Organización y vengo de parte de su Padre y su Hermano el Señor de 32
su contrincante, porque le traigo un mensaje.
Ernesto seguía sus labores, hecho de carne, pluma y colores,
hijos y esposa, casa y taller, bares y paseos, pero yo estaba cumpliendo
holográficamente la misión del señor de 32.
Le seguía la pista a Ernesto y leía sus actos de día para aterrizarlo
programándolo diariamente mientras yo, el yo del señor misionero, estaba
investigando el paradero del hermano que ostentaba la corona mundial. Me dijeron pasa y busca a un hombre negro y
no le molestes hasta que esté tranquilo.
Lo vi. Tenía en sus manos a todos
los países. Pero había uno que le
molestaba, Israel.
Yo me transfiguraba, no en Ernesto, en el que yo deseara,
pero tomaría un solo cuerpo para toda la misión.
El hombre negro de la Organización se sentó y me dijo
siéntate.
Me vio a los ojos y me dijo - ¿A que vienes Elías. Le dije tu lo sabes. Me dijo – dile a mi
hermano de 32 que no cederé de mis propósitos.
Le dije – te diré el mensaje que te envió. Me dijo – está bien. Hizo una señal y llegaron dos hombres y me
dieron identidad de los países unidos, un cristal computador, una tarjeta de
silicio y aplicaron en mi mano un sello código de barras y un pequeñísimo chip
en mi mano entre dedo y dedo. Pero el
negro sabía que yo no era de carne, si no holográfico, sin embargo extrajo mi
historial, pasado, presente e intensiones y yo me vi al descubierto.
Me dijo –
prosigue. Y yo inicié el mensaje de mi
misión.
Le mostré en una pantalla el mensaje.
El señor de 32 te aventó a la tierra y no pudiste con
él. Y tú con tus labias estas gobernando
el mundo. Pero después de tu fama
capitalista abrirás tus fábricas de circuitos integrados pequeños y perseguirás
a los míos.
La guerra la harás tú primero a mi pueblo Israel. Sobre todo a Jerusalén y Judá.
Pero en el Valle de Hamon-gog morirás.
Ya que tus naciones arrebaten y destruyan el pueblo del altísimo, tú abominación desoladora, entonces empieza la
guerra de los mundos. La guerra de
galaxias. Verás descender la gloria de
tu padre y tu hermano de 32, vendrá con carros de fuego de torbellino. Millares.
Le mostré su muerte en pantalla holográfica. Y me dijo espera. Y me mostró su pantalla visión también.
Estaba quemándose un predicador que no aceptó su marca. Y los demás se pusieron chip en la mano. La moneda inteligente. Eran cientos de millones sus seguidores. Se los llevó a destruir Jerusalén. Y anunció una invasión extraterrestre verde
oscura con naves de un sistema espacial del cable rojo. Y puso sus tiendas palaciegas en el
valle. Mucho armamento.
Y yo le mostré de nuevo su muerte. Tres ranas.
Una encadenada en un agujero, otra quemada y la otra muerta con un
rayo.
Le mostré a su patrón encadenado 1000 años, a su profeta sin
lengua, sufriendo llamas y a su cuerpo carnal desintegrado por una luz
celeste. También le mostré la invasión
de su Padre. Se abre el cielo con luz
brillante y en una nube despide rayos potentes y los platillos voladores de
fuego arremolinado, recogen y raptan gente porque el terremoto mundial del
efecto solar estaba dañando el planeta.
Millones de carros de fuego torbellinos salen de la luz y nubes y apagan la oscuridad iluminando al
que ve de noche y pierde la vista con la luz.
El Oscuro que desaparece con la luz.
Entonces el hombre negro se violentó sobre mí y envió
policías holográficos secretos a exterminarme por mi transporte astral gnóstico
para él desconocido y me escapé de sus manos.
PANTALLAS PROFETICAS
Por esos tiempos cumplí 48 años. Ernesto estaba en Europa. Su paleta de colores viajaba, y su paleta
pareja con él. Pero yo su brillante holografía
investigaba el universo. Sucedió todo
tal cual lo dijo mi señor de 32.
Mi libro estaba leyéndose en muchas partes. Pero yo, el mismo estaba matemáticamente
midiendo las pirámides. Mientras Ernesto
seguía su camino yo me dediqué a ser el mismo en mí, pero sin ser él, siendo yo
mismo en él.
Tomé mis cristales computadores, cálculos, mediciones,
conteos, observando toda composición piramidal, cultural y masónica, primitiva
y moderna y al fin descubrí la fecha exacta.
Yo osaba de decisiones proféticas.
Pero la matemática de la sexta dimensión era imperfecta. Moví mi reloj a la fecha descubierta y hubo
una gran erupción solar que provocó desastres después de 4 años luz. Por eso las invasiones. Entonces giré y giré mi reloj hasta
transportarme al planeta piramidal y ahí estaba todo el códice. La fecha era la misma.
Una vez en el espacio, apareció mi señor de 32. Y me dijo. ¿Qué haces¿ le dije tu lo sabes. Me dijo pon atención.
Ayer Ernesto tú, pisó una hormiga sin darse cuenta. Esa hormiga tenía en su piel miles de bichos
los cuales a su vez tenían millones de bacterias cada bicho. Pero Ernesto es tan grande que ni siquiera
vio a la pequeña hormiga y mató a miles de millones de seres a su vez.
Le dije que significa esa frase. Y me contestó.
Cuando un arcángel pisa a un ángel mueren miles de millones
de seres espirituales poderosos y con ellos los humanos, pero solo dios es tan
grande que jamás nadie lo pisará.
Ah dije entiendo los tamaños y jerarquías. Y me dijo.
No busques en la ciencia de la matemática la profética y
futura decisión del Creador. El fin no
se da por tiempos ni por vejez, porque el tiempo es infinito y no hay fin, pero
todo cambia y se renueva una y otra vez sin final.
Te repito que entre más rápido se junten los 144 000
necesarios, vendrá todo con ellos y ahí nuestro padre. No es tiempo, es cantidad, aunque el tiempo
se cuenta antes o después de las señales, es la difusión del verbo lo que
define el final de una era evolutiva, cuantos entendidos hubo pronto o después entonces
mi Padre toma la decisión. Y de no ser por los elegidos los tiempos ya se
habrían cumplido como una generación más.
Te repito hoy y ya no te lo diré de nuevo. La ciencia está en tu holograma. Cada secreto, cada profecía, no recorras
distancias, solo cierra los ojos exteriores investiga por las venas de la
información interior, no busques escritos en piedras ni pirámides, no descubras
huesos viejos ni primitivos, no sumes ni multipliques fechas porque eso es
incierto.
Me dijo ven y te enseñaré tu propia pantalla profética
interna. Me dijo abre una puerta que sea
redonda, para salir y entrar y traza una órbita circular para evolucionar tu
recorrido generacional de eras.
Me puso una pared y abrí una puerta redonda, un agujero, un
hoyo y me dijo, esa puerta es tu boca para comer y para defecar, el agujero
para engendrar y para parir. Tracé una
órbita circular en el espacio y me dijo, recorre el círculo 7 veces y esas
serán tus generaciones, y evolucionarás y al final de cada una de las 7 órbitas
entrarás en un agujero de tierra y pasarás por un túnel y saldrás por un
agujero carnal para la siguiente.
Después de esto me dijo – eres solo dos cosas, mente y
cuerpo y estos son memoria y sentidos respectivamente, uno para pensar y otros
para sentir, y el alma es solo un concepto del ser.
Me puso mi retrato holográfico en frente. Vi un intento de evolución pero los
pensamientos se inundaron en un diluvio y se quemaron en lluvia de fuego y
sal. Vi una célula reproducirse X y
Y respectivamente y poblaron la pantalla
entera. Salieron 7 reyes, uno mataba al
otro y un octavo rey que finalizó en ira.
Pasé observándolos y me detuve después de muchas murmuraciones. Vi detenidamente al quinto rey y penetré en
sus ojos. Dentro había un mar
vítreo y el padre y el hijo firmaban un
convenio. Era un mensaje que llevaría a
los primitivos.
´´Ve al pasado y lleva el mensaje´´ y reconocí al Señor de
32 el enviado a esparcir el mensaje.
Escuché que le llamó Miguel.
Se quitó sus alas y bajó debajo de las nubes. Entonces Emmanuel se posó en el vientre santo
y Jesús lloró por primera vez. Corrió
agua por todos los ríos y todo germinó entonces el Padre levantó su mano y
señaló el empiezo. Yo estaba lavando su
cabello, y el Oscuro peleando con él. De
repente salió de la pantalla y se sentó frente a mí. Esa pantalla era yo y de ella salía él. Me dijo Elías mi brillante escucha.
‘’Te enseñaré a crear.
Es lo mismo que grabar. Hay un
ojo en medio de tu frente y en medio de cada memoria. Lo que está grabado en cada ojo contiene una
fuerza. Escucha, ellos grabaron en medio
de sus ojos el nombre de una virgen y por ello esa virgen se hizo
poderosa. Pero ella no existía y por
esta equivocación esos ojos fueron cerrados ante la luz. También grabaron mil nombres de personajes y
los convirtieron en santos y ellos hoy tienen poder, por eso existen, pero
antes no existían, ellos los crearon, y ahora hacen milagros a sus creadores,
milagros engañosos. Les construyeron
palacios y estatuas y grabaron sus imágenes en sus mentes por eso otorgaron su
poder mental a esas estatuas y palacios.
Me dijo ven y crea.
Escribe, difunde, pública, graba en sus mentes mi nombre con holografía,
tómalos y quítales la carne y desnúdalos que se vean tal cual son y fueron
siempre, y diles que no son hombres ni mujeres que solo son seres’’.
Le interrumpí con una
pregunta y se calló. Señor de 32. ¿Mi
semilla es tu semilla¿
Si, vives en el
pasado y yo en el futuro, yo soy evolucionado, el primogénito y ya estoy arriba
y solo dos veces bajaré y me mostraré en este tu viaje. Primero para guiar y después para juzgar.
¿Entonces porque me
pusiste carne y me metiste en un planeta¿
la imperfecta carne casa del pecado-dije- Porque lo habito ¿
Porque es bello – me
dijo
Y lo bello es pecado ¿dije
No. Los actos lo son.
‘’El cuerpo es tu proceso de evolución. Tu crecimiento, tu escuela. Tus cuerpos son los grados hacia la
graduación.
Porque ¿como ¿
Con ellos conseguirás, reír, sufrir, enfermar, disfrutar,
sanar, morir, nacer, amar, odiar y discernir al final lo correcto de lo
incorrecto, el bien del mal y la luz de la oscuridad. Y a toda esa información se le llama memoria
holográfica, la cual al final del juicio pasa por un filtro de discernimiento
convirtiéndose en sabiduría y luz.
¿El entendimiento
requiere sufrimiento¿ dije-
Si-dijo. ¿Qué
necesidad tendría un rico de tener carencia.
¿Qué necesidad tendrá el abundante de sentir hambre. ¿Cómo puede aprender a llorar el
dichoso. ¿Cómo podría un espíritu eterno
sentir el miedo a la muerte. A través de
la carne. La carne te deja esa
información. La carne vehículo’’.
Hasta entonces entendí la creación de la humanidad la cual
un día crecerá de conciencia y superará la oscuridad. Entonces desapareció y la pantalla se encogió
hacia mí y vi una fecha en el aire, 7 de noviembre.
LA DUPLICIDAD DEL ESPIRITU
Regresé con Ernesto y me metí habiendo entendido la idea de
ser humano y sentir el dolor de un pellizco en mi carne. Tomé una piedra y golpeé mi pierna tratando
de sentir dolor, y me fui a un velorio a llorar, porque deseaba que mi espíritu
se conectara completamente con el cuerpo y olvidarme del chofer que volantea el
vehículo. Pero no pude llorar. Ni el golpe me dolió. Dañé mi carne pero no sentí. Entonces entendí que ya había salido
demasiadas veces de mi cuerpo y separé demasiado al personaje interno del
vehículo que conduce.
Yo no podía ver mi cuerpo como parte de mí si no como un
aparato transporte terrestre solamente pues ya tenía en mi holograma el
concepto acrecentado.
‘’Tu principal crecimiento se dio en la quinta vida. Tus errores te llevaron a sentir necesidad por
conocer al padre. Ahí empezó tu
oración. Tus plegarias fueron profundas
porque estabas a punto de arrepentirte de tu nacimiento. Mi padre te dio una
piedra blanca solo como señal. Tu promesa no fue cumplida pero ya lograste
saldar deudas. Hoy tienes en tu memoria
los secretos de la vida. Pero te falta
llegar a conocer la eternidad y para eso buscarás perfección. La tendrás en tu séptimo tiempo, ve a tu
planeta astrológico. Ahí encontrarás una
vieja de mucha edad. Ella te dirá como
partirte en muchos y estar en varias partes’’.
Al cerrar mis ojos levanté el vuelo. El mismo universo que miraba fuera, estaba en
mí. Los planetas. Esa vez viajé muchas horas. Pero hubo un lugar que me debilitó y caí inconsciente en el espacio. Mi espíritu sintió la energía directa de un
planeta. Entonces esperé dando vueltas
la alineación para cubrirme. Pasé y al
fin llegué. Era una señora como de 30
metros. Los ángeles normales medían 15
metros solamente. La encontré en un
planeta azul sin paisaje.
¿Qué día naciste. Me
preguntó. Le di fecha. Dame lugar, hora y detalles. Trazó un diagrama circular frente a mí con
sus dedos con diagonales de color y vio mi ser moviéndose a gran
velocidad. Todo ese planeta era
geométrico, matemático y había tecnologías de medición, de energía y sensores
captando constantemente la proyección y la presencia de cualquier visitante.
Me leyó la carta diagrama.
Debes tener cuidado al viajar porque hay proyecciones magnéticas de tus
extraños planetas, en revolución.
Ahora voy a partirte en 7, 70, 700 y 7000. Las llamas de tu
cabeza están bien encendidas y ahora es el momento astrológico de conocerte a
ti mismo. Entonces al señalarme movió
sus dedos a otros puntos y ahí aparecí duplicado muchas veces.
Me dijo – Por el momento usa dos de tus espíritus, no
uses los demás. Solo el holográfico y el del vehículo
terrestre. Y desapareció mis demás
espíritus.
Ve y obsérvate, conócete, perfecciónate y deberás tenerlo en
secreto, solo ante el mundo. Dejé a la
mujer gris y regresé a la tierra. De
repente desperté en mi cama con el ruido de alarma celular. Mi pareja de carne me señaló la hora
nueve. Me encerré en el aposento altar y
cerrada la puerta elevé mis manos en plegaria.
Entendí que no necesitaba estar dentro de Ernesto, siendo él yo y yo él,
se había duplicado el espíritu brillante y salí de mí hacia mi mismo y pude
verme.
De ahí en adelante el propósito de verme, encontrarme y
corregir mis actos era entender, ¿porque un humano siente ganas de tener
materia¿ Le di la rienda cotidiana a mi
carne en el diario alimento y preocupaciones monetarias, así como deseos
emocionales. Y mi bella dama a mi lado
siempre y yo captando su amor desinteresado.
Me observé en la mesa del restaurant con mi gente, fotografías y
periodistas y deseos de acrecentar mi nombre ante el mundo.
Entonces alce mi mano holográfica y señalé al Ernesto
cerebral de carne. Le di en su juicio y
le dije revélate. Ernesto escuché y
brillante exclamé.
Ahí me revelé y mi personalidad empezó sus cambios
profundamente a mis 49 años. En mi
revelación empezaron mis manos a proyectar prodigios. Curaciones secretas. Entendí el porqué de la duplicidad de mi espíritu
memoria holográfica, sin embargo, mi duda era cual de los dos portaría la
original. Yo holográfico tenía varias
nuevas experiencias secretas que para poder que aparecieran en la memoria de Ernesto,
ocupaba grabarlos con transferencia interna y Ernesto yo podría utilizarlas.
La duplicidad me daba la ventaja de estar fuera de mi cuerpo
sin dejar el cuerpo inerte, así que yo Ernesto funcionaba aun estando mi
memoria holográfica ausente de él. No
había necesidad de dormir para el viaje astral.
Los dos teníamos comunicación gnóstica y la fraternidad universal con el
Padre, pues la doctrina en su disciplina lograba el orden de los engranes de la
máquina orbital de la sincronización. Mi
pensamiento cambió profundamente el penúltimo mes del 2017 y aun a mis 49 yo
tendría unos 510 años pisando la tierra 6 veces.
Era mi meta explorar y conocer el universo antes de
finalizar la sexta vida. Mi séptima
generación sería mucho más segura. El
universo estaba dentro de mí holográficamente porque de mi pantalla de 6
dimensiones había de cada palabra flotante en movimiento del rico fluido de
información que podía abrirse una ventana cada una con cientos de carpetas
informativas. Una copia del mismo
universo interno estaba en el exterior y
podía navegar globalmente por ser mi ser una holografía de calidad 7, es decir
próximo a poder entender la esencia, quien soy, mi partida y mi meta y quien es
el escritor de nuestra existencia, que hizo posible la realización virtual,
real para mis sentidos y que elementos
usa.
En mi concentración, al voltear a mi interior aparece el mi
señor de 32 el cual se presenta en solución.
¿Para que soy bueno¿
– Me dice
Tengo dudas mi señor-
Contesté-
Empieza – dijo.
Deseo llegar a la meta – dije – quiero saber los niveles
- proseguí – mi nivel - el tuyo – el de nuestro padre.
‘’Te diré las tres –
dijo – tú eres aun del primer recorrido y aun perteneces a los humanos, solo
que tu espíritu se adelantó y es holografía, es decir pantalla ambiental de
éteres informativos, archivos, conocimiento enérgicamente en su potencia pero
sin un cuerpo autorizado como tal.
Yo soy – prosiguió –
de entre los ángeles, un arcángel comandante del universo total, no solo de tu
mundo si no de miles más, mi duplicidad es infinita y estoy en cada memoria de
todo ser viviente de tu mundo y de miles mundos más, menos en la memoria de nuestro
padre. Pertenezco a la penúltima
dimensión, la séptima y mi padre es la
última, la octava y la creadora de todo.
Conozco todos los secretos los cuales te autorizo explorar, pero tu
memoria aun de 6 dimensiones salida del mundo tridimensional no tiene capacidad
para la información de mi padre.
Conozco a nuestro padre pero no conozco sus secretos porque
no hay capacidad ni megas ni higas que soporten esa información. Ni mi memoria de Cristo soporta el peso. De hecho su definición es pixelaje infinito
en su diminuto microscópico. Sabes que
mi padre omnipotente, omnipresente y omnisciente que todo lo ve y esta en todos
lados, todopoderoso y todo lo sabe es el alfa y el omega, y yo te autorizo un
viaje al corazón del universo a la casa de mi padre para que por tu propio
juicio hagas un crecimiento, pero te advierto no malinterpretes lo que ves pues
tu capacidad no está preparada aun.
Puedes entender al Cristo comandante de 32 pero no al padre. Sin embargo verás la verdad con tus propios
ojos aunque no la entenderás.
Tu duplicidad es de siete copias, pero te autoricé solo dos,
la tuya y la de Ernesto. Las mías son
infinitas. Hay 700,000 veces 7 en cada
polo y coordenada del universo de planetas habitados y aun más los que nadie
puede conocer que solo nuestro padre sabe como cantidad infinita. Para el
norte, sur, este, oeste, hay eso. Y en cada memoria habitante de cada ser en
los planetas dichos, aparezco yo en cada necesidad profunda interior’’.
Me incliné y agradecí.
Y me dijo- ‘’Te autorizo un viaje de una semana. Saldrás el domingo y llegarás el Sabbat. Ese día verás la verdad, harás juicio y no
comprenderás pero llegarás temprano a mi dimensión una vez en la
eternidad. Ten cuidado y no te sorprenda
nada. Toma nota, imagen y registro de
todo tipo, guárdalo en el mejor archivo holográfico y protege tu memoria del
virus, porque en el camino sentirás ganas de pelear con diferentes infecciones
de la oscuridad que te provocarán. Viaja
en paz’’.
Entonces levantó su mano y la puso en el centro de mi memoria
pantalla, y al tocarla se abrió una ventana que decía ‘’interno’’ y grabó la
palabra ‘’paz’’ ahí guardó la tranquilidad de mi ser por una semana. Con el fin de evitar enfrentamientos.
Bajó su mano y me
miró a los ojos y me dijo. Te
autorizo. Iras al centro. Ubícate. Arriba el sur, la luz, abajo el
norte la oscuridad, al este el navegante poniente izquierdo con autoridad
oscura, al oeste el navegante oriente derecho con autoridad brillante. Nuestro padre coordina dualidad y se sienta
en el norte espacio vacío oscuro que le invade el brazo izquierdo siendo de el
mismo la oscuridad poniente del este y el es en esencia el habitante sur de
oeste oriente negociante con el espacio habitado que forma la unidad
creadora. El es su propio padre generacional, ¿Por
qué. El Cristo aun no lo sabe, solo mi
padre.
Me dijo vete y descansa.
Prepárate. 7 días de viaje. Saldrás domingo al abrir pantalla. Cerré sesión y mi señor desapareció.
Exploré a Ernesto y lo vi agotado. Le ayudé con un poco de información y grabé
la idea solucionadora de esa semana de ausencia. Su holografía necesitaba ideas y se las
di. Ernesto había entendido la vida y su
idea era fluir su bondad y borrar de su holografía los deseos del mundo de
triunfar ante los aplausos carnales. Ahora
buscaba llegar a la sabiduría.
EL VIAJE AL CORAZON
Abrí mi domingo interno y el tiempo se acomodó a mi
matemática. Y salí viajando a 900,000
kilómetros por segundo atravesando la luz y dejándola atrás para llegar al
séptimo día. Sabbat.
El universo exterior y el interior era mi espacio, pero no
conocía distancia interna a esta velocidad.
Atravesé miles de planetas habitados.
De mi ubicación brillante tenía que atravesar oscuridades para llegar al
‘’corazón’’ la habitada casa de mi Padre Altísimo.
Al pasar por el norte me empezaron a provocar los oscuros y
los negros ciegos habitantes de esos cientos de planetas infernales, los cuales
ese es su concepto, propósito y función, pelea, guerra, destrucción, y me volví
a preguntar el porque de la existencia de esos seres y recordé la unidad de la
dualidad y recordé que también la oscuridad es necesaria para entender la luz,
es decir que si no existieran los oscuros no entenderíamos a los brillantes ni
su concepto.
Me provocaron a gran velocidad, volaban igual que yo, con
esa potencia y me rodearon, y me vi a punto de activar mi ira debajo del brillo
para sacar mis armas y pelear, pero activé mi enter en la ventana ‘’interno’’ y
abrí paz y los virus desaparecieron. Con
temor a la infección activé mi potencia y activé el antivirus para protegerme.
Sentí un gran deseo de explorar el universo y ver sus miles
de planetas habitados, cada uno en su tiempo.
Al recorrer el universo mi reloj se movía como loco. El tiempo, según la coordenada, la distancia
y la velocidad y no solo mi reloj si no todos mis sensores marcaban medidas
matemáticas jamás experimentadas.
Adrenalina y emoción de lo desconocido.
Mi pantalla captaba imágenes grabando repeticiones en las que puedo
analizar la vida de los habitantes de colores y sus planetas, sus hologramas
archivos y sobre todo la imposibilidad de volar a tal velocidad ni poder
conocer a los demás hijos de mi padre.
Las especies eran unas horribles y otras físicamente hermosas.
Al segundo día de mi viaje encontré solo problemas. Eran
proyecciones magnéticas sobre mi holograma.
La velocidad que llevaba era indispensable para evitar ser dañado por estas
energías las cuales atravesé con un poco
de miedo al ver mi holografía desequilibrada cambiando sus esquemas
desordenadamente. Palabras, números,
resultados, ecuaciones, fórmulas y un sin número de geometrías y líneas de
colores la cuales alteraban las líneas nerviosas de luz holográfica dentro de
mi pantalla.
Al tercer día atravesé por una nebulosa brillante que
diametralmente medía alrededor de 700,000 millas y su forma redonda estaba
exactamente en mi línea de viaje. En su
centro brillante y sin parar me alcanzó un ser hermoso que dijo llamarse ‘’Crisalían’’
el cual notó mis dudas y sin dejar de volar a mi velocidad me fue hablando.
Me dijo – ‘’ Todo lo que halles en el tercer día será
hermoso y luminoso para tu holografía.
Esta nube es tu alimentación y este día es el que acomoda toda tu vía de
viajero para que soportes los encuentros orbitales desconocidos, tus vías luminosas
perderán el nervio sensorial de los
miedos y estarás tranquilo. Eres elegido
entre elegidos.
Solo tú y 7 más aparte de Miguel y su mal hermano
innombrable están autorizados para atravesar dimensiones por lo que tu
envidiable fortuna rebasa mi belleza luminosa.
Mi velocidad es igual a la tuya- dijo- y siendo mi tamaño 7 veces más
grande no tengo tu información y te ruego a tu regreso me cuentes un poco del
corazón universal. Te recuerdo que mi
juicio holográfico es 3 veces mayor que el tuyo aunque tu finísima y afortunada
libertad de viajar es 7 veces mayor que la mía y ahora 8 con tu llegada a la
casa del altísimo y luminoso universal.
Tengo más edad que tú pero aun debo permanecer algunos milenios dentro
de la luz sin tocar la oscuridad’’.
En un momento Crisalían desapareció totalmente de mis
sensores dejándome una imagen de una futura ciudad cuadrada de piedras
preciosas y en cada piedra podían verse paisajes hermosísimos diferentes a mi
planeta, sensacionales y profundamente emocionales que invitaban a vacacionar.
Al cuarto día volví a ver la oscuridad con las luces
orbitales de los astros y era tan variado y tupido el espacio de astros que el
tráfico me empezó a confundir el camino, la brújula y los sensores volvieron a
alterarse sin embargo mi batería estaba cargada de luz y cualquier ventana me
daba soluciones para cualquier miedo contenido en cables. Vi uno de mi tantos cables parpadear afectado
por un circuito corto de venas que con tanta piedra orbital de energías raras sobre pasaban mi invisible
cuerpo de conocimientos y provocaban ciertos desordenamientos al nervio.
Sin embargo la actividad de mis dedos imaginables sobre mis
pantallas atacaba cualquier desorden acomodando cada frase con tremenda
habilidad. Encontré en una de mis
carpetas la cual se abrió con el paso de una enorme piedra ardiendo que fue
captada por mi cámara que guardaba toda medición de velocidad, dirección y
distancias la cual se impactaría un día con nuestro sol, que al abrirse tenía
yo un pequeño dolor grabado en la frente y aparecen una serie de imágenes
desagradables como un vehículo metálico verde se destroza de un impacto
golpeando mi vehículo carnal, y una fecha octubre del 6011 año septentrional y
2011 año cristiano. Traté de borrarlo
pero permanecía pegado a una luminosa idea ‘’oportunidad’’ y una frase que
decía ‘’la procedencia del bien es el mal y la del mal el bien, una sucede a la
otra y su hermandad es contraria, unidad de lo disperso junto, de la chispa
creadora’’. Me entretuve buscando
significados y me dio en pensar que no conozco ni el 7 por ciento de mi mismo. Mi constitución informativa.
El quinto día fue peor pues aparecieron más incógnitas con
tanto símbolo celeste. Formas dibujadas
hechas de galaxias pues mi telescópica visión abarcaba bastante alrededor. A medio día apareció la estrella de 5 picos
ardiendo con una tremenda geometría de proyección de fuego llena de sistemas
solares en cada diagonal y yo habría de cruzarla sin tocar ninguna llama que el
calor pudiese quemar algún archivo holográfico porque mi cuerpo estaba
atravesable por cualquier temperatura de grados normales pero no vivos y pensantes
como este importante elemento natural.
Mis pantallas visionaban aun más problemas y empecé a buscar
entre los millones de programas de inicio miles de documentos que conjugados me
ayudarán a soportar el calor tan cercano del cruce. Por fin hallé la respuesta, un circulante
efecto escudo extinguidor que giraba fuertemente a mi alrededor protegiendo mi
conocimiento. Al cruzar me sentí muy
protegido por esta solución pero de repente en el cruce se apagaron mis venas
exteriores y me llené de pavor por un minuto en una distancia de 54, 000,000 de
kilómetros de miedo y exclamé ‘’señor no me abandones’’. Sentí su ausencia y no hubo red ni señal ese
minuto ni siquiera comunicación con mi propia máquina holográfica invisible.
Una vez que atravesé el ‘’tetra’’ la estrella quedó atrás y
me aparece un panorama de David peleando con Goliat y esa escena me perturbó y
me hice la pregunta. Mi cuerpo
holográfico estaba intacto y la luz volvió así como la energía circulante. Al pasar cerca un hombre barbado de gran tamaño
me alcanzó y me dijo –
¿a donde viajas ¿
Al corazón- le dije.
Dijo hagamos un trato.
¿Cuál. – dije.
‘’Soy muy viejo y tu joven. Te diré lo que no sabes y tu me
contarás a tu regreso como es el corazón, la casa inteligente de mi Padre’’.
Trato hecho. Dije.
‘’Ten cuidado contigo.
Eres como un niño de pocos años que tiene en sus dos manos grandes
armas. En una, la izquierda una espada
que acabará con toda cosa maligna pero mataría sin piedad si tu ignorancia
sigue.
Y una espada de bendición en la otra, la derecha, fortuna y
amor, información y descubrimientos que sería un desperdicio si tu ignorancia
permanece’’.
Me dijo – escucha atento.
‘’Aun piensas que existes y que todo esto que ves existe.
Pero te diré que todo lo que existe es tu ojo principal, tu centro de carga y
tu imagen creadora.
Tu sensor más importante es el visual el ojo cognoscitivo y
ese envía conexión al sonido y los demás elementos conjugados. El ojo está en tu centro de carga de luz y
solo él existe y todo lo demás lo inventa la propia imagen imaginada al pensar,
fe que de acuerdo al pixelaje o nitidez de tu imagen será transmitida con
seguridad creando de forma borrosa o clara tu fe según la calidad de lo
imaginado en proyección con la luz emitida, fe en existencia’’.
Dije – no entiendo.
‘’Concreto es que lo que imaginas fuertemente será fe y la
fe es realidad siendo invento de tu sentido’’.
Todo lo que percibes, tocas o ves, no es. Tu sentido lo crea en su proceso
temporal. Insisto tengo un secreto
llamado ‘’El secreto de la existencia’’ pero no te diré yo, si no que al
séptimo día de viaje se te dirá. Y hay
un secreto que se llama ‘’ El secreto de la creación’’ que solo el unigénito
sabe pero aun él ignora la grandeza del infinito, la cual el altísimo si puede
medir.
Entonces se fue de mi vista y percepción. Pensé, no todo ha sido negativo en mi
viaje.
El 5to. Día a las 18.00 hrs., sentí un dolor pequeño en mi
transparente brazo. Eso me llevó a abrir
archivo visión Ernesto yo y vi a mi carne Ernesto en un evento. Después de una conferencia en el Instituto
Científico Internacional, de ser ovacionado, aplaudido y con premios
literarios, fue Ernesto raptado por unos hombres NASA según su
nombramiento. El libro había causado
muchas dudas. Alguien importante
dijo. ‘’Este libro no lo escribió un
humano’’ y habló a todas las instituciones científicas que estudian seres
extraterrestres a investigarlo. Lo
tomaron en pleno evento y lo llevaron en un avión a la NASA y ahí operaron su cerebro. Pero nada hallaron excepto que al medir su
capacidad normal tenía una chispa el bisturí con sus células.
Mi imagen desapareció
al entrar a la sexta dimensión al final del 5to. Día.
Seguí siempre mi velocidad y muy disciplinado a los consejos
de mi señor 32 de mi autorización.
Ahí todo se complicó porque la 6ta. Dimensión no tenía
piedras de fuego, ni astros luminosos, todo era oscuro y mi visión sintió
miedo. Todos los astros estaban apagados
y su trayectoria desorbitada, chocaban constantemente, los impactos,
estruendos, ruidos me empezaron a desequilibrar. Comenzaron a apagarse mis venas exteriores, se cerraron
ventanas abiertas, archivos, documentos y mis sensores dejaron de medir,
captar, sentir, estaba entumido y no sentía gran parte de mi cuerpo porque mi
circulación se apagaba, mis cables conductores se oscurecieron y sentí que mi
velocidad disminuía con la debilidad.
De pronto, dejé de oír, sentir, oler, gustar, pero nunca de
ver. Mi ojo central me consolaba. Yo temblaba al ver que apareció ante mi ese
inolvidable sexto día, sexta dimensión y sexta hora, una estrella de 6 picos,
ardiente a diestra y siniestra con erupciones solares incontables las cuales
visioné que tal vez me dañarían impidiendo el paso a mi destino.
Mi velocidad no disminuyó si no que era mi miedo y falta de fe,
pero mi cuerpo muerto si era real y palpable.
Se fue por completo la red holográfica, mis pantallas estaban apagadas
porque mi funcionamiento era dualidad y la dimensión carecía de luz, y caí en
pavor, temblando visioné una explosión de mi existencia, terror y todo tipo de
imagen de destrucción masiva.
Pero mi ojo central seguía encendido y mi velocidad con la
misma potencia a pesar de que se fue toda mi energía vital. Se cerró mi sesión. Y mi memoria quedó en su chip inactiva pero
con su ojo pensante el cual apenas supe que estaba sostenido por una energía
exterior, por un hilo representativo de H o el significado de existir, o la
chispa del alma del vientre de mi Padre Creador.
Al acercarme a la estrella de 6 picos vi en el centro 3
números de 6 y cuchillos solares por todos lados. No había hueco para pasar sin quemadura. Ya no podía activar mi escudo
extinguidor. Moriría. Y en mi desesperación fui al centro de mi ojo
y encontré una banda, la cual tenía saldo.
Segundos antes de impactarme me conecté la banda que contenía buena
capacidad de navegación y se activó mi brazo derecho. Lo apuñé fuertemente al pasar y rompí una
piedra enorme. No se de donde salió la
solidez de mi puño pero destruí un meteoro apagado de gran peso. Probé el poder de la fe en
desesperación. Atravesé la peor
estrella. En la tarde del mismo día y
sin energía mi gran ojo central parpadeaba, cansado y sin alimentación
eléctrica.
Para el colmo a lo lejos estaba una enorme serpiente oscura,
más oscura que la oscuridad, era terror en mi ojo, yo ya sin imagen, sin
pantalla y sin información solucionadora sería atacado, por una serpiente de
tamaño grandísimo. Entonces al acercarme
sin bajar velocidad en unos segundos chocaría mi ojo con la violenta original
serpiente de la sexta dimensión y preferí cobardemente con la gran
insuficiencia de armas refugiarme en el centro de mi ojo, ya parpadeante, y ahí
me escondí en un agujero esperando el impacto.
Le dije – Pensé que me habías abandonado. Me dijo te repito. Estoy en ti, y en todos. Igual que tu no lo saben los demás por eso no
me sienten. Este es mi rincón, el centro
sabio de todos. El gran ojo. Y cada vez concentrado en ti, pensante, se
activa el ojo que soy tu y yo en dialogo.
No lo olvides.
Cruza la serpiente te lo ordeno. No temas.
Tu poder será proporcional a tu valentía y tranquilidad. Recuerda que tu existencia y tú muerte la
decide el altísimo y no la serpiente.
Eso encendió todo mi holograma inmediatamente, fluidos,
venas y circulación de luz, información, iniciando sesión y llegada de mensajes
y comunicación total con mi propia globalidad.
Atravesé la serpiente y ella fue ella y yo fui yo. No la sentí, solo me sentí yo. Comprendí la escena. La serpiente era mi
miedo y mi señor mi valentía. Las
imágenes tituladas y sus significados.
Al final del sexto día aparecieron luces, estrellas, astros
e inicié mi alabanza a la luz que me libró de la gran oscuridad. Mi ojo no se cerró. Mi imagen permaneció.
Por fin entré a la séptima dimensión. Se acabó la oscuridad. Jamás había visto tanta luz. Era visible y no
me encandilaba.
Esta era la única dimensión que tenía puerta donde había que
detenerse. Frené inmediatamente.
Había un gran cerco de piedra alrededor de toda la
dimensión. Al llegar a la puerta había un guardia. Le dije - ¿Cuál es tu nombre. ‘’Petra’’ –
dijo. Piedra divina la cual no se rompe
con ningún poder si no con el divino y es la divulgación de la verdad.
¿Puedo entrar. –Dije
Identidad – contestó.
Se iluminó mi ojo y mi pantalla mostró un pasaporte. Viéndolo dijo –Pasa- y amablemente me
guió. He aquí la ciudad más hermosa
jamás vista. Con cúpulas y brillantes y
doce puertas.
Recordé las dimensiones anteriores y vi la diferencia entre
ellas. Esta era la más hermosa, la
única. La 3ra, es como una sensación de
la séptima, la nube brillante y perfumada fue recordada al ver esto.
Las demás dimensiones eran normales, excepto la sexta que
estaba vacía, oscura y peligrosa, en la cual se apagó mi luz pero solo mi
esencia que es mi señor permaneció. Esta
brillantez jamás vista y sentida, era la séptima. Enormes habitantes de luz, millares, algunos
más grandes, otros eran infantes.
Al entrar me recibieron y dijeron debes seguir tu viaje,
vuela y no te detengas hasta llegar a la entrada y salida.
Entonces levanté mi vuelo con la misma velocidad y ellos me
escoltaron. Su figura simbólica y no
física fue captada por mi pantalla como una mezcla masculina con femenina que a
diferencia de mi especie no eran hombres ni mujeres y nada parecido a lo que en
la tierra llamamos ángeles.
Me guiaron al palacio de mi señor 32 y les pregunté los
nombres. Todos tenían sus oficinas y
cargos importantes en la organización y eran maestros de sus propias
jerarquías.
A mi lado el más pequeño como de 7 metros, un querubín
protector encargado de la inocencia. Su
cuerpo de toro y su cabeza de humano, traía una espada de fuego en su atuendo,
cantaba como parte del coro y cuidador de puertas divinas, hermoso, con una
flecha y lanza muy amorosa para grabar la fijación.
También un serafín adolescente que proyectaba sus consejos a
los habitantes jóvenes sobre la existencia, su forma no puede distinguirla
parecida a ningún ser terrestre, le vi un libro y una gran cola larga y hermosa
más recargado a masculino, su nombre ‘’Metra trun’’ y sentí su gran calor, su
luminosidad y llama que me abrazaba como protección y al escuchar su nombre mis
archivos abrieron una información heráldica que no había visto en mí.
Al frente del recorrido un ángel trono el cual dijo observar
planetas y el conteo orbital del tiempo astral y las edades de los lugares del
universo. A su lado un soberano ángel
del dominio.
Otro ángel virtual y voluntarioso. Otro ángel del poder y la conciencia. Un ángel principado con dominio de un grupo
de ellos el cual era el guía y custodio.
Y el más luminoso de mis acompañantes un Arcángel Líder de todo el grupo
de guardianes, mayordomo con gran energía transformadora llamado Uriel. Entonces entendí sus jerarquías y su lugar de
habitación al cual llamamos cielo.
Pero había muchos de ellos en la escolta para el brillante
yo visitante viajero aprendiz, principados y potestades había.
Entendí sus dominios, jurisdicción y jerarquías, su
dimensión hecha de bellas ciudades luminosas de piedras preciosas. Todos ellos tenían diferentes tamaños y sus
pantallas enormes, el más grande, Uriel como de 500 metros de altura, según mi
juicio terrestre.
Mi holograma abrió ventanas de gran información pero mi
memoria poco estudiosa sentía signos interrogatorios.
Corté el silencio y pararon de cantar y alabar contestando
mis preguntas.
¿Cómo se llama esta dimensión¿
Y en mi pantalla
apareció un ángel con un dedo en la ventana cielo. Y dijo ¿celestial. El universo es todo. Esto es cielo. –
¿Paraíso. –Pregunté –
No, paraíso es un tiempo de paz terrestre.
Supe que me guiaban al palacio de gobierno. Vi un gran palacio decorado con sabiduría.
Pregunté por el oscuro, Satán Lucifer. Innombrable por ellos. Pero me dieron razón y dijeron que su poder
era grande en la oscuridad. ¿Transita
este lugar de luz¿.
Dijeron- si. No desciende ni puede llegar, solo pasa,
transita pero tiene prohibido laborar aquí.
Entonces se encendió mi cristal con imágenes las cuales hablaban de
ángeles revelados que descendieron a las tinieblas del seol por seguir a abadón.
Apoleón su serpiente escorpión viaja todo el universo. Pero
odia la luz. Siente agresión al vernos
porque descubrimos su mentira al alumbrar.
Pero el no es malo como ustedes piensan- me dijo.
–Eso me perturbó- y dije -estoy confundido - ¿Quién es el bien y quién
el mal. – El bien y el mal solo es contrariedad que nos lleva a la sabiduría.
Aparecieron mil signos interrogatorios en mi pantalla.
Alguien me dijo habla con el príncipe, él te llevará a la
puerta del sagrado corazón que Miguel tiene en el pecho y que representa la
puerta a la habitación de descanso del padre altísimo, su centro, su ojo
incomprensible. Y por fin llegamos a la entrada del palacio, frenamos todos y
descendí a la oficina principal y me senté ante su escritorio. Me dijo siéntate brillante de la tierra.
Platicamos. Me sirvió
una copa. El vino era muy inspirador y
se abrieron todos mis archivos receptivos para guardar información.
Pregunté ¿Quién eres ¿
Soy el comandante Miguel
¿
¿Eres el jefe gobernador
de la séptima dimensión¿
Si y de todo el
universo.
Eres Dios ¿pregunté.
No, soy su mano
derecha, su hijo.
Eres Cristo ¿– Dije.
En tu tierra. Si, ese
es un nivel de sabiduría terrestre- Aquí
soy Miguel y en el camino al pasado y descenso terrestre soy Emmanuel. Este es futuro y el corazón es el
centro. Viajaste desde la tierra pero
fuiste más al pasado a conocer la primera y segunda dimensión, y diste vuelta
pasando por tu galaxia y tu tierra que es la tercera dimensión rumbo al centro
universal. Eso se te autorizó, yo te lo
autoricé.
Me mostró un documento con la firma, Miguel. Entendí su duplicidad y descubrí a mi gran
amigo y maestro señor de 32 holográfico y me levanté a darle un gran abrazo
efusivo y en ese momento se transfiguró el holograma de mi propio centro
visual.
Mi alegría era grande y mi entendimiento crecía más, pero me
faltaba discernir varias cuestiones y llenar ciertos espacios interrogatorios.
Su oficina era hermosa y fuimos tranquilamente a recorrer el
palacio que no era municipal, ni gubernamental, ni imperio, si no simplemente
administraba los miles de millones de seres de los mundos del universo
infinito. Todo lleno de pantallas, el
más grande universo web de las redes y navegaciones globales en su totalidad
informativas y su cámaras donde se veía cada rincón del universo y sus hechos,
una vigilancia universal tremenda y una ciencia y tecnología jamás imaginada. Sus carros ardientes que giraban a millones
por segundo con una transportación velocísima y todo tipo de sensores perceptores,
enormes y listos para la guerra.
Me mostró todas sus bibliotecas de escrituras santas las
cuales tenían tintas raras, una tinta la cual reconocí, tenía nombres
terrestres, pero había tantos libros santos compuestos de varios autores, cada
libro de un planeta habitado diferente.
La capacidad informativa me tenía impresionado.
Dijo - Mi padre
escribió en las mentes de los autores.
Pero mi hermano osa escribir autorizado por mi padre.
¿Porqué. Dije
inmediatamente. Te diré algunas cosas
rápido porque debes seguir tu camino al corazón.
Desabotonó su camisa y me mostró su pecho, apareció una luz
fulgurante, un corazón sagrado mostrando imágenes. Y me dijo.
‘’Te voy a aclarar de algunas dudas, y mi padre te aclarará
otras. Tengo el poder de transfigurarme
en carne y en lo que sea, también mis ángeles súbditos. Soy el brazo derecho del padre, el más
amado. Pero mi padre tiene otro hijo
querido, su brazo izquierdo y es el diablo.
El cual es poderoso. El fue
revelado en su juventud, a sus 60 millones de años fue revelado. Y su poder creció en las tinieblas porque su
oscuro mundo es el mismo universo y odia todo astro de luz porque sus ojos ven
en la oscuridad y en la luz queda ciegos. Se alimenta de miedos, inseguridad,
mentira. Crece cuando hay ignorancia y
se fortifica cuando gana adeptos. Se pasea
por todo el universo. Incluso entra al
corazón cuando mi padre lo acepta o lo recibe.
Es el acusador mitotero que pone
piedras de tropiezo a todos los que desean luz.
¿Porqué lo dejan hacer eso¿
Pregunté sorprendido. - Me dijo –
Es hijo de mi padre. No es malo.
¿Entonces porqué daña.
¿Porqué engaña, miente, destruye, pelea.
Dije. Yo estaba alterado.
Cálmate – Me dijo –
Te explicaré – A él le tocó ser el oscuro, negativo, contrario a la luz porque
su personaje era adecuado y su poder cubrió todo el espacio de la mano
izquierda universal de mi padre. Nosotros
chocamos con sus conceptos porque somos amor.
Ellos son demonios y están en la sexta dimensión y también tienen un
oscuro palacio de gobierno negro el cual no viste porque las estrellas de fuego
te lo impidieron sobre todo la de 6 picos, la más peligrosa.
Ellos están autorizados por mi padre para navegar la web
universal como demonios que están comandados por el oscuro Satán el cual en
cada planeta tiene un anti luz que en tu caso es un anticristo. Su forma de serpiente se esconde en el mar y
se manifiesta como dragón.
Envía a cada uno de sus súbditos a que suban basura a la web
y puedan dañar las mentes haciéndolas poco a poco a su proceder, sobre todo se
traga las mentes de los niños actuales.
¿Pero porqué se le autoriza hacer el mal, si no es malo.
En esta era he ido
dos veces a tu tierra el llamado mundo terrestre. El primer guión llevaba un personaje malo
sirviente del oscuro dentro de mi propio grupo de actores. Yo el protagónico lo acepté en mi
elenco. Se llamó Judas y a él le tocaría
ser el malo de la historia.
¿Porqué. Dije –
‘’Porque su personaje perverso correspondía al papel del malo. Porqué una historia sin personaje malo no
sirve. El malo hace problemas y
conflictos y el bueno vence siempre al final’’.
‘’Sus mentes tienen grabaciones que no entenderás pero mi
padre podría sacarte algunas dudas’’.
¿Entonces la existencia es una escena, película, obra,
historia literaria, imaginación de nuestro padre. Dije.
No. Contestó. Eso es en tu tierra porque son imitadores de
la creación. Yo soy el mano derecha,
pero la izquierda me ayuda a que ustedes los habitantes de los mundos distingan
lo bueno de lo malo, lo oscuro de la luz.
Pero el dolor es necesario. También
el sufrimiento, ¿Para qué¿ Para
curarlos. Los problemas deben existir,
¿Para qué. Para resolverlos. ¿Cómo puedo resolver un problema si no hay
uno. ¿Cómo puedo curar si no hay
enfermo. Y ¿Cómo puedo vencer si no hay contrincante, y todas estas cosas son
tu escuela.
¿Entonces no odias los problemas ni la guerra. Pregunté
‘‘¿Cómo puedo amar la
oscuridad si soy luz¿’’. Dijo - ¿Cómo
puedo amar la ignorancia si soy sabiduría.
¿Cómo puedo amar la guerra si soy paz.
Dije – No entiendo-.
Prosiguió- Mi hermano no puede hacer el bien ni yo el
mal. Su mano izquierda es parte del
cuerpo del padre y es una mano muy necesaria y está hecha para luchar contra la
derecha que soy yo que también formó parte del cuerpo de mi padre y una es
oscuridad y la otra luz y chocamos y al chocar formamos la chispa existencial
de la dualidad del bien y el mal, los cuales no pueden existir el uno sin el
otro y juntos forman el rostro y cuerpo completo de nuestro padre
infinito. O sea el todo. Somos millones
de células que formamos una unidad total, con su blanco y negro que son dos y
encerrados en un círculo unitario que es la existencia.
Si deja de existir el bien tampoco existirá el mal. Y
viceversa.
¿Haces guerra tu también. Le pregunté.
Si- contestó – Mis
armas son la luz, los rayos de sabiduría, son un filo de la espada de doble
filo que sale de la boca de mi padre, el verbo sabio y mi guerra es el
conocimiento de la verdad, abrir los ojos y ver la luz y el entendimiento. Destruyo la oscuridad al alumbrar. Y mis soldados son un ejército de seres de
luz con legiones en todo el universo.
Satan puede tapar mi pincelada blanca solo una vez con su
negra pintura, pero mi blanco luminoso taparía cualquier pincelada negra y jamás otra oscura pintura la tapará si no que
saldrá siempre por encima su luminosidad permaneciendo ante todo.
¿Cuántas veces has ido a mi tierra. Pregunté
En ésta era una vez.
La primera para corregir, guiar, y la
segunda la cual iré en unos días celestiales, es para juzgar porque a Satán se
le está terminando su tiempo terrestre y después de que lo aventé a la tierra
engendró un hijo oscuro anticristo que ya ganó mucho espacio pero llegaré en
poco tiempo y descenderé a tu tierra acabando con él.
¿Destruirás a tu hermano.
– Pregunté. ¿Destruirás el brazo oscuro de nuestro padre.
No. Contestó. ‘’Alumbraré la oscuridad de los habitantes en
tinieblas, destruiré la ignorancia, dejaré visible la verdad, la luz, el amor,
curaré a los enfermos, perdonaré a los afligidos, borraré la holografía oscura
y el virus del dragón, sanaré la ceguera y le daré la libertad a los presos,
iluminaré el camino y seré la verdad y la vida eterna y Satán quedará preso
cuando no pueda abrir puertas mentales de enfermedad. El brazo oscuro siempre
será. Mi padre es eterno y sus brazos
también, pero los habitantes del brazo oscuro podrán ser liberados hasta llegar
a la fortaleza iluminada del brazo derecho del padre universal.
Entiendo. Dije. Pero tengo entendido que al debilitarse
Satán se debilitará el brazo izquierdo de nuestro Padre celestial y será como
un discapacitado. Creo que no puedes quitarle oscuridad a la siniestra ni
ponerle demasiada luz a la diestra porque habrá un desequilibrio. ¿Vedad¿
Te contaré una historia y con ella el ‘’secreto de la creación’’.
Te la dirá el Unigénito.
Nosotros no necesitamos a Satán. Ni mi padre. Solo ustedes
los aún mundanos.
El mundo es una escuela. Cada dimensión y vida es un grado. En
esta escuela debes tener problemas para que puedas pensar en resolverlos con tu
propia capacidad, y he ahí la prueba de tu conocimiento. Los problemas de la
ignorancia los provee Satán y yo los resuelvo. Él esta en tus conflictos y yo
en tus soluciones. Los dos estamos en ti pero tú eliges quien es que labora en
cada momento en tu interior, el que dice mentira o el que dice verdad. Los dos
acudimos cuando llamas a alguno de los dos. Solo proveemos tu mandato. Somos el
bien y el mal. Pero tú eres el que lo decida actuar. Cuando me haces trabajar,
tu diablo descansa y se deprime. Y cuando lo pones a trabajar yo me salgo y me
voy.
Los humanos y los demás mundanos de otros planetas necesitan
a Satán para cursar la universidad de las 7 vidas. Pero Satán no debe
permanecer en ti porque mueres, si no que al verlo debes sanar tu dolor y esa
experiencia es la que representa el crecimiento.
Nosotros los Ángeles no necesitamos a Satán. En el cielo no
es necesario. Nosotros somos luz pura al igual que tu espíritu, solo que tu
carne es portador de pecado que es la especialidad de Satán. Y mientras seas
humano serás dualidad, luz y oscuridad.
Este es el ‘’Secreto de la Creación’’. Mi padre te dirá el
‘’Secreto de la Existencia’’.
Te repito brillante que la fortaleza del cuerpo está al lado
derecho, y el izquierdo es una imitación al revés de color contrario de la cual
se sujeta el inicio de la sabiduría.
Prosiguió – Tus hermanos terrestres miran pero no ven, oyen
pero no escuchan, saben pero no entienden.
Y dicen ‘’No hay mal que por bien no venga’’ pero no entienden lo que
dicen.
El bien inicia la historia, el mal la prosigue y el bien
vuelve a culminarla. Siempre triunfa el
bien al final de la historia. No hay mal
que dure siete mil años, porque al séptimo desaparece’’.
Describe a nuestro padre. – Le dije – Por favor.
El altísimo tiene dos brazos los cuales ya conoces, tiene un
corazón que estarás en él hoy mismo y tiene una cabeza la que nunca conocerás
ni tú, ni yo, ni nadie jamás. En los
brazos está la dualidad que choca y sale la chispa creadora de la existencia,
son sus extremidades que trabajaron para la creación.
El corazón es la gran misericordia que nos regala la vida a
todos los seres, la gran promotora del amor universal de donde parten los
querubines, cupídos y todo tipo de perdón y arrepentimiento de los actos
izquierdos.
Y la cabeza es el patrón de todo, la que ordena todos los
movimientos astrales del universo y la única que conocen totalmente los tiempos
y fechas proféticas exactas, las matemáticas y decide los cambios en relación
al albedrío conforme al libro de la vida.
¿Has recorrido todo el universo. Pregunté- ¿Cuánto mide.
No hay fronteras – Contestó-
Es una sola pieza sin contornos ni límites al igual que la
sabiduría. Tu capacidad es ilimitada y
la mía también porqué es holográfica, pero yo estoy consciente del poder en el
que estoy por eso soy lo que soy y tu no estás consciente aun de mí, si no solo
de ti por eso tu información es a nivel más bajo. Pero tus hermanos carnales ni siquiera saben
quienes son y sus pantallas no solo están vacías con carpetas vacías si no que
está apagadas aun siendo inconsciente de todo esto.
¿Te ha visitado alguien más aparte de mi. Pregunté –
Si. Henok, padre de
Matusalén. Fue raptado al igual que tú
cuando ibas caminando con Eliseo y te subieron a mi carro y te trajimos al
palacio inconsciente y desde entonces te elegí para estar en tu ojo desde que
te inclinas en tu aposento. Me pusiste el agua en el Jordán y serás tu quien me
acompañe junto con Moisés en mi próximo viaje a tu tierra como anunciantes a
los cuales sacrificarán en público vestidos de silicio.
¿Quien es poseedor de la felicidad en este momento para
acercarme a él¿
La sabiduría. Solo la
sabiduría posee la felicidad. Búscala y te dirá la clave.
No eres tú la sabiduría.
¿ La poseo. Soy más que eso. Los humanos piensan que yo soy
el proveedor de la felicidad. Yo no proveo la felicidad si no la clave para
encontrarla. Son una serie de números código de 7 vidas humanas en la cual cada
vida te llega a la conclusión de un número al final, y sumados cabalísticamente
te dan un resultado y esa es la combinación llave que abre ese sentimiento tan
positivo.
Mi único regalo fue la vida y los medios para encontrar la
llave de la felicidad. Esa es la verdadera felicidad con bases. La otra
felicidad es aparente y esta confundida
con la sonrisa que solo es una emoción momentánea o temporal.
Pero el camino a la llave de la puerta son una serie de
situaciones, la cual cada situación te deja un resultado.
Emocionado le dije – Háblame más – háblame de los profetas
de mi tierra- de Abraham, Moisés, Salomón, David.
Se acaba tu tiempo me dijo.
Ahora no puedo. Debo llevarte a
la puerta de salida de mi dimensión para tomar la puerta del corazón. Deberás
llegar el mismo Sabbat a medio día porqué estarás en la tarde en la habitación
de mi padre y sentirás su presencia aunque no podrás verlo.
Entonces me dio instrucciones de vuelo y como llegar a la
hora exacta. Se obediente. Dijo.
Me dijo – abre tu ojo -
y al abrirlo metió su mano y puso un sello en el pasaporte con una
fecha, sacó una visa y la autorizó y la colocó en el centro de la identidad del
ojo el cual contenía el chip central.
Entonces levanté el vuelo a la misma velocidad de 900,000 y
aterricé Sabbat a medio día en la salida del cielo hacía la octava dimensión.
Ahí no había guardián. Era una forma tecnológica de entrar,
un sensor que todo lo veía y todo lo sabía, el cual me interceptó y al abrirse
mi pantalla sacó la visa autorizada por Miguel y me dijo pasa. Me dije al fin. Vi mi reloj, eran las 12 a.m.
Entre y tuve que recorrer un túnel el cual tenía
señalización con flechas iluminadas y luces por todos lados, todo era
holográfico sin necesidad digital, si no automático.
El túnel me llevó a un laberinto el cual probaba mi
inteligencia pero a la vez supe que cada túnel era una vena que llevaba el
oxigeno vital al centro del corazón.
Por fin se terminó el túnel y me encontré con un súper
auditorio. Había miles de millones de
gradas y butacas frente a un estrado principal, toda una organización universal
en reunión los cuales al percibirme desaparecieron de inmediato.
Atrás del estrado estaba un enorme libro y una súper mega
pantalla holográfica. Estuve 10 minutos
observando tanta ciencia desconocida. El
libro tenía nombres escritos. Busqué a
mi familia terrestre pero solo encontré algunos.
Escuché una voz poderosa que me dijo – sigue- camina –
atraviesa la pantalla.
Entré en la pantalla mega enorme y me transportó a un
universo con millones de imágenes de actos misericordiosos y en el puro centro
una gran luz la más grande, brillante e impresionante, el sagrado corazón de mi
padre.
Pero la voz venía de arriba. Relájate. Me senté en el mar vítreo. Al perder lo encandilado pude ver alrededor
de mí, 24 seres de blanco con forma de ángeles tipos humanos pero diferentes los
cuales se postraron a mí alrededor. Más
cerca de mí alrededor en la segunda esfera, 4 personajes con forma de animal
más grande que los ángeles y arcángeles. Yo quedé en el centro en la esfera
principal de mar vítreo.
Un rayo de luz de arriba descendió exactamente por mi
memoria pasando por el centro de mis pantallas hasta llegar a la retina de la
pupila de mi mayor archivo.
Comunicándose me dijo. ‘’ Has abierto los ojos. Has
entendido. Mostraste buena actitud. Sobre pasaste la conciencia. Abriste puertas celestiales y llegaste al
corazón’’.
Me incliné y dije –
Mi señor Dios - ¿Porqué me haces este regalo tan grande y hermoso de tu
presencia.
Contestó – no soy Dios. Yo te regalé la existencia pero lo
demás tú lo construiste.
Repitió –‘’ No soy Dios- ni tengo ningún nombre, solo soy yo
el que soy. Y tu vida no depende de mi
si no de ti. Ya la tienes, cuídala.
Si soy un equivocado, entonces porqué estoy aquí – exclamé.
‘’Porqué de los humanos llenos de ignorancia tu eres el
sabio’’. Y llevarás un mensaje escrito a
tus hermanos. Mañana domingo partirás a
tu tierra.
Abre tus pantallas y saca tus inquietudes.
Entonces abrí mis pantallas y pregunté.
¿Si no eres Dios, quién eres.
Soy el alfa y el omega, el principio y el fin, omnisciente, omnipotente
y omnipresente. No hay nada antes ni después.
Soy absoluto.
Dios es aquel de tu tierra al que esculpen, pintan y adoran. Dios es al que discuten, inventan y ruegan.
Dios es aquel que comercializan y venden.
Yo no soy ese. Dios es al que tus hermanos les construyen
templos en la tierra, el que los salva y los cura. Yo ni siquiera me acerco a ese planeta porque
nadie me desea conocer, solo tu y otros 3 pudieron acercarse a mí.
Dios es aquel ante el que se postran y le piden, le ruegan y lloran y el acude y les resuelve.
Yo no soy Dios. Dios
es el que tiene un representante en la tierra y se sienta en un trono de
riquezas y lujos’’.
Me quedé callado y no pude decir nada.
Me dijo llámame padre universal.
Padre – dije – si el que está en la tierra no eres tú, ni tu
hijo derecho, entonces ¿Quién es. ¿Acaso tu no lo eres todo. ¿Acaso no estás en todos lados. ¿Acaso no
eres tu la misma oscuridad.
Me dijo. No. Eso es mi cuerpo. Es mi universo, es mi creación. No yo. La oscuridad es una enfermedad
necesaria solo para los mundos planetarios.
No entiendo – dije-
Atención –dijo- ‘’Mi
cuerpo es mi cuerpo y lo componen 2 brazos, un corazón y la cabeza mente.
Son 4 órganos en uno.
Mi brazo izquierdo son todos los seres negativos del universo, y el derecho
son todos los positivos. El corazón es
sus conciencias, y mi cabeza soy yo mismo sin ustedes.
Mi cuerpo son ustedes no yo.
Pero yo soy todo, porque al habitar mi pensamiento me muevo en mi propio
cuerpo que es el universo independiente.
Mi cuerpo tiene libre albedrío y yo lo juego. A ustedes juego. Ustedes no soy yo, si no que son míos y son
mi cuerpo y el universo lo juego pero no lo administro.
El Dios de ustedes no soy yo son ustedes mismos. Sus propios
personajes son su Dios. Mi hijo fue y lo mataron y después lo comercializaron,
mi mano derecha.
Ustedes son mi hijo Satán.
Él es para algunos el Dios. Para
otros ustedes mismos’’.
Dije. Se que no
tienes nombre. Defínete, yo escucho.
Ya lo hice. Soy tu fe en los demás. .
‘’Soy el acto de bondad’’ esa es mi memoria. Ese es mi mensaje.
Mis decisiones son evolutivas no son fechas.
Yo te he creado, de ahí todo lo que hagas será tu
futuro. Mi hijo interviene con amor si
te acercas.
Ábrete para ellos. No
te cierres para ti. Date, no te apoderes. El ego está en el centro entre la oscuridad y
la luz. Muévete de ahí.
Ponte en la luz. Deja tu ego.
¿Puedo verte¿. Dije.
Me estás
viendo. Soy mi mensaje. Soy ese conocimiento.
¿Cuándo irá tu hijo a juzgar mi tierra.
Depende de
ustedes. Solicito 12,000 de cada tribu
en cada generación de las 12 tribus, me faltan 490 sabios que elegir y el
tiempo será cumplido.
‘’Lleva éste mensaje para que abran los ojos y elegiré los
que faltan’’.
Sintetízame el mensaje – Dije.
No pidan, no rueguen, no alaben, no me canten, no se
inclinen, no hablen, no discutan, no juzguen, no me definan, no estudien libros
sagrados, simplemente amen, ayuden, callen, guarden, salven, sanen, den,
liberen, despojen, regalen y den ejemplo de esto’’.
Diles que mi cuerpo tiene poder y todo está hecho de poder
mental. Si todos ven a un solo punto a
la misma vez, eso adquiere poder y fama.
Si todos creen en una cosa a la vez esa cosa se hace viva y adquiere
poder y fama. Si todos hablan de eso,
eso tendrá poder. Ustedes construyen y
destruyen juntos. Crean Dioses falsos y
les dan poder. Unen sus mentes en una
estatua y le dan poder. Entonces esa
estatua destruye la verdad y actúa con el poder que le confieren para negar al
verdadero altísimo padre universal y ganar la fe de ustedes. Pero esas estatuas los llevarán a la
oscuridad, un materialismo ciego, una sed objetiva y mortal, perderán el alma,
la existencia.
Mi semejanza es espiritual no física. Diles que no me representen ni me retraten ni
me pongan ningún nombre, si no que me agraden con actos de amor.
Que no soy pensar, alabar o juzgar, soy ayudar y
salvar. Soy el que soy no el que desean
que sea. Y no soy el que se imaginan si no el que nunca se han imaginado.
Diles que se nieguen y me verán. Que no crean en ellos y creerán en mí. Que destruyan el Dios que tienen y podrán
encontrarme’’.
Sé que estás muy lejos de ellos. – Exclamé.
No. Estoy viendo todo, que usan mal su
libertad. Estoy con ustedes. Estoy dentro y no me sienten.
Estoy en ustedes dentro y me niegan.
Niéguense y me sentirán.
O soy yo o son ustedes. Quiero guiarlos y sus egos me ignoran, porque
soy la verdad y el arrepentimiento y soy el reconocimiento de sus propios
errores que no quieren aceptar. No los obligaré a ser sabios porque mi regalo
es la libertad de pensar y actuar y sus voluntades deben decidir bien o mal y
ese será su propio destino.
Ellos crean Dioses a su gusto donde cómodamente pueden hacer
y deshacer la verdad que desean que sea. Se inventan historias con ídolos y le
llaman cultura y tradiciones y les hacen alabanzas y homenajes y roban y se
toman fotografías y las publican. En sus iglesias come mi hijo Satán con
ellos. Conviven con él.
Diles que llegó el tiempo de cambiar y que se fortalecerá mi
mano derecha. Abrirán los ojos y los
necios perderán el alma. El poder de mi
mano izquierda, esa misma que los tiene cómodos, esa los destruirá a ustedes, y
sus propios Dioses tomarán vida y los devorarán con el mismo poder que ustedes
les dieron, y que pronto irá mi mano derecha y vencerá a la izquierda y las dos
manos se volverán a su lugar una derrota y la otra triunfante. Reinará la luz en muchos y otros perderán el
alma. Porque mis manos solo señalan y
regresan a su lugar, mi cuerpo, pero ustedes se salvan y otros desaparecen.
Dije - Se que estás
en todos nosotros en nuestro holograma pero tu voz viene de ésta luz superior
que traspasa mi memoria. ¿Puedes subirme a tu holograma, pensamiento
conciencia.
Dijo - No. Morirás.
Desaparecerás. Ni Miguel soporta
el peso de ésta información que es para un holograma con capacidad de 700,000
millones de veces más grande que el de mi hijo unigénito. Y si te digo quien soy no entenderías nada
porque tu semilla está sembrada desde lo finito y tienes pasado, futuro y fronteras
y te engendraron y engendras. Esa es tu
semilla mental.
A mi no me engendraron ni soy finito y si te doy una
molécula de mi centro mental explotarías inmediatamente. Yo no fui sembrado, soy el sembrador. Y tu tiempo no alcanza para recorrer una
milésima de mi cuerpo. Así que ya que
seas eterno, aun así cuídate del oscuro.
Pero alégrate porque tocaré el rayo de luz que te traspasa,
lo tocaré con mi dedo y la información más necesaria se pasará automáticamente
a tu holograma.
En pocos años irá Miguel a tu tierra y habrá guerra en el
cielo y en la sexta dimensión. Miguel
alumbrará y el oscuro anticristo desaparecerá.
Un político de una organización de países unidos morirá y el falso profeta
será devorado antes por él mismo. Y el
padre de ellos, será encadenado para que estén en paz mil años.
Miguel irá a tu tierra y tú lo esperarás allá porque tú
brillante eres Elías y le lavaste el cabello en el Jordán.
Viaja. No te detengas
hasta que llegues.
Viaja en paz hijo y esparce mi mensaje. Pero antes te sacaré la última duda de tu
cabeza, ya que has aceptado que dentro de tu grandeza serías incapaz de
comprender mi existencia por tu nivel finito.
‘’Serás eterno y sin embargo mortal porque la muerte no es
inexistencia en el universo, la muerte es que te aborrezca tu padre’’. Puedes pasar de brillante a oscuro y seguir
existiendo pero solo cambiarías tu función.
Entonces estarías muerto y condenado al eterno Seol’’.
‘’El amor’’. No digas
te amo alagándote y satisfaciendo tu deseo de decirlo, o de sentir placer
tú. Dilo para el placer de otros y
guarda tu ego’’.
En tu pueblo están capitalizando la pobreza. Toman a los
pobres de carnada para pedir cooperaciones.
No sienten la miseria, la usan astutamente. No la sufren, la convierten en empresa. Toman las mentes de la sociedad y les meten
basura por publicidad. Por eso no estoy
en ellos, y si me buscan en su interno lo hacen sin sentirlo y ven el que ellos
desean.
Ve. Viaja a tu lugar
y escribe. Viaja, no detengas tu vuelo.
Señor – dije.
Por último descríbeme la felicidad, la eternidad, háblame un
poco de eso.
‘’La felicidad es el camino hacía ella misma, con el deseo
ferviente y la muy sentida esperanza de hallarla. Pero una vez hallada ya no es, si no algo
descontinuado. Eso es para ustedes’’.
‘’La eternidad es entrar en lo inimaginable, en la belleza
jamás sentida y en el amor absoluto del tiempo’’.
Escucha el ‘’Secreto de la Existencia’’. La oscuridad se
iluminará en tí cuando ya seas celeste. Y cuando todos los humanos abran los
ojos mi brazo oscuro se iluminará y ya no habrá enfermedad en él y se acabará
la Dualidad del ser supremo el cual será todo amor y el universo dejará de ser
oscuro. Piénsalo así y se iluminará tu propio universo y no podrás ver
oscuridad. Pero esto pasará cuando yo ya no necesite el brazo izquierdo, cuando
ya los humanos despierten, porque sabrás que el secreto reside en que Satán los
engañe, los duerma y caigan en el error para que así Miguel los despierte y les
habrá los ojos a la luz, y así se cumplirá el proceso de sucesos para la
sabiduría y hayan cursado la universitaria vida humana que les dará la
certificación celestial.
Y dijo nuevamente – Viaja no te detengas hasta llegar a tu
pueblo. Agradecí y salí por los mismos
túneles, con una gran sensación de poder, sobrepasé las pantallas del juzgado y
el libro de la vida, y elevé mi vuelo a la misma velocidad observando cada
arteria del corazón, con un enorme deseo de amar y dar la vida por los seres
del universo, con mi holograma cargado de información aplicable.
En el camino me retumbaba cierta duda la cual estaba en mis
propias pantallas ya solucionada. Ahí
entendí la inconsciencia de lo desconocidos que somos. Solo se un poco de mí, porque soy
exteriorista.
Entendí la más grande verdad. ‘’Que el exterior no existe’’. Solo el interior. Y que no percibimos. Si no que la misma confusión nos hace pensar
en la proyección del sentido. Lo supe
porque al final de cuentas yo no di un paso a ningún lado. Todos los paisajes universales, historias y
demás estaban escritos en los archivos de mi holograma. Ahí pasó todo. Dentro de mí.
Seguí viajando. Le
conté a Crisalían y a los demás la habitación del padre. A los ángeles, y fui dejando mensajes desde
mi red en lo que viajaba, tecleaba y adjuntaba archivos e imágenes en los
programas más adecuados para cada dimensión que dejaba atrás.
Mi padre había esparcido una gran red satelital en casi todo
el universo y su vigilancia era global.
Su omnisciencia y omnipresencia era única.
En mi reflexión de viaje descubrí que el padre es el padre
no es nada parecido a lo que pienso y piensan, él es él y nosotros lo
imaginamos y conceptualizamos a nuestra manera, lo hacemos, moldeamos,
pintamos, creamos, definimos a nuestro gusto, del tamaño que queremos y con la
sabiduría adecuada a lo que nos conviene.
Pero ya basta. Les
diré que él no es nada de lo que creemos o sabemos, ni siquiera yo que lo
escuché podré saber su imagen. Lo que si
se es que nos da la espalda ahora mismo porque no queremos verle el rostro.
La realidad nos transporta al mundo de Dios. Pero hemos adoptado el sueño.
Al cruzar la entrada a la tercera dimensión venía una luz
hacía mí y me dijo. ‘’Hermano he venido a decirte que descubras las opciones de
la ventana que te da el séptimo programa’’.
Entonces me detuve a escucharlo y puse mi dedo en el ojo y se abrió
ventana apareciendo opciones.
Me dejó y se fue, y no distinguí su identidad.
Ahí descubrí la mecánica de mi máquina.
Puse mi tacto en la opción 7 y me situó en un lugar
blanco. No había nada. Ni universo, ni viaje, ni ustedes.
Solo yo ante el infinito.
La gran soledad interna. En
silencio y vacío. Toqué inciso A y
desaparecí. No vi nada. No vi ni
oscuridad. No tuve ojo ni estuve ciego,
pero tampoco veía. Solo sentía.
Toqué inciso c y aparecieron 9 números opcionales y opté por
el 3 pero alguien detuvo mi mano ante la pantalla. Me dijo.
No pasa nada pero no experimentes eso ahora. Ya te tocará.
¿Qué pasa. – Dije.
Solo dejarás de
percibirte totalmente, no existirás por un rato y nada existirá por un rato.
Pero esa es la función de un interruptor que te vuelve a la
existencia en unos minutos, es como un juego.
Pero esto tiene una moraleja, que todo pasa dentro de ti.
‘’La destrucción es una palabra en tu mente, una mente
imaginaria que habita en un universo que no existe, así que por lo tanto ni
siquiera la mente ni la imaginación podría ser imaginada’’.
Me dijo- además nadie puede destruirte porque no existes, ni
tampoco el destructor ni la misma pelea entre ellos’’.
Pregunté ¿Eres mi señor 32.
Me dijo.
Toca mi mano y sabrás mi nombre. Entonces antes de tocar lo vi de pies a
cabeza. Era un ser enorme parecido a los
ángeles hecho de luz con fuego. Lo toqué
con toda mi confianza queriendo sentir su fogosa luz. Pero al tocarlo me transportó a la opción 6
donde todo estaba oscuro y sentí nuevamente el vacío y la soledad. Escuché el ruido como de serpiente venenosa y
entonces sentí miedo. Busqué mi propio holograma y no lo hallé, y de nuevo
como aquella vez me entumecí y no sentía mi cuerpo desapareciendo todo rastro
de existencia ante mi mente. Pensaba
pero no sabía ni con que y me asaltaron las más frías y terroríficas dudas. Me
sentí en un agujero.
Pensé mil cosas en ese momento y grité ¿Quién me ha
contaminado¿ Escuché una risa burlesca y
horrorosa y ahí supe y descubrí al diablo.
Traía una daga y la clavó en el centro de mi ojo. Fue ahí donde supe de mi ojo perdido, cuando
sentí la agonía del dolor en mi centro.
En medio del dolor empezó a caerme tierra encima, escuché las palas que
me enterraban y sentí el peso de varios cubriéndome en un agujero con polvo. En ese momento recordé mis hijos y sus vidas,
mi hijo ya casado y mi hija a punto de formar su hogar, mi bella dama quizá
viéndome tirado en una cama y pensé, de que sirve lo que siento por ellos si
ahora mismo no me levanto de ésta tumba.
Inmediatamente tiré mi puño hacía todo lo que me estaba aplastando y mi
fuerza sentimental aventó el peso y la oscuridad con energía y apareció un
agujero de luz de día. Salí de mi tumba
y ya nadie había en el funeral. Volé y
en un segundo aparecí ante mi casa y me metí en Ernesto, el cual estaba levantándose
de la cama después de un dolor. Abracé a
mi hermosa dama y le dije te quiero, al sorprenderse le dije ya sané. Tomé el teléfono y marqué a mis hijos. También les dije, los quiero. Pasé dentro de mi cuerpo varios días. Sin salir de mí. Quería descansar de la apertura de conciencia
y sentirme un niño inocente por un tiempo.
Me vi al espejo y tenía rojo uno de mis ojos. Mi cuerpo un poco entumido. En dos días regresó mi visión holográfica con
energía. Me habló mi señor 32 y me dijo.
Te engañó.
si señor-dije- se
vistió de luz y fuego y fue aparente.
Su naturaleza es oscura pero se puede transfigurar
temporalmente en aparente luz. Pero
puedes reconocerle sus actos sin identidad.
Mi padre repitió viaja no te detengas y no obedecí. Al verlo me detuve. Me envolvió.
Mi señor dijo. Sal de
ahí. Sal de ti. Aun te queda unos años, úsalos porque en 20
años entrarás en oscuridad para tu última prueba terrestre en la que saborearás
todos los dolores y alegrías que te darán tu última iluminación.
Ven y te mostraré a donde debes guiar a Ernesto y al
brillante, a cada uno en su nivel, positivamente a sus quehaceres. Te daré una clave para cada uno.
Atención a ésta fórmula.
Introduce tu mano en el holograma y prográmalos para éstos 20
tiempos. A él llévalo a conocer el mundo
al lado de su dama. Pruébale una vez más
la fama y la alabanza mundana, que sé que a él no le importa ya eso y no
despegará sus pies del suelo. Pruébale
con fortuna y verá que se despojará buscando a los necesitados. Pruébale con premios y verás que Ernesto tú
ha cambiado con ese tu viaje al corazón, que tu información se ha transferido a
su holograma duplicado, y que los aplausos no le provocarán presunción. Y verás su crecimiento cuando veas que sabe
lo que tú ves y ve lo que tú sabes y sabe que su carne es temporal por 7
sesiones y que su ojo no necesita materia si no información.
Sal y ven y pruébate a ti también. Y deja de creer que estás metiendo
información a tu holograma. No. Ya está adentro, solo la estás descubriendo,
encontrando. Deja de creer que yo y mi
padre somos seres extraños que vivimos lejos.
No. Estamos aquí en ti, somos tú
en ti. Deja de pensar que viajas. No. Tu viaje es virtual, todo se graba y
sucede, todo se piensa y se imagina y sucede al programar opciones a tu
máquina.
Viaja. No pienses que
viajas, si no navegas, y tu red satelital son tus venas. Tu mente da orden a tus extremidades y la
orden viaja, viaja a gran velocidad y tus manos obedecen y tus piernas escuchan
y se mueven. No te desprogrames porque
el psiquiátrico aun no sabe acomodar nervios, y tu virtud espíritu aun no
entiende la capacidad de cada pantalla.
Ven y escudriña la forma de llegar a donde se acabará la
duda y la confusión, al octavo reino, la eternidad.
Después de eso. Mi
señor 32 desapareció.
Yo les puse color a cada acto y a cada personaje. Al verlos los veía blancos, grises y
negros. Los etiquetaba por sus actos,
frutos y funciones. Mi calculadora sumó,
multiplicó y dividió y al final me dijo que la lógica matemática dice que luz
produce luz y oscuridad produce oscuridad.
La oscuridad no podrá apagar la luz.
Pero la luz si acaba a la oscuridad.
Que la buena semilla dará buen fruto y la mala, malo. Lo contrario a esa lógica es engaño. Y no necesitamos ni 10 minutos para
entenderlo. Sin embargo aun sabiéndolo
dudamos. Por nuestra naturaleza dual.
Entonces me dije, descansa.
Fui y me senté en el pináculo de una montaña y desde ahí me observé.
Observé a los demás. Los actos de los
buenos y los tontos, de los sanos y los equivocados. Supe que nadie se observa a si mismo y menos
de lejos. Creen ciegamente en ellos y
caminan como autómata a lo que van todos, a ningún lado, a saciar su sed banal,
a darle vueltas a lo mismo sin escalar,
a llenarse de cosas que brillan, a darle gusto al cuerpo sin ver su esencia y
menos de lejos. Me vi. Y me puse detrás de mi y de la montaña y me
vi a mi mismo viéndome. Hice un juicio
de mí viendo al que me juzgaba en el pináculo que veía mi cuerpo en el
mundo. Le di más alejamiento a mi
angular y pude ver los planos de pensamiento desde una perspectiva tan lejana
que me convertí en un ser tan enorme observando que uno es tan pequeño como una
bacteria. Entendí que la grandeza está
en el entendimiento y no en el tamaño.
Después de guardar éste conocimiento decidí descansar un
poco habiendo programado a Ernesto yo.
Me recosté sobre las piedras calientes por el sol. Cerré sesión.
Me arropé con una ola enérgica de cobija. Quité la clavija y apagué. Permanecí despierto media hora, lo que duro
mi batería con energía. Y caí
rendido. Dormí.
Habiendo sido mujer en sus primeras vidas se encontró con
los mismos seres pero poniendo papeles al revés a los personajes.
Su madre se llamaba Flor y su esposa Rosario. Sus hermanas 2
de ellas Mary de diferente padre, hijas de Flor. Su madre lo amaba más que nadie y lo entendía
como si hubiese vivido a su lado más de una vida. Y su esposa que le insistía que se cuidara y
lo trataba como a un niño que hay que proteger.
Una señora no de su familia quien lo visitaba y le daba consejos, quien
le dio clases de literatura a la que Ernesto admiraba y quería, una gran
señora.
Ese era su mundo. El
sabía que un día se iría a lo desconocido, aunque su duplicado le introducía
información hallada en él mismo.
En su diario escribir aparecían ordenes que debía
cumplir. Su pluma le dijo observa los
años y la generación. Ve las órbitas y
observa el cielo. Ahora señala el futuro.
El dinero no existía.
Las compras eran códigos y chips.
Los pagos. El mundo había
renacido hacía 100 años. En el 2113 Ernesto ya tenía 60 años y su bella dama
58. Las casas tenían todo tipo de sensores inteligentes en beneficio a la
comodidad humana. El cielo terrestre muy
traficado con autos solares y agua.
Había poco paisaje y miles de iglesias de convivencia empresarial,
compra y venta de sabiduría y la milagrosa oración para atraer el dinero. El lujo se veía en los Cristos de oro y todo
tipo de brillantes en los altares. No había
cruces. Todo era el Cristo feliz que
todo lo puede con dinero y tecnología.
La gran estatua de Dios hecha de bronce simbolizando el poder y la
riqueza. Lleno de elegancia y
collares. Encerrado en cristal blindado.
Ernesto habló de una gran guerra. A los años se levantó la Organización Mundial
en conflicto con oriente. Los ataques no
pararon hasta destruir un templo antiguo que en siglos antes era muro de
lamentos. Lo que nadie esperaba en ese
tiempo. Se anuncia la órbita de un
meteoro que provocaría daños al planeta.
En pocos años viene el suceso. Se recuerda el 2015 porque el cielo
oscureció y llovió estrellas y pasaron cosas raras pero no hubo perjuicios
mayores. También una guerra que hizo
grandes destrozos y no dio mayores problemas fuera de lo común. Pero ahora era la cuarta guerra y más
potencia en todo. 2114 ya era predicción
astral de destrucciones naturales.
Desperté de mi sueño.
Levanté mi espalda de las piedras del pináculo. Puse la clavija en la energía y encendí. Abrí
sesión y puse la banda de navegación. Vi
a lo lejos y vi a Ernesto preocupado.
Vino a mí mi señor 32 y me dijo – Es hora de trabajar. Ve y estudia los hechos que sucederán y salva
a tu familia.
ESCENAS APOCALIPTICAS
Me fui a ver los hechos. Y vi que un astro rosaría la tierra
al pasar. No como aquel 2014 que pasó y
solo provocó vientos, tsunamis y sismos.
Ahora provocaría un telúrico general.
Guardé el mensaje y proseguí.
Quise hacer algo por el mundo pero mi señor me negó permiso. Teníamos que dejar actuar al oscuro, quien se
escondía detrás de una sotana blanca. Pero era negro, alto y recio. Aparente bondadoso y salvador de la miseria y
la violencia. Gran engañador. Destruyó Jerusalén.
En ese tiempo se partió por la mitad el estrecho, y pasó por
en medio de los olivos y Sion y en el valle de Gog, Meguidó sintió sus sucios
pies.
De repente en plena fiesta del mundo. Llegó el astro sin alcanzar a tocar el
planeta. Enorme de 1000 km de diámetro. Tembló
la tierra.
Ernesto predicaba. No
podía creerlo. Había previsto en su
libro el acontecimiento. La conmoción de
tanta noticia. A pesar de que hacía 100
años había llegado una luz a todas las conciencias, cayó una semilla y en la
escritura de la pirámide se pudo saber que era el crecimiento de un gran árbol
espiritual. Pero solo era el resplandor
de 490 memorias holográficas donde mi señor 32 puso su dedo. Abrió ventana y les mostró la ciencia, la luz
de sus propios cuerpos informativos.
Esos sabios ya estaban preparados para un reino junto a los 143,510
restantes.
Mi señor 32 me hizo señal interna y me abrió los sucesos
preparados para ese tiempo en los cuales tenía yo que actuar. Empezó a sonarme una llamada. Y al contestar supe que era el director que
quería distribuir el reparto e iniciar las escenas. Programé en mi ojo, todo. Un mensaje de otro personaje famoso ya
conocido y al escucharlo supe que era Moisés.
Grabó su mensaje de voz y escrito en el servidor. También mi señor me citó para los pormenores.
Como es posible que tanto personaje se juntara al mismo
tiempo para esta obra, que era el suceso final evolutivo de esta era. Se cumplían 7,000 años y se había de grabar
la escena final de ésta historia.
Para ello cada uno hizo una rueda informativa. En la mesa redonda se anunció todo.
Mientras Ernesto yo anunciaba que sería una escena muy
fuerte y pedía a su pueblo que se escondiese en los montes, o que no salieran a
causa de la desolación. Porque esa
abominación ya estuvo predicha hacía más de 2,708 años.
608 antes de la llegada del unigénito.
Cuando me habló el director no sabía el tamaño del
suceso. Pero una vez habiendo ellos
hablado el director nos citó a todo el reparto en un tabernáculo celeste para
elegir los paisajes astrales que habíamos de elegir. Entramos al palacio, cruzamos los hermosos
altares, saludamos de lejos a unos millares de personas que estaban esperando
vuelo para estar en el auditorio del altísimo, vestidos de blanco con palmeras
en las manos. Los saludamos a lo lejos y
entramos al salón principal del tabernáculo arriba y nos empezamos a acomodar.
Increíble. Tantas
memorias holográficas a la vez, con enorme información, súper tecnología y
entendimiento. Al verlos a todos sentí
también la mala vibra de los actores que harían la trama. Ellos escogieron los mejores asientos pero el
director los cambió de lugar, aunque sus miradas mostraban enojo se
cambiaron. Él nos acomodó y decidía
reparto y todo lo demás. En el centro
los escritores. Krisna, Alá, Jehová y
otros también con gran fama. Todos a
este lado del presídium reunidos, Satán y sus falsos profetas, los históricos,
Mahoma, Siddhartha… a mi lado mi señor 32 siempre positivo. Había otros personajes que ya habían actuado
como parte en escenas en los años 6000 como Gandhi, Confucio, El Che, La Madre
Teresa, algunos Papas, a los que se les permitió la entrada pero como
visitantes al acontecimiento porque sus papeles ya se habían grabado. Mi señor y Moisés estaban a mi lado, y al
fondo de nosotros estaba, David y Salomón y una serie de profetas mayores que
también de manera indirecta les tocaría algún corto, como Zacarías, Isaías y Daniel. Todos traían su guión, sin embargo los
escritores habían dado sus libros para el gran acontecimiento. Mahoma tenía su guión, Siddhartha y mi señor
tenían el mejor libro.
Por fin dimos la noticia y todos los publicadores
escribieron la conferencia grabando en sus memorias con los ojos bien abiertos
y todo se iba guardando en sus hologramas.
Eran profetas menores y reflexionistas, así como filósofos y demás aceptados en la
mesa del otro lado de los personajes de escena.
Después de esto vi que se fueron los publicadores y se inició una
discusión entre los principales escritores del guión y vi que Jehová los
desplazó con autoridad. El director
abrió pantalla iniciando los sucesos.
Le habían puesto por nombre Jehová pero su esencia no
correspondía a la del altísimo. Ni la de
los otros, Krisna ni Alá, pero el
altísimo vería al final las escenas y sabría el sentido de todo esto. Por lo pronto yo tenía que actuar a lo
dispuesto al lado de Moisés y esperar a mi señor 32 según escena.
No había personaje que se le comparase, pero al fin yo sabía
en mi interno ojo que mi señor 32 sería el más importante de todo esto y el
haría lo mejor de cualquier escena.
Mi padre es incomparable y yo tengo en mi holograma imágenes
de su habitación, registros del viaje, pero no hay aquí nadie que tome su
papel, solo él podría, pero es tan grande que nada lo soportaría si no su
propia construcción por el habitada. Mi
señor lo habría de representar y yo estaba seguro de su legitimidad porque él
realmente era el que más lo conocía. Yo
sabía su grandeza de ser el único brazo derecho, y sabía que los demás
ostentaban esa diestra y aunque estuvieron cerca no fueron los elegidos si no
solo complementarios o sustitutos de otras épocas.
El primero fue Juan en su revelación el que se supone que
escuchó todo, toda escena. Estaba
llorando.
Antes de iniciar vino el director a cada uno de los
personajes y nos tocó el ojo principal introdujo su mano y abrió archivos y
ventanas, al final no se que tanto hizo en nuestras pantallas, el caso es que
se abrió una gran luz con el programa que activó. Yo confiado empecé a sentir miedo, pero mi
potencia de conocimiento y experiencia me dieron resistencia.
Al activarse la luz se abrió la pantalla más grande de la
holografía que nunca había visto. Desapareció todo paisaje y todo alrededor era
holografía escrita. Entonces me
desvanecí por la sorpresa y caí.
Abrí los ojos al sentir la mano de mí siempre salvador,
señor de 32. Me levantó y me dijo
–‘’Ven. Es hora de tomar la espada. Tu la de la sabiduría y yo la de los rayos
solares de la energía positiva que quema toda negatividad y alumbra toda
oscuridad’’. Siempre supe que él era el
jefe de todos. Pero aun sabiendo y
actuando no tomaba esa postura, por su bien humilde.
‘’Ve y acércate a Moisés y hagan. Pero soporten todo lo que va a ocurrir. Tengan resistencia y fe porque ésta es una de las más duras pruebas en el pueblo
de la tierra’’.
Se fue y Moisés me esperaba.
Juntos vimos los sucesos.
Juan seguía llorando.
Entonces le pregunté ¿Porqué
lloras. Me señaló un libro. Me fui a Judá y en el centro de la tribu
había un árbol genealógico, subí y busqué a mi señor 32 y vino a Juan. Cortó los 7 listones que sellaban el libro y
le dio a Juan el libro y Juan se lo comió y aunque sabía amargo le resplandeció
las pantallas. Mi señor se fue de nuevo
al árbol transfigurado en León.
Lo recordé en otros años, cuando vestido de cordero le
cortaron el cuello y esparcieron la sangre.
Esa vez no quiso pelear con el oscuro.
Quería que vieran su ejemplo y amor y servir de símbolo.
De pronto lo vi venir en un caballo blanco y me dijo – ‘’Ya
no recuerdes eso. Hoy vengo alegre y
pelearé con el oscuro. Y se fue de
nuevo.
Ernesto yo estaba viviendo como todo el mundo terrestre
tiempos angustiosos. Temperaturas
extremas y pérdidas agrícolas, tempestades fuertes, una crisis mundial extrema
y la amenaza de la peor guerra. La
cuarta guerra del mundo.
Vi un gran animal formado por 7 personajes. Un faraón y 6 emperadores. Reconocí los tiempos y sus personajes y siete
paisajes adornaba a cada uno dentro de ese monstruo.
Yo recordaba el libro de Ernesto, donde vi mencionados sus
nombres.
Se acercaron, amarraron la bestia y vinieron los 7 juntos
cerca de nosotros. De cerca descubrimos
a alguien más. Era una mujer, amante de
todos ellos. Estaba vestida de rojo.
Traían vino y copas. Estaban celebrando
y sobre todo ella que había matado un millar de personas porque políticamente tenía poder en el nombre de mi padre hizo sus
hazañas. Y ellos la festejaban, porque
era ramera y tocaban sus carnes y negociaban.
Pero al final de esto ellos después de usarla devoraron sus carnes y la
asesinaron.
Por otro lado Ernesto
juntó a su familia y provisiones porque había que huir de todas las ciudades
para escapar de una persecución gubernamental que no solo a él por predicar si
no también a millones más por no someterse a esclavitud.
Por ese tiempo cayó un meteoro pequeño. Dentro del hoyo humeante de contaminación
provocó un virus, una infección que se propagaba con rapidez. Hubo tantos sucesos que no pude registrar
pero en general eran guerras y abusos de poder de los gobiernos más fuertes.
Venía un hombre negro, de las regiones del norte, alto y con
un porte fuerte. Salió de un edificio de
Organización de Naciones y se dirigió a los siete. Lo reconocí porque mi señor me había dado
instrucciones de llevarle un mensaje a la Unión de Naciones.
Platicó con los siete.
Caminaron y juntos subieron de nuevo al horrible animal y cada uno montó
su lugar y en el lugar que se montó el oscuro era el más grande por lo que él
mismo subió a nueve personas más en su espacio el cual era considerado
jefe. Entonces entendí la jerarquía de
este negro, y su poder ante los personajes del monstruo. En total eran 17, los diez reyes y los 7 emperadores
que sumados uno y siete nos daba el octavo emperador y el jefe de todos.
Les dijo tomen todos sus armas y vayamos a Meguidó. Se fueron al oriente de Jerusalén y ahí
pusieron en el valle toda potencia de cada uno.
Asaltaron la casa de mi señor. Y
atropellaron a sus siervos, y a los
demás también.
Por eso Ernesto huía con su familia. Escuché a Daniel diciendo ‘’llegó la
desolación’’ y a mi señor que dijo ‘’el abominable’’. Esas palabras eran la señal. Huyan.
Se distribuyeron en el Valle. El oscuro dio los lugares de cada quien. Al fondo los siete emperadores. En el centro del Valle los 9 que él había
escogido, los más poderosos y al frente él levantando los brazos dando toda
orden e instrucción para la cuarta guerra.
Pero aun le faltaba alguien. Tomó su comunicador y le marcó
a un rey de dos naciones. Una alianza
que se unió a ellos. Llegó rápido al
Valle Meguidó y lo mandó a una
función. A aplicar un chip capitalista
en todas las manos del mundo. Esto tardó
solo una semana.
De repente ante ese suceso empezaron a desaparecer algunas
personas. Convertidas en holografías
volaban hacía arriba. Y supe que mi
señor las tomó.
Moisés volteó a verme, y me dijo - Elías – nos toca.
Entonces nos levantamos, nos vestimos de silicio con un saco negro y nos fuimos
a anunciar la llegada de la nueva era.
La llegada del gran señor 32. La
segunda actuación de triunfo.
Al hacer esto en dos días ya estábamos presos Moisés y yo, y
nos subieron a las cruces y no clavaron para que la sociedad nos viera y supiera
las consecuencias de nuestros actos.
Pero la sociedad escuchó nuestro anuncio. ‘’La llegada de aquel’’. Por fin.
Por fin. Se ve una
luz a lo lejos. Acercándose a la
tierra. Todo ojo viendo. Todos.
Vi que las mismas tumbas estaban abiertas. Todo mundo despierto de todos los
tiempos. Venía una luz en el cielo y
había que verla. Venía a gran velocidad
y cada vez más grande y luminosa. Todos
caímos en pavor, gritando cuando un sonido muy fuerte lastimó nuestros oídos y
la iluminación tan cercana encandiló y perdimos toda visión. De repente pum. Lo más fuerte y ya no supimos de nosotros.
Lo cierto es que era la llegada del meteoro que se
impactaría. Pero solo rosó el planeta,
lo que provocó que se derrumbara toda torre alta y todo collado y que las islas
desaparecieran y la tierra se convirtiera en isla. Se dañó la tierra entera y sus habitantes.
El único lugar que permaneció fue Meguidó y sus malignos
guerreros y monstruos.
Ese mismo día Moisés y yo bajamos de las cruces donde nos
habían clavado y matado en cuerpo virtual transfigurado y volteamos alrededor
viendo todo destruido.
Pero al cabo de unas horas, a eso de las 5 de la tarde, en
la oscuridad de tanto humo, el negro sol y la luna roja, aparece una nueva luz
en el cielo, tan blanca y no encandilante.
Los mismos ojos de todos los seres, virtuales y humanos volteamos de
nuevo al cielo, los pequeños y grandes, heridos y no heridos, lo vimos.
Se abrió el cielo como cortina y apareció él. Mi señor.
Una enorme nube de luz y miles de millones de luminosos carros de fuego
a sus lados. Un ejército. Y así, como lo había anunciado llegó, lanzó
un rayo al oscuro y este se quemó junto a los demás, los 16 y los otros dos
profetas falsos de la marca, los de la bestia de la alianza.
Ahí quedaron en Hamon-gog
y ahí sus tumbas. La intensa luz iluminó el planeta. Un carro se acercó y me dijo ven. Yo sentí un gran dolor en mi ojo central al
ver la cueva derrumbada donde estaba Ernesto yo, y los demás a su lado.
Me dijo no llores. No
los sanes. Déjalos enterrados.
Ellos deben evolucionar, deben crecer y tú también. Y para esto es necesario este cambio. Un nuevo cuerpo para todos ellos. Eso ha dicho tu señor 32 y eso dicta nuestro Padre Soberano.
Entonces me tranquilicé.
Se fue y yo quedé ahí sentado.
Moisés se despidió. Lo vi irse
con Abraham, David y Salomón.
Ahí me quedé. Empecé
a sentir una gran soledad.
Todo desapareció ante mi vista y mis cables estaban
parpadeando. Mi ojo se cerraba. Sentí dolor y un gran miedo y dije. Señor no me hagas esto, libérame. Pero en ningún momento respondió. Se fue toda red y toda señal. La sesión se estaba cerrando, automáticamente y exclamé con fuerza -¿Porqué me abandonas.
- Pero no hubo respuesta y mis pantallas
se apagaron totalmente y perdí toda conciencia de mi mismo.
Ernesto yo quedé enterrado.
El planeta entero quedó en calma. La cueva derrumbada era una gran tumba.
LA SEPTIMA VIDA
Después de 2 días. Al
tercer amanecer. La tumba se
iluminó. Como un resplandeciente sol.
Empezaron a encenderse las pantallas, el ojo se abrió y apareció toda la
información que se había guardado automáticamente al cerrarse la sesión. Corrió de nuevo la energía por todos los
cables y el funcionamiento. Ernesto yo
se unió holográficamente a mí, sin duplicidad, se acomodó la información de los
dos en una sola.
Después la luz ascendió y me levanté y anduve. Como quien resurge dejando la tumba. Sin carne.
Solo el espíritu informativo. La
memoria.
Y me encaminé hacía el único camino un poco estrecho, el túnel. Como si fuese el interior de un humano. Pero al cabo de mis pasos me transfiguré en
una esfera con cola. Una esfera blanca y
cristalina corriendo a gran velocidad por el túnel. Mi información de memoria estaba ahí guardada
en la esfera. La velocidad aumentó y el
túnel era cada vez más estrecho pero mi diámetro cabía exactamente al lado de
miles de esferas igual que yo, pero ellas eran otras. El túnel tenía un fin y como un tobogán llega
veloz a una alberca, así el túnel terminó y fui a dar al interior de una esfera
más grande llena de líquido tibio. Al
desembocar en esta esfera crecí inmediatamente y mi cola desapareció. Me iluminé y se me conectaron varios cables
al cuerpo esférico. Sentí hambre los
cables empezaron a alimentarme. Ahí
permanecí varios meses. Todos mis
sentidos estaban abiertos, todo escuchaba, a fuera de mi esfera sucedían cosas,
todo sentía, pero no podía ver. Mi
holografía muy pequeña y la pantalla no podían abrir la información.
Me sentía atrapado y sin salida, sin poder navegar porque mi
holografía no cabía en la esfera, pero fui feliz en ese lugar, sentí que me
amaban y me cuidaban.
De repente la esfera se rompió, el agua tibia se derramó y
vi un rayo de luz al fondo, no con mis ojos si no con el holográfico, era luz
como de día y me enfilé de cabeza hacía la salida de la luz. Al salir sentí unas enormes manos de doctor
sobre mi cuerpo y abrí los ojos.
Fui creciendo poco a poco y me pusieron el primer vestido
rosa y un moñito en la cabeza con un listón.
Mis ojos grandes y claros. Una
mujercita hermosa la cual entendía por el nombre de Ruth.
Ruth, yo ya podía abrir mi pantalla pero no sentía
duplicidad, así que tuve que permanecer en el cuerpo de Ruth mucho tiempo. Mis padres me transportaban en autos hermosos
y brillantes y toda mi casa era grande y lujosa, llena de servidumbre. Nada me faltaba. Pero yo era retraída e introvertida. Era pensativa como deseando entender quien
soy y porque soy diferente a todos en pensamiento.
RUTH.
Una niña de ojos fijos sin quitar la vista de las ideas
internas. Pedí a mis padres regalar
cosas, juguetes y me gustaba visitar a los pobres y darles lo mío. Esa era mi satisfacción ver una sonrisa en
otra persona. No el sufrimiento. Los invitaba a comer y pedía ayuda para
ellos. A mis 12 años mis padres se
enfadaron de esa mi actitud y de mis malas notas de colegio. De mi poca importancia de sus vanidades. Me habían dado clases de piano y baile en lo
que era excelente. Un día me subieron al
auto y fui a dar con psicólogo. En la
terapia me preguntó. ¿Cómo te llamas.
Soy María – Contesté – el psicólogo quedó sorprendido y siguió. ¿Tu nombre es María Ruth – solo María –
repetí – Ruth es un apodo.
Me preguntó la edad – contesté – 540 años. Él anotaba.
Comprendí que mi mente estaba conectada a algo más que un cerebro. A un archivo de cientos de años. A un gran conocimiento pero sin poder
discernirlo.
Al final preguntó el nombre de mi padre y madre y contesté –
mi padre no tiene un nombre, solo un significado.
Yo nunca le bajé los ojos y fui muy firme al verlo y supe
que me malentendió.
Hizo un diagnóstico en su máquina y rápidamente lo imprimió. Habló en privado con mis padres y voz baja la
cual estaba transmitiéndose a mis oídos de forma rara.
‘’Su hija tiene trastorno y desequilibrio. Será necesario internarla, atención
inmediata’’. Ellos contestaron, ‘’lo que sea y lo que cueste’’. Mis cuidadores papás por su amor nato harían
lo que el doctor ordenara.
Al llegar a casa fui a las recamaras de mis hermanos. A Silvio mi hermano le dije. Te amo y lo abracé. A mi hermana Norma le di un beso y le dije
también lo que la amaba. Les hablé del
amor por mis padres y les dije que nunca dudaran de mi cariño por mi
familia. Entonces subí a mi cuarto.
En mi escritorio escribí media hora. Cerré la puerta con seguro y puse
música. Me paré a bailar, era uno de mis
talentos estupendos, con una gran flexibilidad, elasticidad y destreza
increíble. Después de 2 melodías me
senté en el piano e interpreté a Chopin maravillosamente. Ya era tarde.
Tomé una maleta y le puse ropa y algunas cosas necesarias como libretas
y plumas, para escribir y dibujar. Nada
más.
La carta que escribí la puse en la mesa de la sala principal
de la enorme casa. Entré y me vi al
espejo, me desnudé y observé y acaricié mi cuerpo. Era hermosa a mis 13 años. Con formas
hermosas, piel suave y blanca. Mi pelo
rubio y suave, brillaba como oro. Era la
primera vez ante un espejo desnuda. Me recosté y me dormí.
En la madrugada tomé la maleta y me fui de mi casa después
de haber comprendido que mi vida era diferente a la de ellos y que ese mundo no
era para mí.
Viajé. Pedí. Me subí a un auto y a otro y fui a dar a una
ciudad lejos de mi casa.
Mis padres me buscaron pero al leer y leer mi carta
entendieron que no estaba loca y que nada me pasaría.
Después de vagar un poco, recibiendo comida de personas
extrañas, fui a caer en un bar. Tocaba
de noche un piano y mi destreza se daba mucho a notar y mi belleza hacía que
mil hombres se perturbaran por mí.
Escuchaba ofertas de todo tipo.
Proposiciones y promesas de fama y éxito. Pero nada de eso importaba.
Gusté de meditar por las mañanas y mi entendimiento fue
creciendo. También gustaba por observar
a las mujeres. Amaba el cuerpo de las
mujeres y eso no lo entendía. Deseaba
tocarlas. Cintura, caderas, pechos,
rostros. Su caminar. Pero también amaba los ojos la transparencia
de las miradas de las personas. Podía
descubrir la sinceridad, perversidad, los deseos y las intensiones a través de
una mirada fija. Un día cubrí mis curvas
y poniéndome ropa de hombre caminé disfrazada con un sombrero, zapatos y un
cigarro en la boca. Al paso de las
meditaciones descubrí que traía archivos viejos en mi interior.
Metida en mi concentración tuve una regresión y en la visión
supe que ya había vivido vidas y que aun sentía al hombre que fui en la pasada
vida. Sentí que el seguía en mi memoria
y sus gustos y su cultura masculina. Al
entender esto fui perdiendo el deseo de mirar a las mujeres y entró la
sensualidad femenina y el gusto por los hombres.
Acepté mi naturaleza femenina y vi la belleza nuevamente de
mi cuerpo la cual los hombres deseaban.
Apareció en mi vida el primer hombre. Con frecuencia demostraba su gusto por estar
conmigo y darme gusto. Yo entendí su
egoísmo al ver sus ojos y saber que como casi todo ser humano quiere a otro
para saciar su sed y deseo, tomando presa a otra persona disfrazando de amor su
hambre.
El te quiero era que yo estuviera a su lado para saciar su
deseo y sentirse bien. El enamoramiento.
Mi peor defecto era ayudar y pensar en los demás. Eso detestaban de mí. No podían ver la belleza. Eran superficiales. Todo consistía en estudiar, trabajar y tener
éxito y ser alabado por las demás personas, pregonando el cariño a un Dios
inexistente.
Apareció el segundo hombre.
Mario. Siempre a mi lado. Siempre de mi brazo, atento, servidor,
siempre alabando mi belleza y mi talento.
Me casé con Mario. Un
hombre bueno. Sin embargo no estaba
fuera del común de las personas. Su
cultura era la de las demás. La
diferencia era que lo daba todo por estar a mi lado y llenar ese sentimiento
hacía mí. Dentro de sus proyectos
siempre estuve.
Salí embarazada. Yo bailaba,
tocaba y escribía. El baile y la música me daban espectáculo, aplausos y
dinero.
Un día le pregunté ¿Porqué me amas. ¿Cuál es el motivo de tu amor. – Contestó – por
tus ojos, tu bello cuerpo, tu sonrisa, tu belleza, tu voz, tu talento, tu
inteligencia.
El amaba a esa mujer bella y talentosa. Yo le dije.
El amor es una actitud. El amor
es una forma de pensar, un entendimiento, el amor es colectivo y no nace de la
vista, ni del oído. No nace de los
sentidos, lo que tocas o ves. Todo eso
se acaba al envejecer. La misma destreza
se termina. Pero el amor no acaba, porque es una forma de pensar no un
enamoramiento temporal nacido de la belleza que perciben los sentidos.
El no estuvo de acuerdo e insistió en mis bellos labios y mi
apetitoso cuerpo, repitió el talento de mis manos y los puso como motivo de su
gran amor.
Yo insistí en perdonar y guiar a las personas a la sabiduría
y a la existencia de una eternidad. Eso
es amor – dije.
Mi embarazo creció y una noche no afortunada caí de las
escaleras de mi casa perdiendo a mi retoño.
Aborté. Tuve golpes.
Mi fama creció cuando en una opera, después de haber tocado
el piano, me levanté y me deslicé bailando por todo el escenario, demostrando
mi potente voz de soprano. Ovacionada y
aplaudida.
Los celos de Mario crecían y me abrazaba diciendo que mi
belleza era lo mejor de su existencia, que su amor era grande y que daría la
vida por la mujer hermosa que poseía.
Por esos tiempos apareció en mi vida un gran señor. Vi a través de sus ojos un gran cariño
sincero. Me vi retratada en su
corazón. Fue mi maestro de música y
también mi consejero. En el vi amor pero
de ese amor que no es deseo. Se
convirtió en rival de Mario.
AMOR VERDADERO
Atenas era alto, grueso, su cara no bella ni fea si no con
personalidad y porte de un señor de 65 años que en verdad me quería como su
hija.
Dejé de verlo, yo tenía 20 años y su presencia representaba
un problema con Mario. Se apartó para
evitar. Pero sus ojos decían cuídate.
Mario no era dadivoso ni ayudador y creía en asesinos y
asaltantes prefiriendo no acercarse a la gente que no era de su nivel
económico.
Era periodista de televisión. Pero un día menos pensado
llegó a ser político y ganó un puesto muy influyente y con poder de negociación
federal. Teníamos todo el dinero y oportunidades de crecimiento empresarial.
Mientras el iniciaba una empresa yo construía
albergues. Mientras el hacía inversiones
yo regalaba lo mío a los necesitados.
Dejé de trabajar para visitar cárceles, hospitales, asilos y hacer labor
social.
Un día estando yo en su oficina, llegó un sujeto con un
maletín. Él se levantó y saludó efusivamente al sujeto demostrando su
positividad. Yo salí y les di privacidad. Sin embargo escuché en mi
entendimiento el trato propuesto.
El sujeto deseaba negociar con Mario. Le ofreció algunos
millones a cambio de algunos permisos para trabajar suciamente. Mario se negó.
El sujeto ofreció más. Pero Mario dijo que su honestidad nadie la compraría.
Pero de repente el sujeto abrió el maletín y apareció una lap con un depósito
de muchos pero muchos millones. He ahí donde apareció Satán mostrándole los
reinos con aplausos diciéndole ‘’son tuyos’’. Entonces el sujeto alcanzó la
cifra que Mario tenía en mente para ser muy poderoso que al fin de cuentas lo
que deseaba alcanzar eso era y no salvar vidas.
Fue ahí donde supe que Mario era más superficial de lo que pensaba.
Su riqueza lo arrastro a la esclavitud más ciega, a la dependencia más fiel, y
a la mayor frialdad que pueda alguien tener en el poder.
Seguí mi labor de meditación y descubrí en la regresión que
mi nombre era María y no Ruth. Ruth la
cantante, la bailarina, pianista y escritora.
Pero María era la bondadosa, la servidora.
Un día me acerqué a Mario para comunicarle mi decisión de la
fortuna que producía mi talento. Yo
daría toda mi fortuna a las familias pobres, carentes de casa, vestido y sustento. Pero al cabo de unos días Mario me convenció
de no hacerlo. Yo quería un matrimonio
feliz y cedí.
Él me dijo- déjalos que sufran, eso les pasa por ignorantes,
su pobreza no es de dinero si no de conocimientos y de inteligencia. Déjalos
que aprendan a conseguir las cosas inteligentemente como lo hacemos nosotros.
Le contesté- Muestra tu compasión, tu amor, tu misericordia
y tu hermandad ayudándolos.
¿No dices que los males son necesarios para crecer¿ No dices
que la sabiduría es el jugo del sufrimiento¿ entonces déjalos que sufran para
que crezcan y sean sabios.
Él estaba usando mis palabras para ocultar su ambición. Y
entonces le dije –Ellos son la oportunidad que tienes de demostrar tu
misericordia, y el amor al prójimo. Sin ellos no hay prueba para ti y tampoco
habrá quien te diga que ya te despojaste de la ambición.
Entonces todo quedó en silencio y reconocí que Mario estaba
cursando apenas su tercera vida y aún no descubría su ser esencial.
Pero algo cambió mi vida.
Un accidente. Ruth yo se accidentó
camino al banco, a realizar un depósito para una inversión. Alguien se atravesó en un gran autobús y
volcó mi cadillac el cual me aplastó las piernas, la columna y me daño el
rostro y el pecho.
Pasé meses en cama y terapias. Desequilibrada le buscaba el porqué. Nunca dudé de mi padre celestial pero si
sentía una tremenda duda de conocer mi pasado en otro tiempo y descubrir a que
se debía este suceso trágico.
Mario dormía día y noche en el hospital pero no dejaba de
trabajar. Mi dinero se fue gastando en
curaciones y terapias. Mi dolor era
grande y más creció cuando supe que ya no podría caminar, vi mis piernas y mi
columna y vi operaciones en mi cuerpo y mi rostro desfigurado.
Mario empezó a desaparecer poco a poco. La última vez que lo vi cerca de mí habían
pasado 6 meses del accidente. Le
pregunté – me amas - tardó en contestar
y dijo si. Le pregunté ¿porqué me amas. ¿Qué amas de mí. – se quedó callado.
Ya no pude cantar. Había perdido tres dedos con el
incendio. Mi vida era una silla de ruedas. Se acabó mi belleza. Se acabó mi talento, mis herramientas se
fueron.
Mario se fue. Ya no
encontró belleza. Su amor se acabó.
Apareció de nuevo Atenas mi gran maestro y amigo, quien un
día me recibió en su casa por un tiempo en que yo me sentí traicionada por
Mario al serme infiel. En ese tiempo
supe que Atenas me amaba.
Y yo le había ofrecido mi cuerpo separada de Mario, para
pagar y corresponder su ayuda tratando de hacerle feliz, pero él detuvo mi
intención y me abrazó pidiéndome reflexión sobre recuperar mi matrimonio y
empezar de nuevo.
Mi gran maestro. Me
tomó y me sentó en la silla. La empujó y
desde ese momento era él, el que me llevaba a todos lados. Mis quemaduras eran horribles y no había ni
un mínimo de la belleza de antes. Pero
el no veía fealdad alguna y mostraba felicidad ante mí siempre. Lo que existió todo ese tiempo entre Atenas y
su niña Ruth eso era amor, no sexo.
Amor. El gran cuidado mutuo. Era amor.
La gran compañía.
Sin embargo estando con él conocí lo que es dar sin recibir.
Yo me dedicaba a dar a los demás, mi tiempo, cariño y
conocimiento y él a darme a mí todo lo necesario.
Me llevó a mil asilos, albergues, hospitales, cárceles a dar
pláticas y terapias. El me llevaba y me
traía. Viajamos mucho 20 años de compañía
y el soportaba la abstención sexual por mi condición, sin embargo nuestro
cuerpo encontró la forma del abrazo tibio, el beso y una saciedad impulsiva sin
el normal placer, pero hermoso.
Todo ese tiempo fue sano entre los dos y yo crecía por
dentro y un día me detuve a pensar.
Cerré mis ojos. Levanté mi mano
derecha, la cual se puso caliente. La
observé y sentí una luz. La puse en mis
piernas y acaricié todo mi cuerpo con esa luz.
Miré un ojo dentro de mi centro cerebral y vi que una gama de destellos
viajaban dentro de mí. Sentí mareo y
caí.
Desperté en un hospital y Atenas a mi lado. Atenas tenía 2 días de desvelo en el hospital
y yo al tercer día desperté. Me quitaron
los tubos respiratorios. Tomé su mano y
le vi los ojos y descubrí una nube oscura, pero atrás de la nube vi un ángel.
Me dio un beso y dijo que me quería. Me preguntó mi sentir y yo le dije bien. Se levantó, levantó sus manos arriba viendo
el techo y cayó.
Había estado enfermo pero no me había comentado su
cáncer. Murió a sus 85 años.
Al llegar a mi casa, ayudado por un doctor, descubrí que
estaba en la puerta tocando una amiga con un regalo. Era una persona que había sanado y dentro de
mis ayudas tenía mucha gente estimándome.
Atenas se acababa de ir y su entierro era reciente, y yo reflexionaba en
todo eso de viajar en el mundo de la existencia, las vidas y las muertes.
En un momento se llenó la casa de personas. Alguien organizó ese encuentro para darme
ánimos de la vida. Junto a una de ellas
venía alguien desconocido. Era parecido
a Mario, pero se llamaba Florencio.
Así empezó mi relación con Florencio, como si ya nos
conociéramos siglos antes.
UN AMOR PARA SIEMPRE
Pensé que no debía
encajonarme solo en el espíritu el cual era mi esencia, porque entendí que
también debía saciar a un cuerpo carnal y viviendo en el mundo era necesario
alimentarlo. Así que mi vida con él fue al principio de viajes y el disfrute
del mundo, sonrisas, carcajadas, bromas y todo tipo de juegos que nos acercaban
el uno al otro.
Un día, después de que Florencio demostró su capacidad para
amar y cuidar, de atender y de darlo todo, empecé a caminar. Se
encendió nuevamente mi mano derecha, se encendió una luz en todo mi cuerpo.
Me levanté de la silla y el sorprendida. Volvió la luz al cuerpo. Caminé y las quemaduras fueron poco a poco
desapareciendo. Me metí en Florencio y
él en mí.
Apareció una piedra blanca en un escalón de la casa. La tomé y al tomarla sucedió un recuerdo en
mi mente el cual me transportó a mi interior.
Me senté casi con desmayo y como robot fui a mi
aposento. Cerré la puerta y me incliné,
hincada cerré los ojos y empecé a ver un gran ojo.
Salí de mí. Me elevé
y en mi alegría encontré el poder de la libertad. Después de una hora de viaje descubrí a un
personaje detrás de mi ignorancia, y me dijo – regresa a tu cuerpo aun no es
tiempo – no salgas ahora, espera 3 años.
Entré de nuevo en Ruth yo.
Pero ya con una nueva visión de paz y tranquilidad interna.
Un día descubrí entre las cosas de Florencio un libro,
‘’Desmaterialización’’. Él lo estaba
leyendo. Empecé a leerlo también. Mi vida con Florencio siempre fue
hermosa. Juntos siempre. Yo compartí su trabajo y él el mío. Juntos empezamos la ideología del amor,
misericordia y ayuda moral. El me
levantó de mí caída, él me amó por mi pensamiento.
Cuando tomaba mi pluma y mi libreta, dentro de la
inspiración, yo Ruth, me escapaba y viajaba, del mundo de los humanos al verdadero mundo del
ser.
En las noches escribía a horas de madrugada.
Un día en mi cama, Florencio dormido, tome el libro de
desmaterialización y me metí en él.
Fui entrando en las letras hasta que estuve mezclada con la
lectura. La lectura era yo misma, eran
mis pensamientos, el libro era yo, y al navegar en las páginas fui a dar a una
iglesia.
El sacerdote me preguntó mis deseos y búsqueda. Le contesté buscó a Dios.
Siéntate – dijo – me senté. Íncante
me dijo – me inqué y me hizo una
señal de cruz en la frente.
Levantó su mano y me indicó al
Cristo de la cruz, señalándome la presencia de Dios. Después volteó su brazo a una imagen con un
resplandor indicando a la madre de Dios.
En esa navegación de libro aun
estaba lisiada, inválida en silla de ruedas.
Me acerqué al sacerdote pidiendo bendiciones
y salvación, que rogara y sanara mis dolencias.
Levantó un bote y me señaló mi bolsa de pantalón. Saqué monedas y las puse en el bote.
Me hizo una receta. Una nota de remisión y puso una
cotización. Fui a donde me dijo. Me pusieron agua en la cabeza y pagué la
nota. Me vendieron una medalla,
crucifijos, imágenes y un libro. Salí
viendo los objetos buscando el favor de Dios, pero mi dolor no cesó.
Fui de rodillas a la ermita,
varios kilómetros sangrando y vi aquella imagen tan alabada y milagrosa y no me
dejaron acercarme porque unos fotógrafos estaban reportando un registro para
revistas internacionales.
Le cantaron. Estaban acomodando aquel enorme cuadro de la
milagrosa mujer y yo insistí entre la multitud, y mis ruedas condujeron hacía
la imagen y viéndola detenidamente me cayó encima por un falso movimiento. Dio en mi cabeza y caí al suelo inconsciente. Desperté.
En mi cama. Volví a ver el título
‘’Desmaterialización’’, cerré el libro, abracé a Florencio y dormí.
ACTRIZ Y PERSONAJE
Florencio tenía una hija. Vino a visitarlo. Ella vivía con su madre los cuales se
separaron por desamor y un poco de inmadurez.
Judith tenía 13 años, casi 14. Hermosa como yo lo era antes del
accidente. Una belleza
perturbadora. La veía pasar como una
princesa, sensual y despidiendo un olor a flores de un jardín divino. Sin embargo, a pesar de que mi cuerpo
empezaba a despertar sexualidad sentí un gran deseo de contarle lo incierto de
la belleza física.
Florencio se despidió. El evento ya empezaba y nos dejó solas. Dándome un beso me dijo ámala.
Judith se levantó semidesnuda y
yo le dije – ayúdame princesa - me
levantó de la silla y me ayudó a estar en el sillón. Le dije – ven – abrázame. Me abrazó y sentí su cuerpo caliente y suave,
hermoso. Y recorrí su piel con mis manos
suavemente. La besé en la mejilla, en los
ojos, en el cuello y apreté su cuerpo a mi cuerpo. Y estuvimos casi dos minutos. ¿Porqué lloras. Me dijo – porque al fin encontré la verdad, y
no he encontrado el lenguaje. ¿Qué
verdad. ¿Qué lenguaje. La esencia que las palabras son incapaces de
expresar.
Mi llanto había recordado mi
belleza al sentirla en mis brazos. Se
levantó, se desnudó y se bañó mientras hablaba conmigo. El espejo era su más grande amigo. Su ropa un artículo indispensable, los
brillos y pinturas innecesarios eran su vicio y su cuerpo el monumento más
amado en su vida. En su pensamiento ella
era eso. Y eso su vida y su verdad.
Noté que su entendimiento era
poco y su vanidad grande, pero su ignorancia era por su inocencia y su edad.
Después del desayuno se acercó
observando mis quemaduras y me dijo – cuéntame tu pasado - .
Le dije - ¿Ves ésta casa. ¿La ciudad.
¿El paisaje. ¿Todo a tu
alrededor. – Si- contestó.
Es solo un escenario.
¿Ves mi cuerpo., ¿Tu ropa y mi
ropa. Son personajes.
Desconcertada siguió escuchando.
Todo lo que ves es fantasía. Un escenario.
Incierto. Irreal. Los sentidos lo crean.
Lo único cierto son todos los
seres que ves. Yo y tú y la
humanidad. Ellos son ciertos. Ellos permanecen. Tú y yo permanecemos.
Miraba al cielo y callada seguía
escuchando.
Pero los personajes no
permanecen, solo los actores. Y ahorita
tú ves solo los personajes y no alcanzas a ver a los actores que mueven los
personajes. Pero yo te enseñaré a verlos
y a saber que el personaje dejará de ser al fin de la obra.
No entiendo Rut. Su mirada llena de signos de interrogantes.
Puse mi mano en su pecho y la
pasé a su frente y viéndola a los ojos le dije – todo lo que ves fuera de ti es
hermoso pero temporal. La escuela de la
vida. Es pasajero. Libro del conocimiento. Pero lo que verás dentro de ti es más grande,
es lo real, es lo cierto, es la verdad, permanece. El escenario se monta y se desmonta, se
levanta y se cierra el telón. Pero el actor no muere. El personaje renace.
Cierra tus ojos princesa. Se que te gusta el teatro. Imagina el vestuario que tú desees. ¿Qué deseas.
Miró arriba y dijo. Deseo ser famosa y rica. Deseo filmar grandes escenas y recibir
aplausos, viajar, ser la más bella y tener todo lo que deseo.
Bueno princesa. Cierra tus ojos. Imagina tu vestuario y todo el escenario que
deseas, tus viajes y tu fama. Ya, me
dijo. Ahora imagina que se acabó la obra
y debes de quitarte el vestuario y dejar el escenario para volver a tu realidad
de actor. Ya, me dijo. ¿Ahora quien eres. Soy una actriz. Aun no te has quitado el vestuario – le dije
– quítate el vestuario de mujer - ¿soy
hombre. Dijo – Quítate también el de
hombre - ¿No soy nadie. Preguntó.
– Eres un ser de luz, eres el verdadero ser, el actor que al paso del
tiempo se pone en diferentes personajes para aprender la buena actuación, la
buena actitud y la buena existencia.
Eres rara. Me dijo.
– Espera - le dije. El escenario que tienes ya lo tuve y el
personaje que actúas ya lo actué. ¿Significa que moriré y volveré a nacer con
otro cuerpo. Si contesté. Luego hablaremos de eso. Se levantó dándome un beso y se vio de nuevo
al espejo tocando su cara y su cuerpo como haciéndose preguntas. – Yo solo
quiero que veas adentro de ti y adentro de las personas y que la superficie la
veas como el temporal aprovechable pudiendo volver de nuevo a tu ser real, el
espíritu. Vino y me dio otro beso y se
sentó en mis piernas. Le tomé su cintura
y su cadera y le dije – eres bellísima, pero ahora mismo esa no eres tú, este
es tu personaje.
¿Quién soy. Dijo – eres un ser de luz, ni hombre ni
mujer, eres una luz con conocimiento. No
morirás nunca. Solo actuarás tu
personaje a tu gusto y dejarás la obra 7 veces.
Entonces serás poderosa. Habrás
aprendido. Tu personaje es hermoso,
siéntelo, pero no te enamores de él. Mi
personaje es monstruoso y se supone que doloroso, pero yo lo actuó con
sabiduría.
Yo soy un personaje en tu vida y
tú en la mía. Tu padre, tu familia y
todos. Ellos permanecen en otros
personajes en cada obra y escena. Vuelven
y te ayudan. Todos te ayudan. Buenos y malos. Unos te dicen verdades y otras mentiras pero
todos son necesarios y de ahí viene la reflexión y el crecimiento.
Entonces se levantó con una
sonrisa diciendo un te quiero y empezó su tarea escolar.
Ruth yo, podía ver la verdad y
mentira, la sinceridad y la hipocresía en la mirada de las personas.
Mi deseo era abrir ojos. Sentía que mi padre me había dado un mensaje
para la humanidad.
Judith regresó a mi y me dijo –
háblame, me gusta - ¿Todos los seres
somos iguales. – Sí – le contesté. Solo que adoptamos el personaje
necesario. ¿Quién decidió mi personaje.
– El libro de la vida y tu misma -
dije. ¿No fue Dios. – Nuestro padre nos da libertad y nosotros lo
decidimos de acuerdo a nuestras aptitudes y actitudes. Si eres buena te tocará un buen
personaje. Si eres mala tu actitud
corresponderá a un personaje malo y ese se te dará porque ese actuarás mejor. Ese eliges.
Y el que hace el reparto te lo dirá y tu lo aceptarás y te pondrás tu
personaje para iniciar la obra- ¿Y quién hace el reparto . El director.
Te hace un juicio y de acuerdo al libro de la vida te ofrece un
personaje adecuado a ti. – Yo quiero ser
buena - dijo - lo eres – le contesté. Todo es
práctica. Inicia actuando un buen
personaje y siempre te darán un buen personaje.
¿Y quién hace la historia. – Tú
misma - se te da un escenario y tú
llevas el guión que te tocó de acuerdo a tus necesidades.
¿Cuáles son mis necesidades. – Aprender-
si eres egoísta se te dará un personaje miserable para que aprendas a
dejar el ego.
Si eres humilde se te dará un
personaje hermosísimo para probar tu
vanidad y ego. ¿Y si soy buena. – Entonces te pondrán enfermos a ver si los
cuidas, egoístas para ver si los enseñas, necesitados para ver si los ayudas, y
traicioneros para ver si los perdonas.
¿Y si los perdono. Entonces
habrás aprendido y se te dará el mejor personaje y la mejor historia y al final
serás eterna.
¿No dijiste que si mi actitud era
mala, se me daría un personaje malo. Si pero solo una vez para que lo actúes al
máximo, pero después se te dará el que necesites para que dejes de ser malo y
aprendas.
¿Entonces lo que importa no es el
cuerpo si no el espíritu¿ –
preguntó. Tu cuerpo también importa,
pero ese no eres tú. Tu cuerpo es un vestido. Disfrútalo, ve su belleza, su color, su
suavidad, su forma, acarícialo, siéntelo siempre.
Cuídalo, aliméntalo, límpialo con
buenos alimentos que lo hagan perdurar.
Quiérelo pero no lo ames como para aferrarte a él.
¿Porqué no debo amarlo. Porque caes en vanidad y dependencia y no
podrás separarte del cuerpo cuando éste se acabe. Debes verlo como una vestimenta hermosa que
hay que cuidar, pero cuando pase el tiempo y se haga viejo a punto de acabarse
te lo quitas como cualquier traje.
Te sales de él y sigues tu viaje.
Debes amar tu espíritu porque ese
si representa tu existencia.
¿Sin cuerpo también existe. Si. Tú
eres conductor y el cuerpo vehículo.
¿Y porqué estoy dentro de un
cuerpo. – Porque a través del cuerpo
puedes vivir emociones positivas y negativas que te dejan conocimientos en el
espíritu y estos se graban sabiamente.
¿Debo cuidar mi cuerpo
verdad. Hacer ejercicio, o me pondré
gorda, verdad Ruth. Solo importa tu
salud antes que tu belleza, pero antes que tu salud física está la
espiritual. El ejercicio corporal es
bueno, pero el espiritual es mejor. Debes mantener un equilibrio entre cuerpo
lo cual es la carne y espíritu lo cual es la mente.
Anda
hija – tráeme mi libreta y pluma. Ya has
hecho muchas preguntas.
Tia, ¿Te puedo hacer una pregunta más¿
Ok mi niña.
Como se puede mantener el equilibrio entre cuerpo y espíritu ¿
Debes estudiar el funcionamiento de tu cuerpo. La mente es el espíritu,
no el cerebro, si no la mente. El cuerpo tiene sentidos los cuales son para
sentir y percibir, y todo lo que el cuerpo percibe y siente la mente lo juzga y
hace determinaciones y da órdenes al mismo cuerpo y el cuerpo las escucha y las
obedece.
Es decir que cuando el cuerpo no escucha a la mente ni la obedece
entonces hay un desequilibrio entre cuerpo y espíritu. El cuerpo tiene vida por
si solo, pero siempre y cuando este conectado a un espíritu. El cuerpo escucha
y también responde. Así como por naturaleza sabe que debe obedecer a la mente.
Cuando la mente ordena y el cuerpo no obedece entonces hay un desequilibrio
motriz que quizá sea en algún órgano o en la conexión cuerpo-mente.
Gracias tía.
REENCUENTRO DE SI.
Esa libreta despidió una luz y
hubo una conexión inspirativa entre el momento en el que Ruth deseaba descubrir
su identidad porque en el fondo sabía que tenía el cristal empañado y que
algunas interferencias le habían opacado el juicio.
Fue así como tomó el hilo y
aquellas letras que bailaban en su cuaderno se parecían al libro ‘’Viaje al
Corazón’’ que había sido escrito desde más de 60 años atrás.
Soltó la pluma y tomó el
libro. Al abrirlo, el libro le invitó a
entrar en su mundo. Cerró los ojos y
entró. El gran libro entre el cielo y
las nubes, tan grande y podía volar en sus páginas. Ahí navegó y veía tantas frases estupendas,
caminos, luces y formas de existir. Se
identificó con la escritura. Encontró
ahí su retrato, su cerebro volaba y su pensamiento andaba flotando como sin
gravedad. Pero esa variedad de flotantes
archivos de experiencias no le encajaban en su recuerdo, si, en su identidad,
pero era algo quizá promovido por su propia inventiva.
Con su interrogante y su
inseguridad trató de regresar a su estado normal y al ver un agujero se
apresuró a salir del libro pero su mano quedó atrapada en una carpeta, con documentos
y apareció de nuevo su fotografía. Se
detuvo a verla. La abrió y trató de editarla. Esa foto cambiaba constantemente de rostro y
de nombre. Aparecía un hombre llamado Ernesto y otro llamado María. La cara de mujer era ella misma. Sin estar quemada
y sin el nombre Ruth. Esto le provocó
curiosidad y se fue al fondo del libro hojeando todo y pulsó con un clic
occidental el archivo ‘’interno’’ y es donde apareció por fin su identidad, su
historia desde su nacimiento séptimo, en femenino y al leerlo se dio cuenta que
debía investigar su pasado para saber su futuro y su función y meta. Al inmiscuirse en su propia hoja de vida y
entrar apareció el gran ojo, la iluminó con gran luz y al ver al señor 32 lo
reconoció.
Se inclinó. Mi señor se que eres tú. Ayúdame.
María. Mujer.
Fuiste vientre de mi sangre.
Fuiste un hombre elegido. Fuiste
aprobado. Viajaste. Escribiste y ahora tu amnesia es una de las
formas más acercadas a la luz.
Ruth yo, estaba inquieta.
No te inquietes ahora te diré
como salir de aquí pero triunfante.
Escucha. Toma nota.
Saldré de ti ahora mismo y en
cuanto me veas en frente de ti entra tú
en mí. Y de ahora en adelante ya no
estaré transfigurado en humano si no en pantalla holográfica donde buscarás tu
holografía perdida y dejarás tu amnesia que tuviste al nacer hembra y activarás
tus experiencias con un aparato calculador para abrir tu gran ojo. Ten cuidado con las interferencias al hacer
conexión y ten paciencia si la red está lenta pues en el interior de este libro
hay muchos secretos, privacidad y ocultismo.
Se prudente porque las ideas son
celosas.
Si señor- Dije
Dime H 32 -Dijo- Yo te diré María, una vez que
tengas tu identidad holográfica búscame en el centro de tu ojo.
Al desaparecer me dejó una serie
de fórmulas y claves, códigos, imágenes en la que con un clic podría saber
contenidos. Había correos, teléfonos,
códigos, formulas y formas de entrar a la red las cuales me llevarían a conocer
mi pasado y futuro, la clave de la holografía y el verdadero nombre.
Al conectarme seguí instrucciones
y estas me llevaron a ver mi perfil y en la opción pasado encontré toda mi
historia, mis nombres y épocas, vida y obra, biografía y mis viajes astrales,
reencarnaciones o nacimientos con todos sus detalles. Pero de repente hubo un gran trueno, fuerte
que mis oídos quedaron aturdidos. Era
una explosión. Mis manos estaban
calientes y todo lo que tocaba ardía. Y
mi mano izquierda sin sus tres dedos fría.
Mi visión se transformó en el recuerdo del accidente donde me quemé el cuerpo
y el rostro. Y vi que todas las páginas
del libro se estaban incendiando pero mi desesperación fue tan fuerte y mi
miedo tan grande que corrí al exterior y desenchufé el cable de la energía. Me quedé en la oscuridad y pensé que fue una
falsa alarma de mi desequilibrio y conecté de nuevo el cable al enchufe. Se reinició y restableció la última sesión
recuperando lo guardado automáticamente.
Eso me hizo reflexionar, no había señal de cenizas ni fuego. Me quedé pensando, en la virtualidad de los
sucesos que aunque irreales eran dolorosos como los sueños. Ahí entendí que ahorita mismo puedo
inventarme mi propia felicidad o infelicidad si yo quiero y me lo creo. Mi dolor o alegría si me lo grabo en la
opción real. Solo es cuestión de
aprender un poco a conocerme y usar mis propias opciones tecleando
correctamente.
Pero ese era el reto. La felicidad inventada, creída o encontrada
en la sabiduría o en la fe. La fe es lo
que H 32 me insistió encontrar en mi pasado.
Dejé de meditar y proseguí
abriendo carpetas, entré de nuevo al perfil, pasado, vida y obra y demás. Ahí encontré la puerta que buscaba. Estaba abierta. Entré despacio. Yo estaba a oscuras, pero escuché una voz que
me dijo.
‘’Digitaliza tu espíritu,
necesitas editar tus imágenes y pensamientos a tu tiempo. Abre tu archivo con tu mano derecha, el cual
quedó sellado cuando te transformaste en feto, pues estaba demasiado pesado con
tanta información. Abre tu máquina en
María – Ernesto- Brillante- pon
corriente y enciende pantallas holográficas, ahí busca el archivo ‘’Interno’’ y
navega, cliquea en Elías y Henock y verás todo lo que tienes.
Una vez reconocida la información
guárdala en tu pantalla principal para evitar olvidos, pues debes tenerlo a la
mano.
Al tercer día aparecerá un ser que
está en todos lados, el mensajero más querido.
De ahí en adelante él te dirá que
hacer. Ya lo habrás encontrado, ya te
habrás encontrado y descubierto. Desde
la primera a la octava dimensión te guiará.
Así lo hice y por fin llegué a mi
ojo principal, el holográfico. Me sentí
liberada de incógnitas y mi gran felicidad de saber mi gran contenido
informativo. Regresaron mis pláticas con
H32. Todos mis archivos históricos
estaban en una nueva máquina de calidad séptima dimensión, con más capacidad y
en una red más potente en su navegación.
Supe que había que cuidar ese
libro porque habían despegado los dos cuerpos holográficos Ruth, Brillante y
María.
Hice el experimento de salir y
fue fácil. El libro me expulsó sin
problemas. Cerré el libro del viaje al
corazón. Cerré mi libreta y me recosté
con Judith. Ya eran horas de la noche y
estaba por llegar Florencio. La abracé y
recorrí su hermosa piel con suavidad, le di un beso en el pelo y dormí.
EL
VIAJE FINAL.
Mientras dormía pude sentir mi
duplicidad salir de mi carne y vi mi libertad otra vez. Ruth yo y Brillante, María y la doble vida
independiente pudiendo descargar nuevos conocimientos de mis pantallas a las de
Ruth yo.
Vi llegar a Florencio y se juntó
en abrazos con Ruth yo, y yo Brillante salí a navegar. Me encontré tirada en el espacio una revista
la cual me daba atajos de navegación global.
Al sentir el deseo de explorar
se abrió mi ojo y apareció H32.
¿Qué haces¿ - Dijo
Tú los sabes señor. Estás en mí.
Deberás hacer otro viaje. El viaje final. Toma nota.
Atención.
Te explicaré las capacidades de
cada dimensión. Y las navegarás pero sin
velocidad. Con estática de pantallas,
dejarás que giren todas las fórmulas y códigos, así como numerología
alfabética, hasta que se pierda invisible lo girado. Y te transportarás a 7 estados de ánimo y
cada uno durará 3 años, los suficientes para obtener tu máximo
entendimiento. 21 años.
La tercera dimensión es la única
a colores porque sus tintas son especiales y sus miles de millones de
habitantes también en 3 tintas y su claroscuro.
Tus planetas son azules y más abajo primera y segunda tiran al amarillo
y arriba hasta la séptima dimensión tiran hacía el rojo. Colores primordiales. Por eso las proyecciones del futuro con el
pasado cruza por tu planeta azul formando el verde y violeta. Y te conviertes en color tridimensional. La cuarta y la quinta son azul con rojo. Violetas. La segunda y la primera azul con
amarillo. Verde. La sexta dimensión negra sin luz y la séptima
blanca sin oscuridad.
¿Porqué debo saber esto¿
Porque viajarás y el color te guiará. Al sur, donde veas que horizontalmente estos
colores confluyen, verdes y violetas ahí debes aterrizar. Verás de nuevo a mi mensajera, la mujer gris.Viaje estático. Solo gira internamente. Aterriza en cada dimensión una vez con las
instrucciones, pero no en velocidad si no con conexión sentimental. Estarás 3 años en cada situación y eso te
dará el crecimiento final y podrás por fin pisar la eternidad. Morirás 7 veces y al terminar el año 21 serás
eterno.
Obedeciendo al pie de la letra me
fui. Llegué en medio día. Al aterrizar me recibió una gran señora de 30
metros de alta de color gris. Chamán o
bruja, adivina o experta en magia.
El caso es que su gran tecnología me volvió a impresionar. Pasa.
Siéntate Brillante. Gracias.
De nuevo en mi aposento. En mi
planeta sensorial. Te percibí hace dos
horas a medio camino. Mis satélites son
de potencia. Te daré un libro. Úsalo. Y escribe la última parte y anéxala al
viaje al corazón. Será testimonio humano
por muchos siglos.
Ten. Cábala.
Debes discernir este pergamino usando los valores numéricos. Usa tu pantalla matemáticamente y tu
alfabeto.
Hallarás siete puertas. Cada una estará abierta respectivamente a su
tiempo cada 3 años. Entra en la abierta
cada 3 años. Vive, sufre, muere,
disfruta, piensa, llora, ríe… escribe y graba.
En todos ellos podrás encontrar a
tu señor para ayudarte, pero a veces la interferencia podría impedir la
comunicación.
Pero ve entra.
Me dio su mano. Pero al tocarla se convirtió en color, solo al
pasar mi energía. ¿Qué pasa –Dije- tu
planeta es el más colorido del sistema universal. Sin embargo en el plano octavo el color es lo
más radiante, y no lo hay, si no que una sustancia transforma el ojo y tu
programa de edición no entra en nuestra máquina. Nuestra limitación no es ideológica, solo
visual.
¿Qué dimensión es esta. Es la misma que la tuya. Solo que mi planeta es un eclipse entre la
octava y la séptima, donde el infierno tapa la intensidad del cielo.
5 de las dimensiones son seres
inteligentes, la sexta el infierno, la séptima el cielo y la octava la
eternidad intocable. La más grande sabiduría.
En cada dimensión se usa un porcentaje diferente de capacidad.
Pero ve. Entra.
Viaja estática. Gira. Y rumbo a tu planeta verás las puertas.
Giré y se transparentó mi
información y aparecieron las puertas, una alineada a la otra. Pero solo la primera estaba abierta.
Entré y observé. Estaba una un círculo girante como juego de
carrusel que daba vueltas lentamente,
así como en las ferias de mi planeta.
Pero para llegar a ese carrusel
el cual solo tenía 7 asientos alrededor y cada uno tenía un número de puerta,
había que subir antes 7 escalones los cuales cada uno tenía una frase o una
palabra. Antes de subir los escalones
había un espacio con una frase ‘’Antes del primer escalón está tu creador’’ y
yo entendí que el altísimo padre debía estar antes que todo en el corazón. Me acerqué y en eso escuché una música muy
suave, una enorme pantalla como de cine y ya relajado salieron imágenes de
guerra y destrucción como por 7 minutos, luego imágenes de paz y calma como por
7 minutos.
Entonces decidí escalar y subirme
al carrusel, asiento primera puerta. Al
sentarme automáticamente se me ajusta un cinturón y una mica de asiento con
todo y un casco visionario. Encerrado,
así el carrusel giró a gran velocidad y aparecí en una ciudad. Joven y con deseos de ser alguien.
Llevaba unos libros en mi mano y
entré a una buena universidad y mi deseo era construir un mundo mejor para las
nuevas generaciones, ser grande, rico, famoso y tener todos mis deseos a base
de conocimientos y aportes a la humanidad.
Me recibí en mi ciencia y sabía
carrera, y mi primer deseo era el buen desempeño con ganancias económicas,
administrar e iniciar empresas. Ser
rico, exitoso de buena casa y vida tranquila.
A medio camino de conseguir mi
éxito se abrió una pantalla con una frase que decía ‘’Comparte’’. Y después de esa palabra se despegaron varias
más ‘’mira a tu alrededor y siente compasión’’, ‘’ayuda’’ y todo esto
correspondía al verbo ‘’dar’’. Entonces
volteé a mí alrededor y vi. Y fui a un
recorrido por las partes de más miseria.
Cómo viven sin servicios y con enfermedades, sin comer, con el frío y
los golpes de las tempestades, sin educación, sin trabajo, hundidos en miseria,
pobreza extrema, solo les faltaba ayuda económica para sanar esos problemas, que quizá también
un buen maestro pueda sanar.
Al ver esto vi lo difícil de la
vida, la lucha de sobrevivencia y decidí tomar una decisión. Había dos opciones solamente y vi sus
desgloses. La opción ‘’A’’ me llevaba
con éstas personas humildes y necesitadas a las que había que ayudar y llevar
constantemente despensa y esperanza de vida, un poco de solvencia. La opción ‘’B’’ me llevaba con un Secretario
de Estado el cual me elegiría para escalar políticamente y conseguir las metas
políticas y empresariales que siempre soñé.
La opción B era mi gran oportunidad de conseguir mis propósitos
personales y llegar a ser el gran político y empresario alabado y aplaudido al
que no le falta nada. Vivir feliz,
viajar con la familia en su esplendor, con todos los servicios donde no
carecería de nada.
Antes de poner el dedo en la
opción B, la más conveniente, tropecé un libro cabalístico de numerología y
alfabetos en el cual se conjugaba la palabra ‘’Desmaterialización’’ con un
lenguaje biológico y otro virtual,
mezclando un cuerpo digital con las venas y la sangre hasta entender la virtualidad
de nuestra existencia. Al leer, dudé de
presionar la B y me pasé a la opción A.
Con todo el dolor de mi corazón dejé de imaginarme el bonito mundo
humano del éxito personal y familiar, ni viajes, ni carros o casas, nada de
eso. Entonces presioné A y se me vino
encima medio mundo, y me empezaron a despreciar todos los reyes de la tierra.
Entonces fui y tomé todos mis
medios y fui a comprar despensas.
Recorrí la tercera parte de mi ciudad haciendo lo que haría mi padre si
fuera un humano, ayudar.
Se que mi Padre los ve, pero el
no los va ayudar porque eso nos corresponde a nosotros, los tiene en la miseria
porque dentro del tiempo de ellos, su orbita está en la etapa de miseria y
busca en el humano la misericordia, y si no hay miseria, tampoco se manifestaría
mi misericordia ni la de los demás.
Fue así como se fue lo poco que
tenía, a manos de los que tenían menos haciéndome igual a ellos pidiendo
también ayuda. Mi fundación se quedó
funcionando y los que la hicieron empresa con el tiempo erraron, pero yo me fui
sin ser partidario de corrupción.
Al formar mi fundación de ayuda,
vi que la mayoría de los humanos odiamos los actos altruistas, aun siendo la
cara que presumimos, amamos las oportunidades personales, y usamos la leyenda
del altruismo como empresa.
Yo recibía el desprecio político
pero cientos de pobres me aman. Fui un
vicioso en dar y ayudar y yo mismo quedé en miseria, pero solo quería amar como
a mi mismo, siendo ese el mejor tesoro.
Una vez puesto en mi cabeza el
juicio y presencia del padre con la idea de haber cumplido con la palabra
misericordia, entonces salí del carrusel y fui a dar a la luz del exterior.
Ya estando fuera, la palabra del
segundo escalón era ‘’honradez’’, ‘’honestidad’’, de igual forma al subir y
entrar a la segunda puerta, me subí al carrusel en el segundo asiento, se me
ajustó cinturón y lente virtual y giré para encender mi parte emocional con la
siguiente situación. Aparecieron las
opciones Ay B.
La A, el rico empresario que
creció explotando a sus trabajadores, en la base de corrupción mundana donde
los más poderos son dueños del mundo y administran a los demás seres humanos y
tienen la capacidad de comprar lo que deseen y de ganar el aplauso del mundo
ofreciendo parte de su riqueza para comprar su popularidad. Pero al final de su vida necesitan una llave
que para abrir la puerta divina de la luz y poder llegar a la tierra prometida
y esa llave no se compra con dinero, si no que solo se obtiene con honestidad y
honradez, misericordia y demás virtudes y principios de la ética.
La opción B me proponía una vida
sencilla donde hay que trabajar y hacer negocio honrado, donde los poderosos se
aprovechan de uno y son ellos los que aumentan su fortuna.
Pude sacarme la idea de la
riqueza y todas las ventajas del dinero y pulsé la opción B tratando de
derrotar mi interno deseo de ser alguien en el mundo, líder, rico, y vencí la
tentación de la ambición y así se grabó la palabra ‘’Honradez’’ en el libro de
las tentaciones.
Al entrar en la tercera puerta
con la misma virtualidad transportadora aparecí en una gran ciudad. Ya era rico y de grandes negocios. Pero la vida me proponía las mismas dos
opciones. Invertir mi dinero. En la opción A había que invertir en un gran
centro comercial el cual se realizaría en cada ciudad del mundo. Este negocio era un negocio redondo y seguro
el cual me llevaría a ser el más acaudalado de mi país y poder por fin
conseguir todas las metas habidas en el mundo.
Sin embargo esto significaba olvidarme de la brillante llave de la luz
la cual se conseguía solo en la opción ‘’B’’.
La opción ‘’B’’ consistía en comprar un gran libro de conocimientos
divinos, un tesoro de la sabiduría el cual sería clave para conseguir la llave
de la luz.
Me escapé una vez más de la
ambición. Compré el libro. Invertí todo y logré conocimiento. Esto significaba despojarme de lo
material. El libro era toda esa gente
necesitada en la que había que invertir.
Y el negocio ganancia era titularme como un hombre despegado de lo
material, capaz de amar a su prójimo y brillar ante el señor altísimo.
La cuarta puerta, al igual que
las anteriores, estaba abierta y con mis lentes virtuales fui a dar al mundo
donde por igual había que tomar la misma decisión. Había que correr en una carrera la cual
contenía en el inciso A la riqueza y en el B la pureza. Al pulsar el inciso B me convertiría en un
hombre inválido el cual no puede correr y tampoco alcanzar la fortuna
perseguida por llegar rápido. Pero si
alcanzaría al final de su derrota mundana y el desprecio de los humanos, la
aceptación del altísimo para alcanzar la brillante llave de luz.
El inciso A también sería un
inválido el cual usando la trampa llegaría a la meta ganando la fortuna
ofrecida como premio, así como el aplauso de la humanidad y al final podría
levantarse de su silla y caminar. Sin
embargo después de levantarse se encontraría con un laberinto y confundido se
perdería sin hallar la salida a la llave.
Logré vencer una vez más el deseo
de mentir y corromperme, sufriendo y soportando el peso de una cruz, la cruz de
la ética la cual después de soportarla sería un vencedor. Reflexioné y me convencí de que éstas
historias participantes en mis pantallas emocionales eran muy importantes para
descubrir la verdad de mi viaje mundano hacía la desmaterialización y la luz.
La puerta 5, una vez adentro de
mi lente emocional, me vi los mismos dos incisos A y B. La A se trataba de soportar el peso de una
situación difícil. En esa historia
aparece como hijo un discapacitado al que hay que cuidar y darle todo como a un
hijo normal, batallarlo, entenderlo, amarlo y animarlo a la alegría de la
vida. Al final de la vida recibiría el
don de la sabiduría y su predicación.
Tendría el don de guiar a los demás a la luz, por haber conseguido la
‘’benevolencia’’ y aprendido a valorar la vida por medio de éste hijo
discapacitado especial.
Mientras el inciso B me proponía
librarme de ese problema de discapacidad para mis hijos. Al contrario me ofrecía una familia feliz y
sana. Pero sin embargo este inciso
carecería del recurso mental y sabio para predicar y la incapacidad para guiar
a las personas por la falta de paciencia, benevolencia y algunas otras virtudes
adquiridas en el inciso A. Por lo tanto
sin esos hechos se perdería la llave luminosa y tampoco se abriría la puerta de
la iluminación.
Mi reflexión fue que aunque lea
mil libros y estudie mil historias en mi escritorio virtual, jamás aprenderé en
cabeza ajena y tengo que vivir esas situaciones difíciles para entender y
crecer.
Al entrar a la sexta puerta me
encontré con la pregunta más capciosa la cual estaba probando mi capacidad de
decidir. Aquí había tres incisos. El
inciso A preguntaba ¿Deseas reír cada minuto de tu vida y así aprovechar todo
el tiempo siendo feliz. El inciso B preguntaba. ¿Deseas llorar cada uno de los minutos de
toda tu vida y así sufrir el tiempo, desaprovechando tu existencia. El inciso C preguntó ¿Llorar y reír cada
minuto de tu vida y así ser un humano como todos los que hay en la tierra.
Pensé rápido y escogí la opción
‘’C’’.
Me imaginé en opción A un mundo
de diversión, de emociones alegres, y una felicidad quizá temporal porque al
final perdería su valor la vida y la misma felicidad sin la emoción contraria,
el llanto.
También imaginé la opción B donde
solo había que sufrir y me hundiría si no apareciera aunque sea un minuto de
bienestar. Tampoco entendería la lógica
razón de la existencia si ésta solo fuera padecer.
La opción C era la correcta. El aprendizaje por medio de la risa y el
llanto de la vida humana, el claroscuro donde la oscuridad hace notar la luz y
la luz nos hace entender la oscuridad.
Pero el oscuro no pudo engañarme y respondí bien su pregunta. Ese acierto comprobaba mi capacidad de
discernimiento ante la vida.
La séptima puerta se abrió ante
mí y en el carrusel el séptimo y último asiento y con el lente virtual me
convertí en un joven buscando la oportunidad en la vida de prepararme y poder
salir adelante enfrentándose ante cualquier situación cotidiana. Las dos opciones. Inciso A aparecía un joven sin padre y sin
recursos ni oportunidades para estudiar y realizarse profesionalmente, quien
tenia que abrirse paso por la vida sin ayuda de nadie y probar su capacidad de
inteligencia trabajando y aprendiendo a la vez y luchar por sobrevivir sin ser
recomendado. Inciso B el hijo querido
por sus padres, quienes les van quitando las piedras del camino y solucionando
todo problema económico y de oportunidades evitándoles sufrir y batallar
creándoles una superioridad y seguridad de autoridad. Opté por presionar la letra A porque entendí
que en algún momento al recorrer la vida se me acabaría el pavimento y tendría
que caminar terracería y para esto se necesitaría, pensamiento y cuerpo todo terreno el cual
podría saltar, subir y correr cualquier terracería pedregosa llena de espinas.
Este camino sin pavimento son los
momentos duros de la vida los cuales no pueden vencer los hombres delicados que
no se esforzaron porque todo lo tenían.
Después de esto salí triunfante
de la última puerta y mi ojo holográfico lleno de luz resplandecía. Dejé el carrusel y no quité el lente de
historias emocionales las cuales mis sensores captaron con prudencia y llevaron
la información a mis pantallas y guardaron en ‘’interno’’ el archivo más
apreciado. Debía yo, María Brillante,
regresar a la tierra y pasar la información a mi doble Ruth yo.
En cada historia virtual viví y
sufrí y al final la muerte después de cada tres años una historia de nueva
vida. 7 vidas virtuales. 21 años más.
Esas experiencias me dejaron algo
muy particular y marcado. Que un rico difícilmente consigue la sabiduría.
Porque ésta proviene de la bondad y la bondad no permite ambición. El sabio
todo lo da. Existe la sabiduría para acrecentar los bienes y también existe la
sabiduría para despojarse de los bienes. La primera sabiduría es sana, pero la
segunda sabiduría mata a la primera para dar paso al crecimiento de lo
espiritual. Y sin ese proceso de cambio no habría crecimiento y permanecería la
ambición.
Para ese tiempo Ruth yo tenía 63
años y me dedicaba a dar
conferencias. Había reeditado el libro
‘’Viaje al Corazón’’ y escrito la segunda parte donde planteaba, el mundo
celestial después de haber pasado las 7 oportunidades humanas del
entendimiento.
Descendí al mundo con Ruth
yo. Ella estaba escribiendo en altas
horas de la noche. Su pantalla nutrida
de conocimientos pasaba a través de la tinta y pluma. Lo que Ruth yo estaba escribiendo en ese
momento era lo mismo que le acababa de pasar a María Brillante en el carrusel.
María yo ya traía la llave
luminosa en mis manos, sin embargo me faltaba una combinación numérica para
poder abrir la puerta de la luz y eso mismo vi que escribía Ruth yo.
Descubrí que su pluma estaba
sincronizada con mi máquina y que mi ojo enviaba los archivos inmediatamente a
su servidor, una nueva forma de sincronización dúplex que no tenía. Ya no era necesario entrar en Ruth y copiar y
pegar archivo en sus descargas. La única
diferencia es que su máquina aun estaba en un artefacto físico, un equipo con
cables alimentando su espíritu funcional cargando un cuerpo sobre un escritorio
y conducido por una mente terrestre con limites dimensionales pero con buenos
canales de recepción enviados por su doble espíritu María Brillante. Ese fluido de conocimientos la llevó a
escribir la segunda parte del gran libro.
Brillante tuvo un presentimiento. La recepción enviada de un satélite del
norte. Abrió su pantalla y apareció un
mensaje que su sensor acababa de recibir.
‘’Murió’’ Guadalupe López padre de Ruth yo. El gran artista y arquitecto a sus casi 90
años, habiendo conquistado el éxito y el cariño del mundo. Este mismo apareció en Ruth y entendió
sabiamente el caso de la muerte con optimismo.
Aun le quedaba su madre Ernestina Ríos la pianista de quien había
heredado ese gran talento, voz, baile y sentido musical que a sus 82 años aun
estaba en pie.
Entré en Ruth yo y tomé todos sus actos de mis 21 años de
ausencia. Revisé su holografía y vi a su
gran amor a su lado, Florencio. El inseparable,
lleno de bendiciones, aun no comprendía algunas cosas de Ruth, como su
pensamiento, sin embargo en momentos de conversación ella lo iluminaba. Florencio aun cursaba la sexta vida. Guadalupe la sexta y Ernestina la séptima. Mario la quinta, Atenas la sexta y varios de
los personajes de los encuentros de cada vida cursaban entre la cuarta y la
sexta vida, aunque uno que otro con sus primeras vidas cruzaban su órbita por
el mismo espacio dimensional de la sincronización humana.
Solo el altísimo conocía el
diagrama futuro de cada órbita. Pero María
brillante yo podía ver en mis pantallas todo el pasado sucedido y un futuro
cercano a suceder.
Al salir de Ruth yo, entré en mi
propio ojo y al encenderse apareció mi señor H 32.
Le dije – se que tu me abriste el
camino estos 21 años-Dije
Tu plegaria me lo pidió con fe- Dijo -Ahora
vengo a ti porque presientes que alguien necesita estar al nivel de tu
camino.
¿Quién- Pregunté.
Florencio -contestó.
Oí su plegaria y desea que no
rebases su ignorancia y me pide que aumente su entendimiento porque te
ama. Acabo de recibir también su mensaje
con fe. Así que te pido que entres
también en él, porque cada 4 y 8 horas tiene plegaria conmigo y a veces usa el
corazón. Entra en él. Formatea y borra los mensajes basura. Activa el antivirus y toca su ojo holográfico
al fin que no sabrá que estuviste dentro arreglando su equilibrio, del cual aun
no es consciente.
Florencio corregía textos, y era
quien ponía silla y quitaba obstáculos de su linda Ruth yo. Su mejor ayudante y más fiel compañero,
aunque a veces no comprendía los avances sexuales de la máquina de Ruth y la
forma de energizar eléctricamente sus ventanas reproductivas.
Se fue H 32 y al siguiente día
Ruth estaba dando una conferencia. Me
metí en la bocina y escuché que decía ‘’somos habitantes viejos que nos
comportamos como niños, que pasó el tiempo y no pudimos crecer y seguimos con
las modas y todas las tretas estúpidas de la publicidad, sin exigencias
intelectuales, consumiendo basura comercial.
Tenemos olvidadas las generaciones y oportunidades y están apareciendo
arrugas y aun no abrimos los ojos a la verdad. De que manera tan extraña se
enferma el espíritu amando la carne del olor profundo de una flor. Pero la flor se marchita, su carne y su olor
son pasajeros y el espíritu sana con la medicina entendimiento, jugo del dolor
de la ausencia. Nacer es empezar y la muerte cambiar. Es solo crecer, no acabarse. Es transformarse. Si no muero, tampoco puedo nacer de
nuevo. Solo estaré envejeciendo pero no
renovándome. Al nacer el coraje, a
muerto la paz, y para que nazca la paz tendrá que morir el coraje. Es
inevitable la vida sin errores. Los
errores tontos te deprimen, pero los errores sabios te enseñan. Depende de tu digestión mental y de tu alumno
levantador de caídas. Tu metafísica fe
te dará todo en plegaria. Porque tu voz
traspasará los mundos etéreos de los viajes universales. Pide y se te dará todo. Éxito, solvencia, hermosura. Pero hay de aquel que no pida sabiduría,
porque la dependencia de la sabiduría tiene conexión eterna con el creador,
pero el éxito tiene dependencia mundana con la vejez y lo descontinuado’’.
Ahí terminó su conferencia y
recibió cientos de aplausos del público, pero ella sabía que ellos no entendían
aun sus escritos, pero percibía la comprensión del altísimo padre celestial.
Por esos días enfermó Ernestina
Ríos y cayó. Un fulminante paro finalizó
su sexta vida. Ruth al igual que su
paterno también aceptó la ausencia materna.
María yo entré en Ruth a observar
su centro sentimental. Su máquina de
buenas condiciones aun, hacían notar algunos desperfectos y quizá en mi
ausencia podía caer repentinamente también Ruth cerrando su sesión y cerrando
también la mía automáticamente por duplicidad espiritual.
No era yo quien decidía el tiempo
de vida de Ruth, si no que Ruth decidía el tiempo de vida de María yo.
Yo María debía estar preparada
para terminar la séptima y última vida y poder entrar en el mundo celestial
eterno sin ningún problema. Mi mundo
celestial aun no era eterno, incluso el de María yo debía ser más que eterno
aun con poder de guía angelical, por ser elegido a acceder al mundo futuro
antes de mí tiempo.
En las pantallas de Ruth había un
virus y por lo tanto también en mi máquina virtual debía estar el mismo virus
silencioso.
Entonces salí de ella y busqué en
mi interno a mi señor H 32. Ahí estaba
tranquilo en su escritorio atendiendo millones de llamadas humanas y
contestando el servidor con entusiasmo.
¿Qué haces. – Dijo – tú lo sabes – respondí. Vengo por mi certificado de sabiduría
dije. Aun no está listo.- Dijo.
No te preocupes, el virus de Ruth
no es maligno y su antivirus es bueno.
Aun no es tu tiempo. Además a sus
65 años tendrá un hijo de Florencio.
Emmanuel. Le llamarás Belén.
Esa noticia me dejó
impresionado. Puse Belén en el buscador
de la red y apareció su significado.
Pero aun así en mis documentos ya estaba descargado el archivo completo
de su infancia, su vida ‘’mensaje’’.
Su significado Belén era
‘’mensaje’’.
Entonces acepté. Y pregunté.
¿Estoy ya preparado. ¿Me falta
algo por aprender. – Si- me dijo. Enférmate, sufre y muere. Solo eso te falta
aprender y serás eterno y aun más que eso.
Ese será el destino de Ruth y será eterna en tu holograma. Pero tú, a ti te falta la última parte de mis
elegidos. María brillante. Ven.
Escucha. Atención.
Niégate. Y ponlo de ejemplo.
Entonces entenderás que no debes
ser esclavo de tus deseos, si no del amor, sabiduría que enseña el creador, la felicidad
y eternidad.
El conocimiento no nace de ti si
no del padre, él está en ti y lo deposita en ti al negarte. Ahí te conviertes en él en ti. Ahí tú y él son uno solo. Y quien te vea lo verá a él. No de las pantallas si no de información
necesaria. No de cuerpo si no de
espíritu. Como lo soy yo. Tu señor.
Ya despojaste las vanidades, los
deseos y las ambiciones. Ahora despoja
tu máquina para que tu información pura, sin pantallas pueda cruzar el túnel,
hacía la eternidad.
¿Recuerdas cuando entraste al
hogar de los sabios. ¿y saliste del
hogar de los aprendices. No podías
cruzar tu equipaje carnal y tuviste que arrancar tu carne y desnudarte y
quitarte todo tipo de adorno material u objetos, guitarra, pluma, pincel y
demás accesorios carnales. Ahí te convertiste en virtual pantalla holográfica
viajera. Ahí entendiste tus vidas.
Pues ahora cruzarás el más
importante túnel de la existencia pero antes harás tu misión final. La última prueba.
Una vez realizada ésta misión
podrás volver con Ruth tú y disfrutar a tu pequeño Jesús Belén. Después de tu misión, Florencio engendrará la
sabiduría en Ruth tú. Después de tu
misión María tú quedarás embarazada en tu centro de recepción y nacerá la
sabiduría por fin. Entonces descansarás 3
días y podrás recibir tu certificación.
Más sin embargo tendrás derecho a
decidir inciso A y B nuevamente por tu libre albedrío.
Mi señor H me llevó y me puso en
una habitación blanca. Amplia, muy
blanca. Bastó con poner su dedo en mi
centro plexo solar y me transportó. Me
dio una silla. Siéntate dijo. Viendo de frente a la pared más grande
levantó su mano y proyectó una luz en la pared y de la luz cinética salieron
imágenes. Tocó mi cabeza y me introdujo
en las imágenes. Él se puso en el centro
de un círculo de tierra giró y al girar se fue introduciendo en la tierra. Una vez perdido en la tierra salió un gran
árbol hermoso y creció en un momento.
Tenía 7 frutas. Escuché una voz
que me dijo toma una fruta y cómela.
Señor – contesté - ¿Eres tú el que habla. Dijo sí.
Entonces tomé una de las 7 frutas y la comí con todo y semilla. Al momento la semilla se posicionó en mí ojo
en el puro centro. La memoria de mi
señor bajó y copió en mi pantalla un pergamino contenido en la fruta y la
semilla era sabiduría pura. Entonces
desapareció el árbol y mi señor H apareció de nuevo en mí. Me dijo ten.
Me dio una piedra blanca y me dijo su significado. ‘’Esta piedra simboliza un principio, también
un fin.
Es el nacimiento pero también la
muerte. Pero es necesario morir para
nacer. Al morir habrás vencido y habrás
nacido de nuevo. Pero tu nacimiento
próximo será en un caballo blanco y con una corona de vencedor. Podrás tener un cuerno para reinar ante miles
de fieles y unas alas que simbolizan tu poder y libertad en el universo, sin
embargo he sembrado en ti la sabiduría que me dio mi padre porque ésta estará
una vez más en tu casa, la tierra y tú te ausentarás dejando la semilla. Escucha te ausentarás dejando la semilla.
Seguí viendo la pared con
imágenes y me dijo – aun no te salgas, sigue adentro. Entonces de nuevo me introduje en mi
pantalla, y volví a preguntar. ¿Estoy
preparado¿ Me contestó – te falta solo
una prueba. Atención.
Desciende a tu pueblo de tierra y
al llegar te encontrarás con dos puertas.
Debes abrir las dos. Al abrirlas
analiza la propuesta que ves y decide entrar a una de las dos puertas. Cuando entres permanecerás y grabarás en mí
una historia con tus hechos. Entonces me
buscas para juzgar la historia. Después
de esto habrás vencido.
NACIMIENTO
DEL FIN.
Descendí a la tierra. Encontré las puertas. Al abrir la puerta izquierda encontré todo un
panorama de armonía. Había mucha
abundancia. Edificios hermosos, toda una
ciudad capitalista brillante. Pero había un problema el capitalismo estaba
en manos del 3 porciento de la sociedad y había por otro lado una pobreza
extrema y una esclavitud tremenda. Tuve
una invitación a entrar con un ofrecimiento pero primero debía analizar las dos
opciones para decidir. Abrí la puerta
derecha y vi un mundo de millones de humanos arrastrando sus cargas pesadas por
errores cometidos. A los cuales se les
había dado algunas instrucciones que no tomaron en cuenta y cayeron presos del
pecado y el error. Esclavos de su
ignorancia, miseria y presos de sus mismos pecados, detrás de unas rejas que
ellos jamás romperían y perdidos en la confusión sin poder salir.
Sentí
compasión.
En caso de
entrar a ésta puerta tendría yo que rescatarlos, para poder estar adentro,
tendría que dar la vida, sufrir y ser atormentado. Así de esa forma ellos quedarían libres al
derramar mi sangre y podrían dirigirse a un lugar de luz.
Entonces
reflexioné y vi las dos opciones. Ser un
hombre rico en una ciudad bella olvidándome de mis hermanos, o ser un mártir
muerto que liberaría a mis hermanos, de la oscuridad.
Por un momento
vi mi sangre correr porque ya había aprendido a amar a mis hermanos.
Entré en la
puerta derecha. Hablé de luz. De justicia y de ejemplos. Prediqué el amor mutuo. Salvé, ayudé, guié, enseñé y con eso obtuve
el odio de los gobiernos. Fui un
caudillo, un revolucionario que exigía justicia. Mis hermanos se revelaron con mis palabras y
los soldados levantaron sus armas y fueron a aprenderme. Me llevaron a la procuraduría de
justicia. Después con el Gobernador y
supe que la misma iglesia la cual comercializa el nombre de mi padre era quien
me acusó.
Me pusieron en
un evento público y me torturaron y al final me fusilaron enfrente de la
gente. Se derramó mi sangre y con esto
se liberó a toda la gente. La sangre fue
símbolo de revelación contra las rejas, donde el pueblo unido no puede ser
vencido. Se levantaron en armas. Armas del verbo, del entendimiento y
derrotaron la ignorancia.
No me fui
difícil aprender a sufrir y a morir porque los amo. Y además sé que éste ejemplo generaría una
nueva guía para mis hermanos y una corona para mí. Aunque tuve ganas de escaparme, pero soporté
hasta el final. Esas fueron mis duras y
sufridas emociones de esa proyección.
Mi señor
levantó de nuevo la mano y se apagó la luz que proyectaba cinéticamente. Tocó mi cabeza y salí de la escena.
Me dijo –
levántate. Me levanté de la silla y salí
de aquella gran habitación blanca.
Regresé a la
tierra con Ruth yo. Ella estaba en
cinta. Florencio estaba preocupado y
feliz. El no entendía porqué hasta ahora
aparecería un hijo en el vientre de mí, Ruth yo. A mis 65 años, y habiendo él pensado en la
esterilidad de Ruth.
Pero él sabía
que esto pasaría por medio de sueños.
Entonces,
María yo entré en el cuerpo de Ruth yo, y las dos fuimos una, habiendo unido
nuestras diferentes emociones e información, y siendo la misma, se registró la
misma máquina, archivos y número de pantallas.
María Ruth estaba lista para dar a luz.
Ese día del parto se dejó ver la señal en el cielo. Lo que mi señor H me anunció.
Habiendo
nacido un varón hermoso cada uno puso un nombre. Florencio nombró que en su sueño se llamará
‘’Belén´´.
María Ruth
dijo – será su nombre Jesús.
Una vez
registrado el suceso en mi pantalla María yo salí de Ruth yo. Aunque nuestros órganos espirituales como la
red satelital, el servidor y demás sistemas era uno solo para las dos, ella
tenía su máquina física, las pantallas eran duplicadas.
Entonces
descansé. Al tercer día fui a buscar a
mi señor H. Me dijo – pasa. Me senté ante su escritorio y ya tenía listo
el documento. Lo firmó y puso un sello
que simbolizaba el triunfo.
Felicidades
dijo.
Guardé el
documento y lo titulé certificación y lo puse en pantalla principal escritorio.
Me dijo. Antes de que salgas de ésta oficina formatea
tus pantallas y vacía lo que has borrado.
Vacié la papelería de reciclaje, borradores, eliminados y demás peso en
desuso para dar reinicio a un futuro sin pasado.
Salí más
liviano de aquel brillante lugar.
Regresé con
Ruth. Ella no sabía lo que yo hacía
dentro de ella misma, sin embargo recibía toda mi información y la escribía en
su ‘’Desmaterialización’’ el segundo libro seguido del ‘’Viaje al corazón’’
escrito por Ernesto Brillante, sin embargo sí percibía la presencia de María
dentro de ella y su procedencia de iniciada en la espiritualidad divina. Para ella María era su propia
inspiración. Pero su interna María era
una viajera virtual que por medio de la red espiritual le aportaba archivos
importantes de sabiduría, moralejas de sus viajes y encuentros.
María
brillante yo, sabía que en este mundo material no tenía ya nada que aprender
por lo tanto su estancia en la tierra sería muy breve. Pero Ruth yo quería ver crecer al bebé y
disfrutarlo y María yo debía esperar un poco para irse junto con Ruth y
finalizar la séptima y última vida.
Entonces Ruth
se sentó a platicar con Judith. Judith ya tenía 40 años. Ya no era niña ni
tenía aquella belleza de inocencia. Casada.
La acarició.
Le dio un beso y le dijo – Todo tiene un tiempo. Nace y muere.
7 veces. Pero solo de cuerpo y no
de espíritu. Pero duele dejar a nuestra
familia. No obstante aparecen nuevos
amigos.
Pero todo
tiene que morir y nacer y seguir muriendo y naciendo hasta la eternidad. Es decir evolución, cambio, crecimiento,
hasta llegar con el padre y el hijo.
Judith
entendió y contestó – lo se. Tienes 66
años.
La abracé y se
quedó dormida en mis brazos como en sus tiempos de niña bella.
A cierta hora llegó
Florencio de su trabajo. Su hija ya estaba en su hogar yo sola en casa. Me
abrazó y le repetí las palabras que le había dicho a Judith.
Esos días no
viajé. No salí de Ruth. Estuve con ella y Florencio, con Judith y
Belén. Pasaron 3 años y veía a mi señor
H en cada plegaria.
Al tercer año
de esto Belén tenía casi 4 años. Era
dulce y juguetón y sus ojos decían muchas cosas que su boca callaba. Su ternura, sus manos expresaban todo y yo
entendí todo.
Un día estando
en el campo jugando, levantó su manita y me dio una piedra blanca
brillante. La tomé y entendí todo. Era la piedra del final. También la del inicio. Se estaba despidiendo de mí. Él se quedaba con el mensaje y la misión. Yo me iría.
Al ver la
piedra me asaltó una visión. Y vi.
Vi a nuestro
padre transfigurado en creador. Tomando
lodo y creando humanos. 6 días para
él. Para nosotros 6 milenios.
De que manera
tan hermosa conectaba cada cena y cada sentido al cerebro. De que manera tan
hermosa pudo hacer un sensor tan capaz en la carne para que al tocarnos
pudiéramos sentir tanto placer transportador. Como pudo darnos tanta felicidad
en un solo orgasmo de un minuto conectados con la carne, el maravilloso cuerpo,
vehículo para pisar la tierra. El cuerpo que una vez que lo exploramos, nos
enamora y nos hace depender de él, porque vibra cada una de las células cuando
nos conectamos con los seres queridos.
Pero no solo
eso lo vi construir, también lo vi conectar un cerebro para juzgar los
sentimientos. No solo hay que sentir si no también pensar y descubrir nuestra
evolución a través del tiempo, poder probar varios cuerpos diferentes,
encontrar y escribir así cada una de nuestras experiencias en el viaje.
Al segundo día creó a Moisés. Y en medio día más a Abraham. 2000 años y 500 años más, mil años por
día. En otro día y medio nació el Mesías
es decir 1500. Sumados eran 4000 o
cuatro días.
Llevó a 6 a la
montaña y con él 7. Aparecieron con él
Moisés y yo y juntos éramos 3, encima de la montaña. Al cuarto día murió y al tercero
resucitó. Pedro lo negó 3 veces y él lo
perdonó 3 veces. Al cuarto día vino y al
séptimo murió. El cuarto día murió y en
3 más resucitó. Después de 2 días se
levantó. Al segundo milenio de haber
llegado regresó. 6 mil años para crear al mundo, 6 mil años para esa
historia. El séptimo milenio de
paz. Séptimo día Sabbat, descansó de
toda su obra.
Habiendo visto
esto, se cerró la visión y volví a ver la brillante piedra y los ojos hermosos
de Belén con mucha ternura.
Al llegar a
nuestra casa humana, Ruth yo se recostó cansada. Acababa de finalizar el libro
‘’Desmaterialización’’. Presentía que
una nueva era de sabiduría se acercaba en su futuro. Se sentía ya evolucionada y preparada para ya
no volver a pisar este suelo. María yo
también sentí mi batería un poco descargada.
Hice el intento de conectar.
Enchufé pero fue inútil. Algún
falso contacto, descarga general o batería descontinuada. El caso es que se empezó a cerrar la sesión
sin ningún síntoma de virus u otro problema.
También Ruth empezó a desvanecer.
Sintió que su corazón se paraba.
Y por más intento su corazón no alcanzaba el aire. Y al fin.
Quedó el
cuerpo de Ruth inerte y el de María yo descargado. Sin la energía. Entonces toda aquella información de
sabiduría salió en el alma. Salió sin
holograma. Sin pantallas. Sin máquina.
El espíritu era la información y el alma la contenía sabiendo que aun
internamente existía dicha información, la esencia del viajero. Lo que trasciende. Lo que permanece. Lo que se pasa de un cuerpo a otro. La información. El conocimiento. El pasado
Ruth estuvo en
el funeral. Pero María brillante se
elevó y a gran velocidad se dirigió al hogar de los celestiales, tranquila
sabiendo que había quedado la semilla.
El mensaje. Emmanuel. Jesús Belén.
La semilla del árbol de 7 frutas.
La que estuvo
en el vientre de Ruth. La sabiduría.
E
T E R N I D A D.
Mis conocimientos viajaron por un
túnel, andaba como dentro de un cuerpo, todos los caminos estaban iluminados,
sabía que saliendo del túnel llegaría a aquel espacio esperado, llena de
inquietudes e interrogantes en el camino apareció mi señor H 32 y me dijo –
felicidades, has vencido, puso mi mano en mi plexo centro solar y me transformó
en un segundo, se encendió mi ojo y empezó a encender cada uno de mis espacios
internos lo más brillante y luminoso jamás visto en mis vidas holográficas - y me dijo -
ya no serás masculino ni femenino, solo celestial. Entonces me introdujo en un filtro
cognoscitivo y fueron quedando atrás los recuerdos de miedo y negatividad,
quitó todo deseo y borró todo pensamiento, frase, sentimiento de error y
tropiezo de mi espíritu. Al fin mi alma
estaba pura como si nunca hubiese
recorrido por aquellos senderos solo se estaba rescatando todas las moralejas y
resultados de juicio, todas las máximas y refranes y aun esto desaparecería
para no dejar huella de mal presentimiento pero una vez establecido el
conocimiento celestial.
Me dijo – prepárate porque
saliendo del túnel serás otro pero serás tú, otro tú, el mismo pero otro. Ya no podía sentir miedo porque mis
conocimientos desconocían esa palabra y mi diccionario ya no la tenía en
acceso.
Desaparecerás por un tiempo dijo
y en ese tiempo platicarás con los tuyos y serás consejero entonces llegarás
por fin a la entrada de la eternidad.
Ahí empezará una nueva historia, se abrirá un nuevo libro. Olvidarás tu viaje al corazón y tu pluma
escribirá nuevas anécdotas todas positivas y con un poder siempre vencedor y en
tus conocimientos quedará olvidado el dolor y la muerte no existirá.
Entonces viajé por el túnel, mi forma ya la conocía sin haberla visto, su
belleza no era como el mundo, sus brillos eran más refulgentes que cualquier
mina de oro. En el viaje, un agujero me
succionó y me transportó al gran tabernáculo del altísimo donde estaban los de las vidas aun sin su
nuevo cuerpo.
Todos vestidos de batas blancas y
una palmera en la mano. Ahí estaba Atenas pero no me reconoció, también
Guadalupe y Ernestina, ya no había parentesco, solo eran mis hermanos.
Me dijeron ¿A donde vas bello
Ángel. A la eternidad – agregué.
¿Qué debemos hacer para ganar ese
premio. – Atención dije.
‘’Dos de ustedes ya van directo
al premio solo se les indicará algo último, y a uno de ustedes le falta pisar
de nuevo la tierra por una generación más, pero en 70 años nos encontraremos.
Cuando tengan su cuerpo úsenlo
bien. Cuídenlo, pero más el espíritu que
al cuerpo. Sánenlo pero más al espíritu
que al cuerpo. Disfruten sus sensaciones
pero más las espirituales que las carnales.
Recárguense, pero más al espíritu que al cuerpo. Pues el cuerpo es temporal y el espíritu
permanecerá. Durante ese tiempo den ese
mismo consejo a los demás y sanen de esa forma a los demás. Al final sepárense del cuerpo, despojen,
desencarnen, abandonen el pasado biológico, cambien, transfórmense, crezcan,
desarróllense en los seres espirituales de pureza y pisen la tierra
celestial’’.
Después de un tiempo contestando
inquietudes por fin proseguí hacia la salida del tabernáculo y fui hacía la
puerta de entrada de la eternidad.
Una vez en la entrada, la puerta
estaba custodiada por miles de querubines que me recibieron como rey con mucha
alegría. Mostré mi certificado con sello
y firma de mi señor. Se abrió la puerta
y en el primer paso adentro salió una enorme mano de colores brillantes y me
hipnotizó y tocó mi conocimiento y dejé de ser el yo que no volvería a pensar
en el pasado. Todo fue futuro. Me pusieron una corona y el rayo de la mano
se conectó con la corona y ahí renací.
Inicia la historia. Esta es la primera historia de la
existencia. Sin deseos. Solo saciedad. Sin inquietudes todo respuesta. Amor en su máximo siete veces más potente que
cualquier placer. El mejor universo
interno. Siempre agradecido con tan buen
regalo. Yo en mí dentro del mejor mundo
inventado por mí que había inventado al altísimo que me inventó. Inventando la historia del que escribió la
mía. Creando cualquier camino que
deseaba caminar y él viéndome y yo inventando que él me ve.
Todo fue posible con la sabiduría
más creadora pero sin imagen. Sin frases
ni letras. Ninguna matemática. Mi percepción era contraria a lo
contrario. Me creaba creando. Me inventaba inventándome que me inventaba. Escenografía a mi gusto.
Todas las puertas abiertas. Todos los manjares listos.
Enfermedades sanadas. Adversidades conquistadas. Aplausos del altísimo. Premios a diario. Todas las hambres desaparecidas.
Ovacionado por millones de
millones y cuanto yo pensara era real.
Se paró frente a mi Miguel. Mi padre te espera. Tienes reunión con él. La espera era placer. El camino fue placer. Verlo fue placer. Hablar fue placer.
Apareció una enorme luz y una voz
penetró en mí. Ten. Era un libro.
‘’ De hoy en adelante escribirás la vida de algunos planetas. Yo te inspiraré. Crearé a través de ti. Te encargarás de varios reinos. Podrás juzgar y serás ayudante de Miguel el
comandante del Universo.
Ve buscando los personajes a tu
gusto. Escribe la historia, pinta los
escenarios. Inicia tu obra. Piénsame inspirándote.
Desde hoy serás mi creador, el
cual he creado, creándome, tú a mí en ti mismo.
Veme como piensas que soy viéndote.
Porque somos uno, yo en ti y en mí tú recibiéndome en ti, ahora
mismo. Como un espejo donde te ves
viéndote. Como el que te repite
repitiéndote habiendo sido repetido.
Todos eres tú, aquellos, yo, y los tres uno, siendo todos.
Siempre que llegas a una meta, al
llegar te trazas otra.
De aquí ya no hay otra. Esta es mejor que ésta misma.
Pero siendo esta mejor que esta
misma, nada es mejor que este crecimiento.
Ya crecí más que lo más grande, sin ego porque tú eres el que creció y
yo en ti y el padre en nosotros’’.
Después del ego inferior ya no
hay ego, solo el ego superior, que es un ego sin ego.
Después de esto supe cual sería
mi misión. Escuché que del norte me nombraron Juan. Del oriente María. Del poniente Elías y del sur Emmanuel. Pero el creador me llamó ‘’Jumael’’ y mi
corona era como de arcángel acabado de nacer.
Todos medían alrededor de 14 metros. Terrestres pero yo solo medía
7. Pregunté ¿Porqué. Y alguien me dijo. Por ser el más grande de los elegidos del
mundo eres el más pequeño celeste.
Entonces observé en mi
información al tiempo, en cuanto se me asignó el cuerpo celestial. Introduje el conocimiento, y dentro vi el
significado del tiempo. El que nunca se
para. El motor de la existencia y el
infinito.
Diferente en cada coordenada,
pasado, futuro o presente pero con los engranes siempre funcionando. El tiempo gira y gira. Ellos ya estaban. Yo acabo de vencer y llegar. Por ellos son más grandes. Tienen más
información.
El tiempo gira y gira. Sigue cada
siclo del astro. Evolución,
transformación, desarrollo, crecimiento, menos vejez. Aquí ya no hay vejez solo crecimiento. Aquí ya no se pierden las facultades ni salen
arrugas, porque ya no hay superficie ni densidad si no partículas etéreas de
información como un gas que no se ve pero penetra. Aquí si se entiende la belleza de la vejez,
la belleza de las arrugas, la hermosura de la intensa blancura del pelo,
sabiduría.
Los que están allá en los
planetas aun no saben que cuando ven un buen acto están viendo al mesías. Y que ese es el camino, también la verdad, y
la vida eterna. Pues los planetas son el filtro que quita la mugre, lava y
purifica la información que al final se llama ‘’La verdad’’.
Pregunté por Miguel y me
dijeron. Está gobernando la Jerusalén
nueva. Una brillante ciudad de 12
puertas. Muy representativa. Ahí se
filmaría mi película. Cada uno de mis
hermanos arcángeles ya tenía su propia cinética historia. Faltaba la mía que aun tenía que iniciar
desde escribir la historia, elegir el reparto y dirigirme a la gran ciudad
donde Miguel autoriza mi producción.
Solo que mi historia sería real y no incierta como en la humanidad. Esta historia será permanente, sin
apocalipsis, sin final, una bella historia donde solo el bueno es poder, una
trama donde el malo solo obedece y no penetra, sin espionaje, ni conflicto, sin
abuso de poder y no hay más tema que la justicia.
Antes era un muñeco. Un ser fantástico, un ensayo de ser
existente, un deseo de existir, algo incierto.
Sin conocer mi pasado ni mi futuro, solo mi
presente y sin entenderlo.
Ahora soy real. Existo, soy cierto y entiendo.
El amor es una sabia actitud.
Dime humano. Si estuvieras ya salvado en el paraíso, a
gusto, coronado, triunfante en la meta y realizado. ¿Regresarías atrás a guiar a tus hermanos
para que no se pierdan. ¿Volverías atrás
para salvar a los que pueden confundirse.
¿Arriesgarías tu corona para traerte a los que no supieron llegar a
donde estás. No. No lo harías.
No amas porque eres un humano.
Pero un ángel ya sabe que el amor es colectivo y no piensas en una
pareja, piensas en todos tus hermanos, no en tus familias, si no en todos, para
que no se pierdan y tengan vida eterna.
Así son los ángeles, arriesgan su
vida en rescate por muchos.
Al recibir mi cuerpo de 7 metros
que estaba poco a poco creciendo lo observé y lo estuve explorando. Ilimitado.
Con toda la capacidad necesaria para mis quehaceres. Todo era posible pero el ojo del juicio me
permitía solo lo bueno porque la eternidad fue un filtro que no permitió ningún
error. Aquí ya no necesitaba errores, ni
padecer ni sufrir pues ya estaba en mí la sabiduría.
Este cuerpo es más sencillo y
potente, ya no hay que abrir ventanas ni teclear, es una súper pantalla
conectada al ojo sabio, solo hay que pensar y entra la orden.
Todo se hace sin navegar ni
buscar, solo hay que pensar la idea y sucede automáticamente. El transporte más rápido y sencillo,
aparecerse en el lugar deseado pudiéndolo ver sin problema, sin viajar. La
potencia y el poder producto de la humildad y el amor a flor de piel. He aquí la grandeza de la que los humanos
carecen. Inteligencia, poder, potencia,
capacidad, humildad para amar sin engrandecerse por encima de nuestro
creador. En esos principios están los
demás dentro.
CINETICA CELESTIAL.
El cielo estaba dividido en tres
partes y en el puro centro el corazón, un corazón pensante que conocí en mi
viaje.
Son como tres círculos de miles y
millones de millones de distancias. Tres
círculos, uno dentro del otro pero todo es el cielo. El corazón al centro. Alrededor el área capital del cielo y otro
cerco que rodeaba a los dos cercos primeros. Toda el área es navegable pero requiere cierta
potencia pensante para explorar cada una.
El corazón, el centro resplandor
que ilumina el universo. Mi padre en su
absoluta potencia. Y las otras dos
circunferencias cercadas de diferente ambiente de gobernabilidad.
La capital del cielo como un
estado federal de mi señor Miguel que provee al universo entero. Y la parte exterior tercer cerco el cual es
un cerco donde se agrupan los seres interplanetarios pidiendo entrar a la
eternidad, quienes están esperando el juicio aun en el tabernáculo o la
antesala, y otros en la oscura sexta dimensión queriendo ser trasladados al
tabernáculo.
La ‘’antesala’’ es un gran auditorio
situado entre la sexta y séptima dimensión, entre el cerco de infierno y cielo
en espera del juicio de mi señor.
Ese es el primer juicio. El segundo es en el auditorio del corazón de
mi padre ante el gran juez y el libro de la vida, con la decisión final.
La gran ciudad luminosa de 12
puertas la estaba reinando mi señor H 32 y Miguel la capital y mi padre todo.
Mi señor H y Miguel son el mismo
hijo unigénito de mi padre pero dividido en dos. Miguel reina todo menos el corazón.
Mi padre es el cabeza de Miguel y
reina todo.
Miguel me habló y me dijo. Inicia ya tu historia, actúala y muéstrala,
tu misión, tu existencia.
Me envió al gran palacio del
tercer cielo donde estaba la gran ciudad nueva de 12 puertas.
Inicié mi historia. Escogí reparto. Y empecé mi actuación. Escuché un aplauso de todos los ángeles y un
cántico rítmico, alegre y hermoso y eso me hizo brillar más.
Llegó Teresa quién estaría a mi
lado siempre, mi gran amigo de conocimiento.
Luke el gran ángel metafísico. Un ángel hermoso llamado Azale el
cuidador de los jardines y flores paradisiacos que perfumaban el ambiente
celeste. Algunos otros ángeles
servidores para la historia efectuada, inseparable de mi lado quién siempre se
encontró en mi camino en las 7 vidas. Azale
admirador de mi historia solo quería efectuar, ayudar, amador de mi
conocimiento. Al verlo me hizo un
escrito en mi ojo y me dijo que su conexión y la mía eran el sabio Belén
precursor de los humanos en salvación.
Apareció en mi pantalla mi señor
H. Dijo – Jumael, ven a la Jerusalén
nueva todo está listo.
Aparecimos en la ciudad luminosa
Teresa, Luke, Azale, los demás y yo.
Entramos por la puerta de Acer y nos dirigimos con señor H. Pusimos firmas e hicimos acuerdos.
Salimos por la puerta de Benjamín
y entramos a resolver los juicios de Pedro.
Llegamos con Pedro a la
antesala. Todo el cerco del tercer cielo
estaba custodiado por querubines. Con
filosas espadas de éteres quemantes. Desde el día que entró Satán, ellos
cuidan. Los ángeles se habían revelado
anteriormente y el padre dio orden de aprehensión a los seguidores del diablo.
La nueva Jerusalén estaba recién
habitada, por los humanos elegidos de la tierra en la segunda generación, los
cuales cada tribu entró por su puerta, 12 mil por cada una.
Pero era una tremenda multitud de
elegidos, toda una millonaria legión de 144,000 de cada planeta, millones de
cada sistema y mucho más por cada Galaxia.
Aunque mi procedencia era terrestre, los ángeles no tenemos diferencias,
si no de capacidad y poder o
nombramientos del padre.
Esta gran ciudad es una súper
nave que viajó el universo y milenariamente descendió en cada uno de los
planetas en apocalipsis arrebatando a los sabios que la reinarían junto a mi
señor H. Entre los terrestres Teresa y
Luke que conmigo estaban y el recién llegado Azale el ángel perfumado que
estuvo a mi lado siempre al final de mis días terrestres y mi padre bendijo su
vientre dejando la sabiduría y el mensaje de nuevo en la tierra.
Azale, nuevo ángel sin ser hombre
ni mujer, ahora de nuevo a mi lado, en la misma misión e historia.
Llegando a la ‘’antesala’’
estaban algunos personajes de mi planeta.
Esa era mi misión encargarme de mi planeta y la puerta de entrada al
cielo. En el departamento C de la antesala
21 estaba la llegada de los terrestres obviamente solo el ser y no el cuerpo.
Estaban el Che, Zapata y Simón
Bolívar y todo tipo de personajes justicieros.
Otros ya se habían regresado al tabernáculo, Napoleón, Hitler y algunos
emperadores que habían sido poderosos a los que se les dijo de definitivamente
no entrarían, si no en varias vidas más, y seguir aprendiendo. Debían aprender la paz no la guerra.
Al presentarse estos llegaron
muchos más caudillos.
El departamento C 21 de la
antesala era un auditorio para miles.
Había un gran público. Todos eran
caudillos y heroínas, guerrilleros, libertadores y demás revolucionarios de mi
planeta.
Teresa, Luke y Azale pusieron
orden en el Departamento y por fin yo Jumael subí al estrado a dar mi
conferencia veredicto, con sus referencias estatutarias de la sabiduría del
libro constitutivo y el derecho a lo celeste.
Todo se puso en silencio. Y dije.
‘’Quizá ustedes pensaron que
tenían posibilidad de certificación. Que
podían lavar sus pecados. Aquí no hay
purgatorio. Eso es un invento de un
poeta terrestre. No hay tal cosa.
La realidad es otra. Los pecados se lavan en sus propios
planetas. Nadie manchado entra
aquí. Menos manchado de sangre.
Solo el padre y el hijo pueden
juzgar con espada y con ira. Pero al ser
humano solo se le permite matar la maldad con el verbo, diálogo o enseñanza, o como
se le llame.
Ustedes no pueden juzgar porque
carecen de veracidad en sus juicios.
Tendrán que regresar a la tierra.
Serán predicadores de paz y no de guerra. Revolucionarios verbales no de sangre.
Borren la historia falsa. Deshagan tradiciones, estatuas y homenajes a
ídolos históricos, porque solo un ídolo hay y no tiene imagen solo conocimiento
y actos.
Hagan carnavales pero de paz y
sabiduría, no le hagan homenajes a la ignorancia, no demoren más la corona de
la verdad y la eternidad. Hay que
revelarse contra la maldad no contra el cuerpo ni la sangre. El arma no es el fusil si no la palabra’’.
Después de mi discurso bajé del
estrado. Nos dirigimos los cuatro y
varios más a la antesala 14 en el departamento ‘’D’’.
Había otro público, pero estos
eran de otro ámbito, los cuales también tenían las mismas carencias de conocimiento
y sufrían los mismos problemas socioeconómicos, ideológicos y de poder
político.
Ahí estaban varios papas,
arzobispos y demás representantes clérigos eclesiásticos. También algunos amigos de ellos que llegaron
a tener fama como poderosos políticos, así como empresarios acaudalados,
escritores, ideólogos, sociólogos y todo tipo de doctrinistas que creían haber
encontrado la verdad.
Ahí subió al estrado Teresa el
ángel consentido de mi señor y experto en pocas palabras y muchos actos.
‘’Empresarios. El dinero es el vehículo para los que saben
conducir. Si no conduces no debes tenerlo.
Pues es como traer un volante sin conocer las señales. Los que lo tienen son esclavos, dependientes
e infelices.
Cuando sepas su fin, llegará a
tus manos sin desearlo.
Creemos necesitarlo, pero solo
estamos sujetando la vida a lo material.
Hay tres formas en que llegas al
dinero.
Invocándolo, lo cual será un
golpe de suerte innecesario y peligroso.
Porque te es necesario y
aprendiste a ganarlo y valorarlo, pero no debes sujetarte a el.
Porque ya sabes que tu padre
celestial te lo regala para que hagas un bien social y esto es lo mejor. A la vida no viniste a lo que crees que
viniste.
Nuestra imaginación es una bodega
de sonrisas y momentos hermosos.
Pobre no es el que no tiene
dinero, si no el que carece de imaginación’’.
Al bajar Teresa, subió Luke. Dijo.
‘’Ideólogos. Escritores.
Pensadores.
Cada uno tiene un lente. La vista conceptual de cada planeta tiene un
lente. Cada cristal tiene una graduación
y cada graduación una forma de ver y juzgar.
Si nos intercambiamos los lentes, él verá lo mío y yo lo de él.
Pero cada quién defiende su lente
y ve con su graduación, y se aferra a lo que piensa y no comprende la visión de
otro. He ahí el ego en el lente. La graduación aumenta cada vez y somos más
ciegos. Ponte el lente sabio y atravesarás
la superficie’’.
Antes de que Luke bajara del
estrado un alma del público le gritó.
Dinos ¿cuál es el lente sabio.
Luke contestó – ‘’Tu regreso a la tierra donde harás lo contrario a todo
lo que hiciste, ese es’’. Y bajó de
escena para que subiera Azale.
Azale habló de amistad.
Son amigos tuyos solo aquellos
que te conocen. Los extraños te conocen,
porque solo a ellos les platicas tus adentros.
A tus cercanos no le platicas tus secretos privados.
Los cercanos no son tus amigos,
no te conocen, ni tu esposa ni tus padres conocen tus secretos, solo los
extraños porque de ellos no te apenas y ellos no te culpan.
Los humanos hablan con mi señor y
no lo saben. Le muestran sus
prepotencias a él. Al verlo creen que es
un pordiosero o un lavacoches y cuando se inclinan creen que hablan con el creador.
Lo que odian amo y lo que amo
odian por lo mismo deben regresar a sus planetas.
No invierten la fe para promesa
futura, invierten futuro para ganar el ahora.
¿No saben que en las 7
generaciones sus padres fueron sus hijos y sus hijos sus padres. ¿Y que los amigos siempre fueron amigos. Porque en las órbitas de las manecillas todos
vuelven a verse en los nuevos escenarios con papeles invertidos. Pero solo los amigos regresan en sincronía de
los mismos encuentros en otro tiempo y edad.
Ustedes desatan cuando deben atar
y atan cuando deben desatar. Atar y
desatar tiene tiempos.
Después de la angustia viene el
triunfo y después del éxito la angustia.
Si preferimos el éxito he aquí al final la angustia. Porque la vanidad no puede derribar al
sufrimiento.
No busques éxito, tampoco
triunfo, y esa será tu corona.
Pero no es corona de materiales
ni terrestres pues ésta de la que hablo es invisible y ustedes no la ven. No es
el reino del mundo de ustedes, si no el reino de este mundo Celeste.
Cuando seas coronado por un ángel
ya no te importará ser pobre y feo porque adentro tienes lo que les falta a los
terrestres.
Si pensaran al revés. Si caminaran al contrario, si se negaran así
mismos, conocieran el curso de los sucesos’’.
Azale iba bajando del estrado
cuando oyó unos gritos. Eran los
representantes eclesiásticos los cuales aun pensaban que ellos eran limpios.
Ángel Azale. ¿A nosotros que puedes decirnos¿. Nosotros salvamos a muchas almas. Predicamos y demostramos nuestra sabiduría
con hechos.
Azale contestó. ‘’Mienten, a un ángel no pueden
engañarlo. Vayan y vivan otras 7 vidas
más y no prediquen nada a la sociedad.
Entren en un cuarto cerrado donde ningún terrestre los vea y predíquense
a ustedes mismos su sabiduría. Eso lo
harán 3 veces diarias, día y noche. Esa
será la penitencia no por castigo si no por necesidad de hacer más pequeña su
ignorancia’’.
Entonces el ángel Azale bajó y le
dio un beso a Jumael, y le dijo. Tú me
salvaste con tu libro. Y lo que fue
alguna vez carnal en ti y en mí, ahora es celestial. Tu ojo es mi ojo, tu verdad es mi verdad y
aunque cada individuo tiene su ángulo, juicio y edad pisamos el mismo planeta,
y tenemos un estándar de juicio terrestre, pero cada planeta tiene sus
habitantes que ven las mismas cosas que nosotros no vemos y su estandart es
diferente al de nosotros.
Azale, recuerda que mi padre nos
creó y su hijo es el promotor de esa verdad la cual el promovió en mí y yo
promoví en ti. Ya sabes que este lugar poderoso es la idea de mi padre la cual
su hijo difundió en el universo y todas las mentes llegamos a confluir en esta
misma verdad y le dimos existencia a este lugar metafísico que fue creado para
nosotros.
Las ciudades celestiales son
naves.
Ciudades enormes construidas en
el espacio. A diferencia de las ciudades
terrenales construidas en los planetas y edificadas con los mismos materiales y
elementos constitutivos del astro, no podían ser vistas por ojos carnales. Es decir, mi nueva capacidad celestial de
poder ver todo lo existente, excepto la mente de mi padre en su totalidad, y la
incapacidad de los humanos de poder vernos con sus sentidos físicos haciéndonos
visibles ante ellos hasta que en su interior encuentren la formula capaz
hallando el profundo hilo de la comunicación con nosotros y mi padre.
Una vez establecida ésta
comunicación cuerpo-espíritu, tierra y cielo, superficie e interior o espíritu
humano con espíritu angelical, los cuales son iguales, pero el proceso de sus 6
reencarnaciones hacen de la séptima dese encarnación una presencia de
principios muy especial, los espíritus aun metidos en cuerpos humanos ya pueden
discernir todo lo celestial.
La vista espiritual no contiene
en sus imágenes ningún material físico, pero hay una imagen no vista, si no
sentida, es decir que el ojo espiritual es un tipo de imaginación más poderosa
que el ojo físico, más capaz y perceptora en lejanías y detalle con un infinito
pixelaje en su captura, que telescopios y microscopios existentes.
Las ciudades celestiales están
construidas con metales hermosos y piedras preciosas imperecederos y no hay
tormenta alguna que las dañe porque sus cimientos son espirituales y los
constructores de esto fincaron su propio pensamiento en el interno ser de
sabiduría y no en la superficie donde no se puede anclar con fuerza, si no que
supieron que el ojo de la imaginación era la base para volar y no el ojo
superficial físico que depende su
existencia de la carne.
Las ciudades celestiales son
transparentes para un humano, cristalinas como fantasmas, invisibles pero su
energía si puede sentirse y percibirse por un espíritu terrestre. El motor y la combustión de las ciudades
celestes es maquinaria de conocimientos, es decir, que un gran grupo de ángeles
unen sus sabias mentes y se forma una biología espiritual o un principio físico
matemático en el cual se hace posible ésta gran nave digitalizada por el pensamiento.
Toda ésta información estaba
escribiéndola en mi libro una vez desmaterializado el cual se enviaría por
mensaje de la red celestial a un niño ya cumplidos sus 7 años, se depositará en
Belén, el actual Emmanuel del mundo y protagonista de la actual generación de
elegidos.
Nuestros ángeles cuando viajan y
es necesario transfigurarse, se transforman en lo que ellos desean, pero casi
siempre al entrar en la atmósfera terrestre se hacen ver como carros de fuego y
en otros tiempos en carros esféricos como torbellinos veloces iluminados.
Todos los seres extra celestes,
los planetarios, de cualquier galaxia o sistema, están compuestos de una parte
angelical forrada del elemento constitutivo de su planeta, la carne de su
hábitat así que ésta parte angelical escondida no puede verse, por ello hasta
entenderse y percibirse y poder des encarnarse o desmaterializarse y volar a su
siguiente hábitat, el cielo.
Enseguida capturé éste
conocimiento, agregué al mensaje la dirección etérea para el envío, e inmediatamente
apareció como enviado en la mente de Belén, el hijo del hombre. Cerré mi pantalla y me fui con mis
compañeros.
Había una nueva misión para Luke,
Azale, Teresa y Jumael yo, pero antes
teníamos una cita con el secretario general del universo, el arcángel Miguel
quien no daría la entrada con mi padre el gobernador universal.
Cada capacidad angelical
automáticamente tenía una jerarquía donde el nivel de entendimiento nos daba un
título y una misión internamente y nuestras misiones aparecían en nuestras
pantallas ya con las fechas de ejecución.
Cada misión es una gran cena o
comida, nuestros alimentos son los actos o misiones, y nuestra hambre salvar,
enseñar, crecer y ejecutar misiones es alimentar nuestro estómago que pide
sabiduría. Todos los conocimientos
corren por nuestros cables y llegan al corazón que es la mente del gran ojo
sabio. Nuestras satisfacciones van a dar
al estómago saciando de sabiduría nuestra hambre. Jamás nos falta el alimento tampoco el hambre
para ejecutar misiones.
Al llegar con Miguel, en su
oficina estaban Gabriel, Rafael, Suryal y Uriel delegados de las jurisdicciones
que rodeaban el tercer cielo junto a otros 2 arcángeles.
Ellos son Teresa, Azale, Luke y
Jumael. Mucho gusto. Dijeron.
Ellos son nuevos y Jumael su jefe delegado de la tierra el minúsculo
planeta que produce 144,000 cada generación, de 12 tribus.
Rafael dijo- tomen mi mano. Nos
dio su brazo y nos dirigió a un túnel hasta llegar a una biblioteca. El día de
hoy les enseñaré la palabra ‘’Creación’’ dijo.
Tomen un libro cada uno. Pongan en su portada la palabra ‘’Creación’’
y ábranlo.
Al abrirlo apareció una súper pantalla
y el actor era nuestro Padre Altísimo.
Su imagen de un viejo muy viejo y potente. Levantó su mano y la introdujo en su propio y
limpio corazón. Tomó una célula de su
corazón y la metió en un baúl. Después
con su misma mano tomó un éter celeste.
Enseguida estiró su mano, tomó un poco de tierra de un planeta y la hizo
lodo. Sacó la célula del baúl y la puso
en el centro del éter celeste y después a estos dos compuestos los cubrió de
lodo. Una vez forrados los dos
compuestos de lodo, hizo algunos agujeros para que hubiese una respiración de
los compuestos. Hizo dos ojos, uno de
éter y el otro de lodo. El ojo celeste
lo introdujo dentro en el éter y la célula y el ojo de lodo lo dejó en la superficie y lo
conectó a la energía.
Sopló en el orificio y se
activaron los sentidos. Al enviar los 5
sentidos su primer mensaje se activó la mente.
Nació el juicio. Había creado un
ser físico biológico material.
Entonces yo Jumael levanté mi
mano y pregunté. Padre. ¿Porqué conectaste el ojo superficial y el
interno, no¿.
‘’Porque el interno lo conectarán
ustedes a cierto tiempo de sus existencias.
Algunos antes y otros después. El
que primero se percate del ojo interno tratará de conectarlo.
El que después se percate tardará
más en llegar a ser un ángel porque el ojo interno es el único medio de
comunicación con tu espíritu, con el hijo del padre y con el padre mismo y sus
huestes celestiales´´. Contestó.
Nosotros entendimos que la célula
se llamaba alma, el éter espíritu y el lodo cuerpo físico. Al soplar activó la célula y al conectar el
ojo, los sentidos. Pero el ojo interno estaría
desconectado, un tiempo dormido, hasta que la mente y el juicio con las mismas
incógnitas e inquietudes sobre la existencia nos hicieran buscar dicho ojo
espiritual y empezar a percibirlo y conectarlo.
Y al conectarlo automáticamente aparece la holografía corporal interna. Las pantallas conectadas al gran ojo y todos
los archivos, carpetas, documentos y demás información. Pero la navegación y el tiempo septentrional nos
trajeron a ésta súper pantalla de sabiduría aquí en el cielo.
Al entender esto salimos de
aquella biblioteca y Uriel nos contó algo.
Nos dijo. Vean sus cuerpos.
Ya crecieron. Cada aprendizaje que tuviéramos de nuestros
maestros los Arcángeles y sobre todo de nuestro Altísimo Padre nosotros
creceríamos. Yo crecí un metro más, es
decir que mi estatura tamaño era de 8 metros.
Azale ahora medía 7 metros, Luke 7 metros y Teresa 5 la más pequeña.
Uriel dijo. En el cielo no hay peligro pero dentro de la
grandeza de la sabiduría de ustedes aun puede penetrar Satán en forma
disfrazada. Satán se disfraza pero hay
algún detalle que lo descubre y lo delata, los actos negativos.
Los tamaños de ustedes de acuerdo
a sus capacidades aun corren riesgos. Y
nos contó sobre algunos ángeles revelados los cuales descendieron a la tierra y
se hicieron de mujeres carnales y tuvieron hijos gigantes. Eran 200 revelados. Descendieron sobre Aradis en el monte de
Armón. Samyasa su jefe trató de evitar
el evento más no pudo. Entonces
Samyaza supremo se sintió desobedecido
por los demás jefes.
Urakabarameel, Akibeel, Tamiel, Ramuel,
Danel, Azkeel, Asael, Armers, Batraal, Anane, Zavebe, Samsaveel, Ertael, Turel,
Vomyael, Arazael. Todos ellos estuvieron
con mujeres humanas, todos trasfigurados los 200 terrestres y les enseñaron
astronomía, signos, astrología, sortilegios, armamentos, ornamentos y
maquillajes, encantamientos, fórmulas y todo tipo de corrupción. A todos los engañó Satán. Eran pequeños y Satán se introdujo en el ojo
de ellos cuando ellos viajaban a algunos planetas en sus pantallas.
Entonces Miguel tomó un detector
y lo puso en nuestras pantallas.
Con esto descubrirán a Satán si
se acerca estando ustedes fuera del área celeste en sus misiones internas, y
podrán reprenderlo a lo cual huirá.
Nos dirigimos a la ‘’antesala’’
49 en el departamento 28 donde estaba una multitud de espíritus humanos
haciendo reclamos. Sus ropas eran
grises, algunas más blancas que otras.
Todos con palmeras en las manos.
Cabe repetir en este libro que
las antesalas que rodeaban el cielo están ubicadas en la parte de afuera del
tercer cielo, es decir en la sexta dimensión antes de la entrada al cielo, por
lo que nosotros los ángeles teníamos que salir por un túnel que nos llevaba a
cada antesala y ésta a cada departamento según la puerta.
Una vez llegados al departamento
28 vimos el alboroto.
Pedimos silencio y dijimos que
contestaríamos las preguntas de los espíritus asistentes que estaban esperando
bajo el tabernáculo la asignación de cuerpo para su siguiente vida.
Se oyó la voz de uno de ellos.
Dijo. ¿Porqué nuestro padre nos puso
tanta miseria, enfermedad y tempestades¿
Se oyó otro diciendo. ¿Porqué tenemos que soportar cargas tan
pesadas¿
Otro. ¿Porqué mi hijo nació ciego¿ otro. ¿Porqué a mi papá lo mató un muro de un
edificio al ir pasando¿
¿Porqué tenemos que sufrir y
después morir¿. Otro. ¿Porqué nos traes
un terremoto inesperado y tanta sangre derramada con ello.
Entonces subí al estrado y
dije. Seré breve.
Pregunté ¿En qué trabajaba tu
padre¿
Era un gran reportero, periodista de hechos
policiacos. Contestó.
Respondí ‘’Tu papá vivía de las
desgracias y el reportaba cada accidente, cada matanza y cada derrame de
sangre. Esa era su especialidad
profesional y sin esas desgracias el no tendría empleo. Tanto que al morir él aplastado por la
columna del edificio sus mismos compañeros cubrieron el reporte en el mismo
periódico de su propio trabajo’’.
Mi hijo era doctor. Dijo otro.
Tu hijo curaba enfermos. Sanaba desgracias. Y sin las desgracias en el mundo no
existirían médicos.
Dijo otro. Yo solucionaba la vivienda, fui arquitecto. Otro.
Yo solucionaba la ignorancia fui maestro. Otro dijo.
Yo solucionaba el transporte fui mecánico.
Entonces dije cada uno de ustedes
solucionó un problema, esa era su profesión solucionar problemas, y los
problemas no podrían hacerlo, no tendrían trabajo.
Entonces uno preguntó ¿Qué
pasaría si en el mundo no hubiese problemas. No tendríamos que solucionar ¿¿No
tendríamos trabajo¿
Contesté. No crecerían.
No evolucionarían y no pudieran ser eternos.
Entonces bajé del estrado y subió
Teresa. Y dijo.
‘’En el planeta y en el mundo de
ustedes hay provisiones, para todos.
Solo que algunos de ustedes se apropian de la mayor parte y a todos los
demás les tocan las menores partes. Por
eso hay miseria. Pero ahí están las 3
manifestaciones y las 3 calificaciones que mi padre universal requiere para
juzgar a los humanos y asignar cuerpos y vidas y eternidad.
¿Cuáles son las 3
manifestaciones¿ ¿Cuáles son las tres calificaciones¿
La primera manifestación es la
del rico que heredó, que explotó a sus empleados o corrompe, apropiándose de
grandes bienes, lujos y riquezas, las cuales acumula sin ayudar al
prójimo. Ésta manifestación es negativa
y mi padre le da un juicio severo para que aprenda a ayudar y ser bueno.
La segunda manifestación es la de todos
aquellos que se declaran en quiebra, cargando pesadas cargas y poco
remunerados, explotados y en la miseria, sin atención médica ni medicinas.
Ésta manifestación es
positiva. Es pura sabiduría y con esta
manifestación se muestra la tercera manifestación la cual es misericordia.
Al manifestarse la miseria salen
en ayuda los misericordiosos a los cuales nuestro padre ama y elige para éste
lugar de nosotros, el cielo.
La calificación de la primera
manifestación de poder y prepotencia recibe un cuerpo lisiado. La calificación de la segunda manifestación
que es soportar el peso recibe un cuerpo sano y capaz en la siguiente vida.
Y la calificación de la tercera
manifestación que es la misericordia recibe la eterna vida celeste con un
cuerpo poderoso.
Con esto sabrán que el mal es
necesario para que otros obtengan el bien.
Los que aplastan retardan su mundana existencia, los aplastados reciben
sabiduría de sus sufrimientos. Y los que
salvan y solucionan reciben la corona de la vida.
Bajó Teresa y subieron Azale y
Luke.
Azale dijo – si mi señor fuese de
nuevo con ustedes, descendiendo a la tierra vestido de hombre como en Jesús, lo
matarían de nuevo como lo hicieron los judíos.
Ha descendido el ‘’mensaje’’ a la tierra nuevamente y nuevamente le matarán
y derramarán su sangre de cordero pero el mensaje no morirá, ese se esparcirá,
se difundirá, es como la sangre rociada y esparcida de los sacrificios y
holocaustos y esa sangre representa dar la vida en rescate y ese es el
‘’mensaje’’.
Luke dijo – ustedes adoran la publicidad, no el
producto. Son expertos en comercializar
imagen, en publicar a los sabios, sin creer en su sabiduría.
Adoren la palabra, no al que la
dijo. No adoren al sabio adoren lo que
el sabio dijo. El mensaje. No hagan imagen del sabio para publicarla,
publiquen el mensaje, y más aun hagan lo que dice el mensaje, háganlo realidad.
A nuestro padre déjenlo, no lo
adoren, adoren su pensamiento su consejo.
No le canten, ni lo alaben, hagan lo que el dijo que hicieran, amen,
ayuden, ya dejen de alabar de hablar, hagan y no homenajeen a Dios que eso no
mejorará el mundo, mejor homenajeen el mensaje de Dios.
A Dios déjenlo, que es está en su
aposento y no necesita nada, son ustedes los que necesitan llevar a cabo el
mensaje que él dejó en la tierra habitada para ustedes.
Una vez terminadas estas
sesiones, yo Jumael recibí un mensaje en mi pantalla. Al verlo sentí la presencia de mi padre
terrestre. Apareció ante mí Eriló. El ángel edificador, conocedor de todo tipo
de construcción celestial, quien edificaba y decoraba todo sentimiento
celestial imaginativo junto con sus ayudantes que eran ángeles de más de 15
metros en su mayoría, conocedores y más sabios que su propio jefe. Cabe mencionar que Eriló media 9 metros y
recién acabado de llegar al cielo antes que yo tomó protesta como el mejor
constructor. Porque excepto los
arcángeles de los cuales sus jerarquías son más altas en los que tienen
más capacidad y entendimiento, en los
demás y sobre todo en los ángeles los jefes son los que menos saben. Todos los ángeles pueden ser jefes por el
hecho de ser ángeles pero los más grandes serán más humildes aun demostrándolo
con su servidumbre.
Lo abracé y dije hermano has
vencido.
Eriló en su séptima vida fue
padre de la humana Ruth y su nombre Guadalupe.
No sentí amor de padre porque los
ángeles no somos carnales ni amamos la sangre.
Los ángeles amamos a todos los seres existentes en el universo y nuestra
misión es rescatar a los que no entienden.
Eriló dijo. Hermano Jumael serás
Elías de nuevo y por orden de mi padre descenderás a nuestro antiguo planeta
para reconstruir la iglesia.
Yo Jumael había sido el raptado
Henok y el desaparecido Elías que dejó sus ropas. Pero no había entrado al cielo por la
debilidad de mis pasiones y la falta de fortaleza espiritual.
Mi señor me habló y yo
acudí. Me dijo.
Irás a tu planeta, el tercer
planeta habitado de tu sistema, y les dirás lo siguiente. Ya paren de adorarme, de cantarme y alabarme,
así dijo mi padre. No piensen en mí solo tomen mi consejo y ejecútenlo.
Se preparó mi viaje. Dentro de mi pantalla estaba una nave de
diseño digital para mostrar en la atmósfera terrenal.
Solo encontré el cable de
conexión terrestre y en un segundo mi pensamiento me transportó a la atmósfera
terrestre la cual está en la tercera dimensión de 6 lados y acudí a la
transfiguración de la nave. Descendí en
un monte del país Griego y me dejé ver de un monje que solo vivía investigando
la astrología y las estrellas y luces raras eran su filmación.
En el patio del abandonado
monasterio descendí y el hombre cayó inclinado cuando el aparato tecnológico
aterrizó y dejó de girar. Incado con la
boca abierta de la impresión vio que se abrió la puerta del iluminado carro de
luz y salí yo Elías descendiendo a pisar tierra y el hombre desmayó.
Al despertar el hombre estaba en
el interior de su aposento y yo a su lado.
Al verme no supo si era el mismo de la nave y preguntó. Se levantó y verificó pero no había rastros
de la nave. En su cámara tampoco video.
¿Quién eres dijo¿.
Alguien que te cuida y te puso en
tu cama. Contesté.
¿Tú nombre¿. Jumael Elías – dije.
Eran las nueve de la noche. Se levantó rápidamente y me cocinó cena. Tomamos café y platicamos de él. Preparó mi dormitorio y en cuanto se durmió,
desaparecí.
Aparecí en Roma. Entré a un templo. Interrumpí la misa y hablé. El sacerdote me dijo - veo que no está de acuerdo. Pasa y lee la biblia. Pasé al frente de los feligreses y hablé.
‘’Traigo un mensaje. Desde hoy quitaré los templos con todos sus
adornos. No quiero ver mi imagen entre
ustedes. Derrumbaré imágenes. Todas las tiendas difundidoras de mi
fotografía representativa ante ustedes.
No soy candidato de campaña política.
Ni decoración de casas ni
templos. Ni razón social ni leyenda de
libros y pendones.
Soy la sabiduría y el amor
activo. No el amor hablado si no el que se demuestra. Ni los templos, ni los estatutos dejaré,
porque yo soy ayuda no templos.
¿Recuerden el día que pasó el
meteoro de 40 metros¿ Ese día llegó la
luz de la nueva era, nació el mensaje en ésta tierra, el cambio de
conciencia’’.
Aparecí en un país
Norteamericano. Supe de un joven
curandero famoso, odiado por la iglesia al cual querían linchar.
Fui a buscarlo. Era Belén, el mensaje. Estuve con él. Me incliné y le dije Oh mi señor, me inclino ante la sabiduría de
mi padre me dijo- ve y has tu misión.
Llegué a un templo y anuncié el
mensaje.
‘’Salgan de estos edificios de
piedra porque se derrumbarán. No son
necesarios. Las palabras aquí dichas no
se ejecutan. Salgan de aquí y ejecuten
la voluntad del padre. Ya no
difundan. Ya no prediquen, ni alaben
solo ayuden, comprendan, entiendan y amen.
En ese momento se empezaron a
derrumbar las iglesias y templos de todas las religiones y sectas. Puesto que los elegidos eran los dadivosos y
pensadores, los perdonadores y amorosos, los ayudadores y misericordiosos y
ellos no tenían templo solo les alcanzaba el tiempo para ayudar a los
necesitados con la boca callada y sin plegarias de ningún tipo.
Esto fue una conmoción, suspenso
y grandes sustos de la humanidad.
La noticia eclesiástica mundial
generó la atención con mundo en alerta.
Por otro lado en mi interna web
apareció mensaje. Una cita en el
pináculo de la montaña.
El hijo del hombre nos dio
cita. Mi padre dio misiones a los
ángeles encargados de la tierra. A los
jefes.
Aparecimos en el pináculo. Mi querido Azale, Luke y Teresa. Belén dijo pónganse cómodos. Cada uno de los cuatro tomamos nuestro mejor
asiento. Convertimos internamente a la
montaña en el mejor auditorio virtual para escuchar las palabras de nuestro
señor H Emmanuel Miguel.
‘’Como ustedes saben, mi nuevo
descenso en vehículo carnal se debe a un mensaje que dejaré a la humanidad.
Mi padre tuvo a bien
comisionarlos para que me ayuden a guerrear con el poder interno de nuestro
verbo, contra ciertos males temporales del humano. Esta guerra verbal poderosa la haremos en
pocos días porque la profecía depende de la decisión de mi padre y de nadie
más. Hace escasos cien años se dio
inicio a una serie de sucesos revelados a Juan en Patmos, las últimas palabras
de la revelación y el capítulo de los 1000 años de paz iniciará en éste mundo
terrestre.
Recuerden la guerra del
cielo. Aventé a Satán a la tierra por
orden de mi padre, para que sus propios ayudantes fueran quemados en
Meguidó. Nuestro hermano el ejecutor
está vivo. No podemos dejar manco a mi
padre, y encadené a Satán y lo puse en el hoyo del abismo de su propio yo
infernal en la sexta dimensión. Después
lo soltaremos. Ahora actuará la mano
derecha y la izquierda estará inactiva.
Orden de mi padre.
Por eso están aquí ‘’orden
celestial’’ son ustedes. En estos
momentos yo Belén soy de carne y tendré que padecer habiendo ya cumplido los 33
años en la tierra pues se acaba mi misión habiendo ya esparcido el mensaje que
inicia una generación antes contigo Elías, donde tecleaste y difundiste el
‘’Viaje al Corazón’’ el cual está abriendo los ojos de la humanidad a la nueva
conciencia.
Belén levantó su mano y
dijo. Jumael Elías ven.
Me puse ante él y me
incliné. –Si mi señor H dije. Se que mi padre está escribiendo en tu
ojo. Se que tu siguiente libro se llama
´´el secreto de la existencia’’ y este escrito será esparcido por ti mismo al
lado de tu compañero Azale en la tierra a inicios del milenio de paz’’.
Por esto les diré que harán en
estos últimos días en la tierra.
Hace poco estuve en las más
grandes ciudades tales como Tokio, Corea del Sur, Sao Paulo y D.F. y difundí el
mensaje. Dicho mensaje es el siguiente.
‘’Al final de mis días vendrán 4
comandantes del cielo’’ y destruirán los restos de la iniquidad que quedó, el
cual es un virus persistente en las conciencias humanas que a pesar de las
fechas de los hechos apocalípticos aun hay una fecha la cual es esta para
acabar con este virus y dar entrada a dicho milenio.
Sabemos que estas ciudades fueron
reconstruidas en menos de 50 años después de la ecatombe y con materiales más
tecnológicos. Aunque toda torre alta
cayó y los collados se desmoronaron, el anticristo se quemó, la bestia, las
carnes devoradas del vaticano por sus naciones unidas y en fin de nuevo detectamos
la infección que tendrá que ser exterminada para esta era de paz prometida.
Más de la mitad de la humanidad
murió en el cataclismo apocalíptico, y dentro la catástrofe y la mortandad, los
que quedaron volvieron a construir las ciudades aunque no de igual esplendor
porque el desastre y la ruina fueron grandes y es un suceso reciente.
Debo decirles que este jueves
entraré triunfante y en un sencillo vehículo acompañado de miles de mis
seguidores a dar mi última conferencia en la ciudad de Nueva York. Mis doce promotores estarán abriendo espacio
para que este magistral mensaje se difunda a las afueras de las catedrales de
San Juan el Divino y San Patricio. Sin
embargo se que mis promotores son aprendices y completamente humanos y con esto
abrirán los ojos antes de los demás. Uno
de ellos ha estado actuando en mi contra.
Pero eso es bueno porque es orden de mi padre. El virus del cáncer le tentó a él en
presencia mía.
Su nombre es Queriot y es uno de
mis doce.
Entraré el jueves. Ya tengo reservaciones en un hotel
humilde. Estaremos reunidos
velando.
Haremos un brindis y Queriot
desaparecerá para su plan con el Cardenal y el Arzobispo.
Ustedes ya conocen la ecatombe y
la inmolación’’.
Vayan, hagan sus misiones.
Entonces Belén se levantó y puso
su dedo en el ojo de mí Jumael y se grabaron las misiones de cada uno. Y dijo – vayan.
Entonces aparecieron sus alas de
arcángel y desapareció.
Teresa dijo - te escuchamos Jumael.
Pues bien, dije- escuchen. Atención.
Yo seguiré reprendiendo las
catedrales de las ciudades y ustedes irán cada uno a su misión.
Luke . Te encargarás de purificar el organismo y la
mente de los humanos mediante una negociación con los principales jefes salidos
de la herencia de sus cárteles. Después
de esto habrás desintoxicado el mundo.
Irás a todo el mundo y buscarás a Kennedy, Ishii, Lehder, Blanco,
Lansky, Capone, Escobar, Carrillo y Loera. Los reunirás y con el filo de tu
espada verbal los destruirás.
Teresa. Irás primero a Georgia. Aparecerán en tu pantalla algunos
letreros. Te guiarás uno tras otro.
Pemberton te guiará a Robinson y
Candler a Wood Ruff. Ellos a Panamco y
Femsa y estos con Holding ahí podrás ver al que está detrás de todos
ellos. Te paras ante él y lo destruyes
con tu boca, y luego lo resucitas con una pantalla en su pecho.
Después de esto irás con sus
seguidores, y los reunirás en una cumbre privada. Ellos son Arnault, Elison, Mittal, Ortega,
Ambani, Walton, Batista, Buffer, Helú y Gates.
Dichos personajes son los dueños de los 10 pedazos de tierra
dividido por el poder. Harás lo mismo. Les hablarás y hallarán su muerte. También los resucitarás con una pantalla en
su pecho. Ellos son los principales
patrocinadores de las campañas. Ellos te
dirán el nombre del Presidente Mundial, con el cual también hablarás. El que da la cara política y representa la
unión de Naciones. Harás con él, el mismo acto mortal con
el poder de las palabras pero antes él te dirá el nombre del que está detrás de
todo esto, el más poderoso, el que no es figura pública si no que ordena
bélicamente donde quitar y poner. Con él
hablarás tranquilamente y esperarás a que llegue yo porque es peligroso, es
decir que él no es humano si no que es el heredero que quedó del virus
catastrófico apocalíptico del oscuro. Si
lo matas revivirá porque su madre está en el centro del océano del que
tendremos las coordenadas, la serpiente del mar, Leviatán el dragón y
automáticamente morirán el huidizo y el tortuoso. Así acabarán sus días e iniciará sin ellos la
tierra prometida en paz.
Azale. Mi fiel
compañero. Tú me ayudarás como siempre
con los Dioses de la tierra y con los representantes heredero de la palabra que
no han sabido conducir el mundo a la sabiduría.
Gira en tu pantalla y mientras conduces el pasado te
encontrarás con los herederos actuales a los cuales debes reprender con tu
poder verbal.
Iras primero a la apostólica Éfeso, seguirás con la
perseguida Esmirna, con la pérgamo imperial, la católica Tiatira, La Sardis
Apostata. La misionera Filadelfia y La
odisea Iluminada.
Perdonarás a las dos últimas. Ellas permanecerán como
remanente. Destruirás por completo a
Sardis y La Odicea. A Pérgamo, Éfeso y
Tiatira las cuales paganas, ortodoxas y heréticas tendrán derecho a
resurrección con nueva pantalla pero dentro de sus limitaciones hallarán
también la difícil tarea de reconstruirse.
Vayan pues mis hermanos.
Yo Jumael me encargaré de que la misión
se cumpla y estaré viajando en mi pantalla a las principales ciudades
del verbo, a Sinaí, Israel y Europa, países árabes, Medio Oriente y Turquía,
Nora frica, Filipinas y Estados Unidos.
A la India a Malacia, Tailandia, Vietnam, Birmania, Camboya, Sri Lanka y
Laos. Al final viajaré a todo el planeta
Zona Indo, Asía Meridional y África.
Buscaré a todos los herederos religiosos y los reprenderé.
Después nos reuniremos con Belén el domingo en el centro de
la tierra antes de su resurrección. Ahí
daremos por concluido y nos regresaremos a nuestro padre celestial. Usen sus espíritus con eficacia y audacia y
cuídense de alguna infección satánica penetrante, recuerden que Belén Jesús es
nuestro Miguel poderoso con un espíritu en carne, no es trasfigurado, si no
realmente forrado de carne para que sienta su sufrimiento de cordero. En cambio nosotros somos trasfigurados
solamente en carne ante los ojos a
terrestres pero una vez en la atmósfera nuestra tecnología es poderosa.
Por otro lado Belén, Jesús, Emmanuel, ya con sus 33 años de
edad entró un jueves a la Ciudad de Nueva York regalando a todo el mundo los
antiguos libros de ‘’Viaje al Corazón’’ primera y segunda parte, escrito por
sus ancestros y madre Ruth.
Se instaló con los doce promotores del mensaje en un hotel
modesto, cerca de un monte a las orillas del río Hudson en Borough. Hiso varias peregrinaciones ese día. Visitó la catedral de San Juan el Divino y
estuvo predicando en la explanada difundiendo el ‘’Viaje al Corazón’’,
regalando libros al lado de sus promotores y una multitud los cuales escuchaban
de la venida de Elías y sus tres comandantes del cielo. ‘’La orden celestial’’.
Ya de noche regresaron a sus habitaciones y se reunieron en
un salón para la cena. Brindaron los
doce junto con el maestro Belén. Dentro
de la multitud había una mujer que le había seguido hasta su habitación de
igual forma con admiración le habló preguntándole si podía platicar un momento
con él. Belén accedió. Lo vieron algunos de los ayudantes
promotores, que se apartó con aquella bella mujer pensando que el maestro era
atraído por ella y le tomaron unas fotografías Queriot y Didimo. Pero ella no
trataba de seducirlo solo quería servirle, y el maestro una vez que le
respondió la pregunta, volvió a su lugar de la mesa. El nombre de ella es Migda-El.
Belén dijo – Atención.
‘’Esta noche será difícil, debemos estar alertas porque al
gobierno no le ha gustado nuestro libro.
Tampoco quieren que sus ciudadanos habrán los ojos.
Los medios de comunicación solo difunden basura. A nosotros nos ponen como revelados con el
sistema y la iglesia. Así que no esperen
nada bueno de parte de las autoridades que piensan que somos unos revoltosos’’.
‘’Yo me iré pronto, puesto que uno de ustedes es amigo de
ellos. Quizá un traidor conectado con el
Gobierno de Estados Unidos que por ambición hará que este proyecto de difusión
hoy termine’’.
Entre la plática Queriot se levantó y se fue, tomó su
maletín y dejando la cena a medias desapareció.
Una vez terminada la cena y el brindis se levantó Belén y
con él Andreía, Yeagob, Bar Tolomay, Philoshipos, Simós, Didimo, Yohanan, Petra
Cefas, Lika Leví, Markos y Matathah Leví.
A ciertas horas de la madrugada estando Belén en reflexión,
apareció Queriot y le manifestó su cariño.
Detrás de él estaban un grupo de militares los cuales
entraron hasta los espacios del porque del hotel colindantes con el monte donde
estaba Belén.
La C.I.A. y la Interpol.
Al saber esto los promotores del Maestro Belén huyeron todos y se
escondieron en los espacios y edificios aledaños. Solo Petra Cefas se enfrentó a ellos pero el
maestro se lo prohibió.
Se lo llevaron arrestado.
Queriot desapareció. Cada uno de
los promotores del mensaje tomó su propio rumbo. Yohanan trató de seguir los pasos de los
militares.
Lo llevaron al Police Departament y después lo trasladaron a
la cede de la Arquidiócesis de la iglesia en la catedral San Patricio.
Una vez depositado ahí, el sacerdote entregó en secreto 30
mil dólares a Queriot. Viernes por la
mañana empezaron a entrevistar a Belén.
Pero él no decía nada. Ni al
sacerdote ni al cardenal. Las
acusaciones eran graves.
Entonces lo trasladaron al County Courthouse y lo pusieron
tras las rejas mientras llegaba el jefe policiaco.
Al llegar lo sacaron y este lo entrevistó.
¿De qué te acusa la iglesia¿ -preguntó.
-
De promocionar un libro y darlo gratis.
-
¿Qué tipo de libro¿
-
El mensaje.
-
¿Qué dice el mensaje
No respondió.
-
¿Qué dice el mensaje¿
Descubran su ojo interno central y encuentren su holografía
¿Porqué compites con la iglesia¿
Mi mensaje no es humano, si no virtual.
Entonces llamó al Cardenal y le dijo que no era
peligroso. El Cardenal dijo que no podía
seguir libre y que habría que fusilarlo.
Le dijo el jefe - y
¿Porqué no fusilas a tanto criminal y homicida que tienes tras las rejas¿
El cardenal quedó en silencio pero luego insistió en el
fusilamiento o la silla eléctrica.
-
Creo que este hombre nos hará más daño que
cualquiera de los rateros y homicidas
Encerrados. El jefe
quedó pensativo y dijo. Quizá tengas
razón pero fusílalo tú yo no lo haré.
Entonces el Cardenal acordó con el Departamento de Policía y
ese mismo día lo empezaron a torturar.
Los únicos que se asomaban a verlo eran su padre Florencio y
Yohanan. Petra Cefas rondaba queriendo
encontrarlo pero lo vieron y por miedo a ser reconocido huyó.
Ese mismo viernes lo sujetaron a un carro de carnaval y lo
llevaron esposado arrastrando unas pesadas cadenas, por la quinta Avenida bajando
por la calle 48 hasta llegar a la primera avenida. Ahí en el Central Park fue desatado. Lo subieron a un templete y en público lo
sentaron en la silla eléctrica conectándolo y así quedó electrocutado. Su padre lo desconectó ya muerto y Yohanan
lloraba a su lado.
LAS VIRGENES DEL
MUNDO.
Una vez llegados al cielo abrieron en sus propias pantallas
la opción cielo y entraron en sintonía, quitaron la opción tierra y volvieron a
sus trabajos.
Estaba preparada una convención en el Departamento 66 a las orillas
del cielo en la acostumbrada antesala que colinda con el infierno la dimensión
oscura.
El orador de este evento será Miguel – dijo Jumael – pero
nosotros debemos asistir. El asunto es
abrir los ojos de más de 100 vírgenes terrestres las cuales son espíritus
engañados por los intereses de los humanos.
En el cielo el tiempo es relativo. Sin embargo hasta los ángeles tienen edad,
tamaño en base a su rango de sabiduría.
Por lo mismo los espacios y distancias celestes son muy amplios.
Entraron todos juntos al departamento 66 en el cual los
ángeles solo podían atender a personajes históricos con mucha herejía. Entraron
las vírgenes frente a los ángeles y cada una tomó su lugar. Al otro lado los arcángeles así como los
ayudantes, rangos pequeños y grandes, porque también habrían de escuchar lo que
Miguel diría como juicio a las vírgenes.
Miguel subió al estrado y dijo - He aquí más de 100 vírgenes de falsa fe solo
del planeta tierra y de ninguno otro de los millones de planetas del universo.
Una virgen habló y dijo – Señor de señores - dime de quien soy hija- Miguel contestó, no solo tú si no todas son
hijas de los hombres. La única hija de
mi padre quien diera a luz a Jesús y después a Belén, a quien le tocó ser mi
madre terrestre es Jumael, aquí presente, pero ustedes son falsas, y ahora yo
les ayudaré a encontrar su destino.
Ernesto, Elías, María, Ruth, son Jumael mi gran hermano
quien diera a luz una sabiduría en la tierra, un mensaje real. Ustedes son fantasía. 66 de ustedes son mujeres a quienes
canonizaron por haber dado una buena imagen al mundo, pero ustedes aceptaron
aun vivas los honores y homenajes de los hombres y honraron las banderas de
ellos para recibir las coronas
religiosas las cuales odia mi padre. Ustedes 66 fueron mujeres humanas que
murieron con honores y después la iglesia las nombró salvadoras y les llamó
María y las difundió en el mundo imprimiendo imágenes y estatuas y todo tipo de
adorno, estampas, medallas de comercio en el mercado del mundo, grabando así en
las mentes de los humanos superficiales, la misma superficialidad de un Dios
que es falso. Ellos registraron sus
nombres y son los manejadores o representantes comerciales y todo el que creyó
será comprador de ustedes y tienen su fe en esa equivocación. Ellos creyeron en las imágenes y ustedes en
eso fueron convertidas por la iglesia.
Pero la sabiduría no es imagen. No crean que por cerrar los ojos e imaginarse
que una luz entra en su cabeza ya son sabios. No se imaginen luz, porque la luz es imagen, imagínense
el perdón y el amor del creador hacía sus hijos y el amor de los hijos hacía
sus hermanos y entonces abrirán realmente los ojos a la verdadera luz activa.
A ustedes 66 les digo que vivirán una vida más y ese
espíritu homenajeado que traen debe purificarse con la misma sencillez de la
Teresa y no se vuelvan a colgar mantos ni flores, ni adornos dorados, tampoco
símbolos de angelitos, estrellas, lunas, coronas y mucho menos resplandores
porque esos ornamentos se los puso el hombre y no son espirituales si no una simbolización
superficial de artistas, una exposición plástica sacra de artes visuales y sus
cánticos gregorianos son para relajar el cuerpo y no el espíritu.
Así que vayan de regreso a la tierra y se les asignará un
nuevo cuerpo el cual estará inválido pero sus facultades mentales tendrán salud
para que con la palabra salven humanos y sean aceptados con sello y certificado
al final en el juicio.
Miguel quedó en silencio por un minuto y se oyeron muchos
comentarios entre las vírgenes. Una
virgen habló y preguntó – Señor, dinos ¿ Quienes somos y que debemos hacer¿.
Miguel habló y dijo -
Les diré quienes son, les definiré la luz y les hablaré del indefinible
y del altísimo creador y verán que ustedes son irreales.
La realidad no es lo que ustedes ven ni lo que ven los
humanos, eso es fantasía, la realidad es la verdad y ésta solo con el ojo sabio
puede verse.
Ustedes existen pero no todo lo que existe es verdad ni
realidad porque la verdad es luz y la fantasía engaño y oscuridad. Pero todo eso existe pero sin luz es irreal.
Ustedes son los inventos del humano que dentro de su falsa
creatividad dieron su poder a la bestia y depositaron su fe en personajes
mitológicos inventados. La palabra y la
prensa son el arma más poderosa, así como la difusión de falsos personajes. Algunos creadores terrestres crearon la
imagen de ustedes y la difundieron y todos aquellos creyentes depositaron su fe
en cada una de las vírgenes inventadas y ellas tomaron vida pero sin espíritu. Se juntaron millones de éteres con las miles de
alabanzas a ustedes y ustedes empezaron a ser poderosas y conferir milagros.
Ustedes 66 no existieron como humanas y no podrán vivir.
Entonces los espíritus irreales se empezaron a desmayar y
desvanecer poco a poco mientras Miguel hablaba.
Sus éteres se estaban dispersando de uno a uno.
LA LUZ Y LA
OSCURIDAD.
Miguel prosiguió – Mi padre les envía un mensaje. ‘’Yo soy el creador, el altísimo y
absoluto. El universo infinito y habito
dentro de mi mismo y me desplazo dentro de mi propio cuerpo. No tengo final, ni superficie, no tengo piel
ni contornos porque nunca termina mi espacio, soy indefinible para ustedes, el
alfa y el omega, el principio y el fin.
Todos los seres habitan en mí. La luz y la oscuridad me pertenecen, soy dos
luz y oscuridad, soy un grupo y son una unidad, el todo.
No soy un concepto creado por ustedes si no por mí. Ustedes tienen sus propios dioses y obedecen
a ellos. A mí no me conocen y sin
embargo los recibo y los perdono. Les
regalé la libertad de pensamiento y pueden hacer y deshacer a su gusto dentro
de mi mismo. Pero sin la verdad nadie
crecerá, solo se quedarán como insignificantes ciegos’’.
Eso ha dicho mi padre.
Ahora les diré el porqué del proceso carnal de los espíritus y el porqué
de la dualidad vida, muerte, luz y oscuridad.
La existencia es un convenio entre luz y oscuridad. Y ese documento firmado dio paso a la
sabiduría haciéndose visible en algunos humanos.
La sabiduría consiste en hacer pasar a través del tiempo por
la oscuridad a los espíritus para que puedan distinguir la luz. Al caminar por la oscuridad desarrollaron el
deseo de ver pero no pudieron, hasta que cerraron sus ojos carnales pudieron
abrir los espirituales. La oscuridad
tiene ojos y son carnales. La luz tiene
uno solo y es el sabio el de la verdad.
La vida humana es la oscuridad y la vida espiritual es la luz. En el
intro no carnal ni superficial encuentran su verdad porque la carne es la
escuela más no la profesión. Así que en
su paso por la vida humana llegaron a la espiritual la cual es luz.
Al ponerle carnes, el ojo sabio quedó encerrado y en la
oscuridad, por lo que a través de los sentidos carnales vieron lo incierto, lo
que había de parecer, de acabarse, de morir, de cambiar. Pero al morir las facultades carnales, al
descomponerse el cuerpo, al llegar la vejez, supieron que la verdad está en el
centro del ser, no afuera donde la buscaban.
A un luminoso cuadro le pones un marco oscuro y así podrás
distinguir su luz. Si pones la luz sobre
la luz no podrás distinguirla, tendrás que ponerla sobre la oscuridad para que
su intensidad brille y la puedas diferenciar.
Ese es el convenio porque sin sufrir jamás entenderás la felicidad y sin
carencias no tendrás gloria en tu mente.
Pero escucha. Sobre
la luz no puedes poner la oscuridad porque la oscuridad no se mueve, si no que
ésta toma poder al no entender esto.
Toma poder con la ignorancia. Es
la ignorancia la que hace guerra contra la luz y es el miedo y la inseguridad
las que no dejan encender la sabiduría, la falta de fe en la verdad.
La luz al alumbrar no destruye nada, solo destruye la
oscuridad y deja al descubierto la verdad.
Más bien construye donde no había nada.
La oscuridad tampoco destruye nada, simplemente no deja ver
la verdad. La oscuridad le teme a la luz
y no puede tomar decisiones, ni puede invadir la luz.
La luz no le teme a la oscuridad y toma al final la decisión
de alumbrar y la oscuridad automáticamente desaparece.
Para finalizar éste discurso a las vírgenes les diré – no
habrán los ojos de afuera a los adornos superficiales, si no adentro al
mensaje.
Que afuera están las estatuas e imágenes pero adentro está
mi padre. Ya no me busquen en su
exterior porque yo estoy en los actos positivos desinteresados soy la
sabiduría, el camino y la verdad para llegar a la vida eterna la cual el padre
ofrece.
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